Debíamos volver a Hogwarts en el autobús noctámbulo al día siguiente, escoltados una vez más por Tonks y Lupin, a quienes Ron y yo encontramos desayunando en la cocina al bajar de nuestros "separados" dormitorios por la mañana.
Los adultos estaban conversando en voz baja cuando Ron abrió la puerta; al oírnos llegar, giraron la cabeza sobresaltados, y guardaron silencio. Fueron unos minutos incómodos hasta que bajaron todos los demás. Cuando todos habíamos acabado de desayunar y charlábamos alegremente me separe del grupo en busca de Sirius. Este se encontraba en el despacho/biblioteca buscando algo entre los estantes.
Nicky: Buenos días Sirius, -este asintió con la cabeza.
Sirius: Buenos días, pequeña Grimm. -dijo animado.
Nicky: Verás... Me quería disculpar porque leí el diario de tu hermano.... Entre esas páginas me enteré del daño que te pudo hacer mi abuela. Me disculpo por ello.-dije inclinando la cabeza.
Sirius: Oh pequeña, no te tienes porque disculpar por algo que no has hecho tú. Con el simple hecho que hayas venido a explicarme esto ya veo que eres diferente a ellos. Tu abuela en especial es influenciable, malvada y con aires de superioridad. La calle de esta casa es Grimmauld Place, modificación de tu apellido. Tu abuela se encargó de cambiarla para que siempre recordáramos lo que hizo, los traidores nunca se libran, ese es el mensaje que nos quiso dejar. Por suerte tus padres no se parecen en nada a ella.- dijo con una media sonrisa fugaz.
Nicky: ¿Conociste a mis padres?- dije sorprendida.
Sirius: ¡Sí! Coincidimos en Hogwarts unos años. Eran muy normales, pero de esa mezcla has salido tú, una mujer muy poderosa y con principios. Lo más valiente que hicieron tus padres fue llevarte lejos, antes de que todo esto cambiara.-dijo melancólico.
Nicky: La valentía no define mucho a mi familia. Nunca ningún Grimm ha sido un Gryffindor.- los dos nos reímos. Se escuchaba movimiento en el pasillo, debía ser la hora de irnos. Al asomarme todos iban fuera, con las maletas. No tardé en invocar un hechizo para hacer rápidamente la maleta y que bajara a mi lado. Me abrigué y me uní a la guerra de bolas de nieve que iniciaron los gemelos. Durante esta semana los gemelos y yo nos hemos acercado mucho. No sabía que era lo que creó esta sincera amistad, solo deseaba que jamás terminara. Un derrape de ruedas se escuchó y Lupin paró la guerra indicándonos que era hora. En un instante un autobús de tres pisos, de color morado intenso, apareció de la nada ante nosotros, esquivando por los pelos la farola más cercana, dando un salto hacia atrás. Un joven delgado, lleno de granos y con orejas de soplillo, vestido con un uniforme también morado, saltó a la acera y dijo: —Bienvenidos al...
Tonks: Sí, sí, ya lo sabemos, gracias -lo atajó Tonks-. Arriba, arriba...
Todos nos despedimos y subimos al autobús, el último en entrar fue Harry que se estaba despidiendo.
Sr. Weasley: Hasta pronto, Harry, ¡y vigila por si me ataca otra serpiente!- exclamó el Arthur cordialmente estrechándole la mano. Me reí por lo bajo.
Ron: Siempre he querido viajar en este trasto -comentó alegremente al subir al autobús tras de mí.
Harry: La última vez que viajé en el autobús noctámbulo era de noche, y los tres pisos estaban llenos de camas metálicas. Pero ahora el interior está lleno de sillas.- dijo observándolo todo.
Nicky: También es mi primera vez que subo. Suelo viajar en polvos flu.
Al entrar aun unos cuantos magos y algunas brujas todavía se estaban levantando del suelo, rezongando tras la brusca frenada en Grimmauld Place, y una bolsa de la compra había recorrido el autobús en toda su longitud: una desagradable mezcla de huevas de rana, cucarachas y natillas se había esparcido por el suelo.
Tonks: Veo que tendremos que separarnos- dijo con energía mientras miraba a su alrededor en busca de sillas vacías-. Fred, George y Ginny, sentaos en esas sillas del fondo... Remus irá con vosotros. Nicky y Ron subid arriba- dijo guiñándome un ojo sin que nadie se diera cuenta.- Hermione y Harry conmigo.-Todos entregamos a Stan once sickles cada uno, el autobús se puso en marcha peligrosamente.
Ron y yo encontramos sitio en la tercera planta, delante, con un gran ventanal. Pudimos disfrutar de un "agradable" viaje.
Ron: He cambiado de opinión -Ron levantándose del suelo por sexta vez-. No quiero volver a viajar en esta cosa nunca más.- me reí por su seriedad.
