Mi cabeza estaba hecha un lio, solo podia concentrarme en el camino a la cabaña. Y en como Finn iluminaba con la lampara, era de noche y todo estaba tan silencioso que nuestras respiraciones agitadas se podían escuchar a la perfección.
No habíamos hablado sobre aquel acercamiento repentino, Finn solo se separo y giro su rostro. Así que me dio la idea de que lo incomodo estar en esta situación.
Al llegar a la cabaña Finn dejo la mochila sobre la mesa y se fue directamente al baño.
Solté al pequeño cachorro, quien fue víctima del amor de mi pequeña hermana Chloe.
— ¿Donde estaban?¿Por que llegaron tan noche? — Pregunto Chloe cargando al cachorro.
— Tuvimos unos problemas ¿Ya comiste? — la pequeña asintió.
— Si, deje un poco por si querían — se fue a la habitación.
Me acerque a la cocina y mire la poca comida que había, tome de esta y la serví en un plato antes de sentarme a comerla.
Pero al sentarme mire como la mochila de Finn cayo al suelo, la recogí, pero no pude evitar notar una foto sobresaliendo de un bolsillo. La tome en mis manos, era la foto de una chica.
Una chica castaña con unos grandes ojos azules, con lindo parecer.
— No deberías husmear en mis cosas.
La grave voz de Finn me hizo soltar de golpe la foto y la mochila que estaban en mis manos. Trate de levantarla nuevamente pero él fue más rápido y la quito de mis manos.
— ¿Nunca te enseñaron a respetar?.
— Si...
— No parece.
Finn iba a regresar a su habitación pero lo detuve.
—¿Quien es la chica?.
Al parecer mi pregunta lo dejo helado,ya que se quedo quieto por unos segundos antes de voltear y verme a los ojos.
— Ella era especial para ti ¿Cierto?.
Su mandíbula se apretó con fuerza.
— Si, lo era. Ahora esta muerta ¿Feliz?.
Se fue a su habitación y cerro con llave. Trague saliva, por alguna razón sentí que lo había echado a perder... Y lo hice, soy tan estupida.
...
Me desperté por un pequeño grito, salí corriendo de la cabaña con una navaja en manos al darme cuenta de que mi hermana no estaba en la cama.
Mis latidos se aceleraron cada segundo, miles de pensamientos me pasaron por la mente en ese momento. Pero todo eso desapareció al ver a Finn abrazando a mi hermana.
—"¡Bien hecho, pequeña!" — exclamo Finn.
—"Justo en el blanco".
Al parecer estaban entrenando flecha, y le estaba yendo muy bien en eso. Sonreí de lado al ver como ellos dos se llevaban tan bien. Envidio un poco a mi hermana, no puedo hablar con Finn sin pelear cada cinco minutos.
—¡Monica! — exclamó mi hermana —¿Quieres entrenar un poco? ¡Por favor di que si!.
Sonreí nerviosa, Finn me miro con seriedad pero con media sonrisa en su rostro.
— No se me da mucho eso...
—¡Finn te puede enseñar!¡Es un gran maestro! — los ojos esperanzados de la pequeña no le dieron otra opción que aceptar.
Me acerco a ellos dejando mi navaja dentro del bolsillo de mi pantalón. Chloe me da el arco y una flecha, apunte al blanco que estaba dibujado en el tronco.
— Respira, relaja tus hombros — menciono Finn.
Hice lo que me dijo, solté la cuerda pero esta ni siquiera se acerco un poco en el centro.
— No espera... — Finn se acerco y se puso detrás mio — Tienes que levantar tu mano a la altura del hombro, apunta... Concentrate.
Me tenso al sentir la mano de Finn sobre la mia, de verdad este chico me ponía nerviosa de todas las maneras posibles, con su mirada, su forma de hablar, su voz... Con literalmente todo.
Dirijo mi atención al blanco.
— Apunta — susurro en mi oído, eso causo un escalofrío por todo mi cuerpo —Ahora.
Solté la cuerda, la flecha rápidamente se clavo en el tronco, no justo en el blanco pero ahora era más cerca de este.
Sonreí, era un progreso.
— Bien hecho, linda.
Finn al parecer no se dio cuenta del apodo que me dio ya que solo agarro el arco y siguió entrenando. Yo me quede parada viéndolo fijamente, era tan hipnotizante.
— Monica, puedo sentir tu mirada... — hablo Finn sin siquiera mirarme, ya que estaba a punto de lanzar la flecha.
Sentí mis mejillas arder en ese momento, sabia que estaba sonrojada. Era tan inteligente, tan lindo... Ay no...
Finn lanzo la flecha tirando justo en el blanco, se acerco al tronco para quitarla y sacudió un poco su cabello. Vaya, Finn es tan atractivo o debo estar loca.
— Aun siento tu mirada Monica.
Mierda.