El olor a alcohol y las luces era lo único que podía sentir a mi alrededor, estaba en un hospital y no recordaba por que, recuerdo que estaba discutiendo con Demian pero me sentía muy mareada, es lo último que recuerdo.
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-Arlet, enserio, es lo único que te pedí- me reclamó pasando sus manos por su rostro, no era capaz de mirarlo a la cara.
-Lo siento, pero ella insistió tanto, no supe decirle que no, ¿Que querías que hiciera? Es tu madre Demian
-Arlet, por dios, ¿te das cuenta? me mentiste por ella
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Sentía la mano fuerte de Demian sosteniendo la mía, mi cabeza aún daba vueltas y tenía mucha sed, en cuanto abrí los ojos vi a mi bestia, estaba sentado en una posición posiblemente incomoda mientras tomaba mi mano.
-Demian, hey- Susurre pasando mis manos por su cabello- Cariño, necesito agua.
-Oh ya despertaste- Dijo soltando mi mano y parándose rápidamente.
-Lo siento tanto, ya no estés enojado conmigo por favor, no te alejes así.
-Hey tranquila amor, solo me aleje para darte agua, respira- dijo mientras tomaba mi cara entre sus manos para darme un piquito y servirme el agua, con los nervios no entendía nada-
-Llamaré al doctor, tengo que avisar que ya despertaste.
-Buenos días bella durmiente- Dijo un hombre de bata blanca de unos cuarenta años, obviamente el doctor mientras me revisaba con una luz mis ojos
-Nos diste un susto, sufriste de un desmayo a causa del estrés de la discusión- Vi a Demian agachar su cabeza como cachorro regañado mientras tomaba mi mano.
-Nunca me había pasado algo así,¿Ahora estaré bien?
-Bueno, en tu situación es normal, las embarazadas suelen desmayarse con facilidad...
Claro, las embarazadas se desmayan
¿Embarazadas?¡¿Yo embarazada?!
Vi al doctor seguir hablando pero no lograba escucharlo, dios, yo amaría a este bebé, pero nunca se lo pregunte a demian, el estaba enfocado en su carrera y yo estaba tan asustada que no podía concentrarme en nada de lo que hablaban frente a mi.
-Arlet, ahora debes guardar la calma y evitar emociones negativas, te daré el alta ahora para que vayas a descansar a casa, recuerda que en una semana debes ver a la ginecóloga, Bestia, estas a cargo desde ahora, tengan buen día, felicitaciones.-Dijo muy campante el doctor saliendo de la habitación.
-Ya oíste al doctor amuleto, vamos a vestirte para volver a casa.
Pausadamente ,me ayudo con mi ropa ya que estaba con la típica bata de hospital, para luego salir juntos de la clínica, debió ser costoso, mi mente no paraba de maquinar malas posibilidades aunque Demian parecía tranquilo, callado pero se portaba atento, en la camioneta reino el silencio hasta llegar a casa, me ayudo a bajarme y a entrar en casa, luego se acomodo en el sofá y estiro sus brazos hacia mi, 2 minutos me demore en llegar a el, sobre el más bien.
-¿Como te sientes? Estas muy callado, si no quieres este bebé yo..
-Shh, no te atrevas mujer, estoy encantado con la noticia, solo no quería abrumarte, se que es muy pronto, pero amaré a esa cachorra con mi vida, al igual que a su madre- Dijo sonrojandome.
-Siento ocultarte lo de Amanda, ella fue insistente y yo no quería molestarte con eso
-No te preocupes más de eso, yo lo siento, me sorprendió verlas en ese bar y fui un bruto.
-Me asusté, no quería que te enojarás.
-Yo me asusté más al verte caer, gracias a dios estaba ahí para sostenerte antes de caer.-Dijo acercándome a el- Nos diste una sorpresa cachorra mía- Dijo posando sus manos sobre mi panza que pronto estaría abultada.
-Fue una linda sorpresa para ambos, te amo-Dije abrazándolo del cuello mientras el enroscaba sus brazos en mi cintura para besarme.
¿Que les pareció la sorpresa?😍 Ya se viene el final
Voten y comenten mucho💖

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Viviendo con la bestia
RomansaUna huérfana, deseando encontrar libertad terminó viviendo con la bestia