Cuando salimos de la ciudad el autobús no daba tantos trotes y pudimos disfrutar de las vistas. Noté la mano de Ron cogiendo la mía acariciándome suavemente, y yo delicadamente me apoyé en su hombro. Creo que me quedé dormida, porque cuando desperté pasábamos por Hogsmeade. Estaba nevado, disfrutando la vista de los copos de nieve caer lentamente alcancé a ver la calle lateral donde se hallaba Cabeza de Puerco, y el letrero, con el dibujo de una cabeza de jabalí cortada, que chirriaba azotado por el viento invernal. El autobús por fin se detuvo frente a las verjas de Hogwarts. Lupin y Tonks nos ayudaron a bajar con su equipaje, y después bajaron también para despedirse de nosotros.
Tonks: En cuanto entréis en los jardines estaréis a salvo -dijo señalando la desierta carretera-. Que tengáis un buen trimestre.
Lupin: Cuidaos mucho -nos recomendó, y nos estrechó la mano a todos. Por último se dejó a Harry a quien le susurró unas palabras.
Arrastrando sus baúles, los siete subimos hacia el castillo por el resbaladizo camino. Hermione empezó a decir que quería tejer unos cuantos gorros de elfo antes de acostarse. Al llegar revisé que mis cosas llegaron a mi habitación, todo correcto, así que fui a ver a Draco, tenía muchas ganas de contarle mis vacaciones y lo que había descubierto. Sé que Weasley no es mucho de su agrado, pero los amigos se explican las cosas, incluso las amorosas, así que se vaya acostumbrando.
Nicky: ¡Dracooo! ¡Despiertaaa!- dije tocando la puerta.
Draco: Nicky no molestes, que estoy cansado.
Nicky: Menuda bienvenida me das, pero no sabrás lo que he descubierto..-dije haciendo un hechizo para abrirla. Pero al tirar del pomo, é cerro la puerta con fuerza, recibí un buen portazo en la cara. Él nunca se pone de malhumor conmigo, es una faceta que casi siempre muestra pero no seriamente hacia mí. Realmente debe estar cansado.
A la mañana siguiente teníamos pociones con Snape. No fue de extrañar que acabara la primera de las pociones que mandó hacer durante estas dos horas. Como la realicé con tiempo me quedé viendo que hacían mis compañeros. Draco que estaba a mi lado no dejaba de rechistar, se estaba equivocando seguido y tenía que volver a empezar, eso era extraño en Draco, se le daba mal pociones, pero esta vez sus descuidos eran por estar ausente, pensando en otras cosas. Goyle estaba teniendo problemas para cortar un trozo de Bezoar.
A Harry también se le veía distraído muchas veces ha mirado a Snape con cara de temor, puede que esté nervioso por las clases especiales que tendría a solas con el profesor a la tarde.
Tras la comida, fui con el trío de oro, caminando por los pasillos en busca de algún lugar donde charlar, varios miembros del ED acercan a Harry para preguntarle, esperanzados, si esta noche iba a celebrarse una reunión, al despedirse no se les olvidó una mirada no muy agradable hacia mí.
Harry: Ya os comunicaré por el canal habitual cuándo será la próxima -decía Harry una y otra vez,- pero esta noche no puede ser, tengo clase de... pociones curativas.
Zacharias Smith: ¿Tienes clases particulares de pociones curativas?-le preguntó abordado a Harry en el vestíbulo-. ¡Madre mía, debes de ser malísimo! Snape no suele dar clases de refuerzo.
Smith se alejó con un aire irritantemente optimista, y Ron lo miró con odio.
Ron: ¿Quieres que le haga un embrujo? Desde aquí aún lo alcanzaría -se ofreció su amigo, que había levantado su varita y apuntaba a Smith entre los omoplatos.
Harry: Déjalo -respondió.- Es lo que va a pensar todo el mundo, ¿no? Que soy idiota perdi...
Cho: ¡Hola, Harry! —dijo una voz a sus espaldas. Harry se dio la vuelta y se encontró cara a cara con Cho.
Harry: ¡Oh! —exclamó él, y notó una desagradable sensación en el estómago—. ¡Hola!
Nicky: Nos encontrarás en la biblioteca- dije cogiendo a Hermione con firmeza al tiempo que agarraba a Ron por encima del codo y tiraba de él hacia la escalera de mármol.
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Weasley enamorado de una Slytherin (Ron Weasley y tú hot)
Fiksi PenggemarElla es Nicky Grimm, si Grimm, la familia alabada y reconocida por ser la más pura. Los últimos años, sus descendientes siempre han quedado en la casa Slytherin y ella no iba a ser menos. Para su familia, quedar en Slytherin significaba que su legad...