Capítulo 8: Me niego

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Me niego a darle otra oportunidad al hombre que más daño ha hecho en mi vida.

Él ha cambiado, pero cuántas veces creí eso y cuántas personas han vuelto a confiar para terminar con el alma rota porque así me siento al borde de un abismo sin futuro y sin nadie porque mi familia me ha botado como un paria alguien que los ha llenado de vergüenza y que debe morir para reparar el daño que ha provocado.

Pero, cómo fue que llegue a esté punto fácil la razón se llama Wolfgang.

Con los meses pasando me fui volviendo débil ante él, sus palabras, caricias y besos iban ablandando mi coraza de odio y decepción. En qué momento baje la guardia... fue aquel día que sentí celos al escuchar a mi mamá nombrar a esa maldita de Carla, la idea de que ellos dos estuvieran juntos me dio náuseas y odio sin razón alguna porque yo odió a Wolfgang así que no tengo motivos para sentir celos

Se supone el maldito lazo se rompió, no hay nada sobrenatural que me haga sentirme atraído por él, pero aquí estoy pensando en si él estará bien. Seguramente su familia y sobretodo su papá lo atacará como a mí.

Regresando al punto después de ese primero beso me sentí confundido porque realmente me gustó y empece a ver a Wolfgang diferente más en control los ataque de ira/celos siguen llegando, pero no me grita o golpea todo lo contrario guarda silencio busca la manera de calmarse para después abrazarme y decirme cosas bellas. Ese comportamiento se mantuvo durante semanas que se volvieron meses y los roces, abrazos acompañados de besos robados en mis mejillas que se convirtieron en besos boca a boca llenos de deseo y anhelo... de parte de ambos se repitieron infinidad de veces.

Sobre la base anterior, es obvio que sufro el síndrome de Estocolmo o simplemente los golpes me volvieron estúpido para permitir todo eso. Repito me niego ha aceptar que me estoy enamorando de Wolfgang quizás son solo las hormonas tengo 16 años pese a mi intelecto no puedo parar de pensar en sexo y tener erecciones cada 2 minutos con sueños y pensamientos húmedos cuyos protagonistas somos nosotros dos, he tratado de imaginar alguien más, pero termino siempre volviendo a sus brazos en los cuales he dejado de temblar para sentirme "seguro".

Hable muchas veces con Wolfgang para que se detuviera que me dejará para seguir con su vida ahora que el dichoso lazo se había roto y su respuesta es:

"No importa el lazo te amo además el lazo volverá después si estamos juntos"

Incluso le reproche que si estaba conmigo solo para recuperar su poder de hombre lobo podíamos ser amigos o buscar alguna solución resultado

"No te voy a negar que quiero recuperar mi fuerza y poder, pero tu eres más importante con gusto renunció a ser hombre lobo con tal de que me perdones y aceptes a tu lado... te amo, te adoro eres mi universo mi niño por favor dame una oportunidad"

Después de esa declaración mis piernas temblaron, mi mente se volvió un lío porque recordé todos los gritos, insultos, golpes y violaciones que se volvieron opacos ante los momentos hermosos que tuvimos caricias, cumplidos, abrazos, besos, apoyo y te amos que me hacen sentir amado.

No pude contestar a su petición de forma positiva o negativa

"No tienes que responder solo piénsalo, yo no me iré de tu lado nunca porque te necesito para vivir"

Finalizo uniendo nuestros labios en un beso que me transmitía su amor y arrepentimiento eso fue hace dos meses casi, aún no he podido responder a su solicitud, pero si he permitido un mayor acercamiento al grado que había tardes que pasábamos encerrados besándonos y acariciando nuestros cuerpos hasta que aproximadamente un mes atrás mi papá cambio su actitud con respecto a Wolfgang miradas llenas de enojo, preguntas como: qué hace ese hombre aquí en la casa, no tienes tare que hacer, etc.

El niño del loboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora