Capítulo 22: Segundo mes

391 38 15
                                    

Wolfgang

Mi primer instinto fue regañarlo y llevarlo arrastras hasta la casa, pero su rostro me decía que ya había sufrido demasiado en las últimas horas así que lo conduje lo más rápido que pude a casa no para pelear sino para consolar su frágil corazón

Entre lágrimas relato lo sucedido sus mejillas rojas por las bofetadas de esa hiena hacen que quiera matarla junto con ese pueblo de locos, acaricio su cabello que está desordenado por la agresión sufrida. Él no quería abandonarnos, busca ayuda y sobre todo recuperar a sus padres que lamentablemente han decidido que las demás personas son más importantes que el bienestar de su hijo aquel que dijeron amar sobre todas las cosas

- Mi amor abre los ojos – admiro sus ojos color miel enrojecidos por el llanto – estás en casa conmigo y nuestro bebe está bien – pongo mi mano en su vientre, él suspira como aliviado

- Quédate conmigo – está tan cargado de emoción esas palabras que mi lobo aruña desesperado por calmar a nuestro mate

- Estoy siempre contigo, duerme aquí estaré

No pasa mucho para que escuche su corazón más pausado señal de que está durmiendo con cuidado lo acomodo más en la cama para salir a tomar aire antes de que pierda la cabeza y mate a sus padres

- Hijo qué ocurre – mi mamá llega con dos bolsas que no dudo en tomar – desde la entrada siento tu malestar y tristeza de René

- Fue a ver a sus padres

- No, por qué hizo eso

- Porque es René tiene buen corazón y cree que los demás son iguales

- Mi pobre niño de seguro recibió puros insultos

- Lo golpeó – mi mamá hace brillar sus ojos, ve a mi niño como otro hijo – él fue a buscar ayuda y recibió golpes de su propia madre esa perra no merece ser llamada madre

- Es culpa de ese reverendo Carlos ha envenenado la mente del pueblo entero sus sermones están cargados de odio hacia los que son diferentes hasta yo soy mal vista por estar sin esposo. Según el reverendo es mejor morir a manos de tu esposo que desobedecer una solar orden

- Idioteces, nunca dejaré que regrese con esos monstruos

Entramos a la casa mi mamá está preparando una comida especial para René que espera ayude a disminuir la nauseas que tanto lo atormentan por mi parte vuelvo al cuarto para consolarlo si llegará a tener alguna pesadilla han pasado meses desde la última

Las pesadillas que tenían antes desaparecieron quitando la enorme culpa que sentía cuando escuchaba a René pronunciar mi nombre mientras luchaba dormido. Fui una maldita bestia con mi compañero, no debería haber perdón para mis acciones, pero René dio el suyo junto con una nueva oportunidad y amor sin reservas

Es imposible no amar a mi compañero lástima que sus padres hayan elegido el amor de otros que el de su propio hijo

Logramos animar a René con la comida disminuyendo las náuseas un poco momento que aprovecho para comer más, mi mamá ha encontrado a un druida de confianza que nos ayudará con el embarazo vendrá a revisar a René este fin de semana

Quiero pedirle a René deje la escuela para cuidar de su salud más, pero no tengo el corazón de pedirle renuncie a su sueño de ser licenciado en matemáticas además está por terminar el ciclo escolar aparte no quiero que este solo en casa

Me siento frustrado al no saber que hacer

- Qué ocurre

- Sigue durmiendo amor – acaricio su cabello

El niño del loboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora