Capítulo 29

185 21 3
                                    

Hye Sun –dijeron débilmente-

Pude entreabrir los ojos y divisé el rostro pálido de Shin, al lado estaba Sam, los dos me miraron con cierta pena.

¿Qué me pasó? –susurré-

Te desmayaste –dijo Shin- no has estado comiendo adecuadamente.

Creo que si –dije-

De repente recordé el departamento vacío, la idea de Jung Shin fuera de Corea me golpeó y me senté de golpe.

¿Dónde está Jung Shin? –le dije a Shin-

Tranquila terremotito –dijo Sam-

Estaba en emergencias, podía ver a otras personas a mí alrededor, aún tenía la ropa de trabajo puesta.

¿Cómo me hallaron? –les dije aún confundida-

Cuando te desmayaste el hombre buscó tu cartera y encontró tu móvil, para nuestra suerte me llamó a mi, ya que fui yo la última en llamarte, dijo que estabas yendo a emergencias y nosotros corrimos –me explicó-

¿No te duele nada? –dijo Sam-

Si –le dije con los ojos rojos- el corazón.

Oh Hye Sun! –dijo Shin-

No pude evitar llorar, estaba triste, demasiado apenada, yo nunca me hice la idea de no encontrarlo fue por eso que me había chocado demasiado la noticia.

Tienen que ayudarme a encontrarlo –les dije- por favor.

Tranquilízate –dijo Sam- nosotros te vamos a ayudar.

Es tarde regresamos a casa, mi falta en el trabajo causó demasiada sorpresa entre todos por lo que recibí algunos ramos de flores.

Qué envidia –dijo Shin-

¿Y ese de quién es? –Cerré el libro que leía y observé el ramo de rosas entre sus brazos-

Este es de Collin –dijo ella sonriendo, cogió la tarjetita entre sus manos la leyó fuerte- “Recupérate pronto, te necesitamos en el team”

Que tierno –reí- déjalo sobre la mesa.

A este punto podre poner una florería en tu departamento –dijo riendo-

Por favor paga el derecho de piso –le sonreí-

Me gusta verte de ese ánimo –caminó y se sentó a mi lado- respecto a lo de Jung Shin, te prometo que no pararé de buscarlo y si tengo respuestas te llamaré de inmediato.

Gracias Shin –le dije-

Sonríe Hye Sun –le dijo- tienes unos amigos que te adoran y pronto Jung Shin acompañará a ese grupo y no como tu amigo si no como tu novio –dijo ella-

No voy a perder las esperanzas –le sonreí-

Me debo ir terremotito –me dijo y se levantó del mueble-

Gracias por todo y llámale a Sam, dile que gracias –le dije-

Descansa y come a tus horas –me dijo seria-

Si Shin, vete con cuidado –le dije-

Ojala no empiece a nevar –dijo mientras miraba la ventana-

Ve rápido –le dije-

Adiós –sonrió-

Adiós –le dije-

Salió del departamento y esta vez quedé sola, las flores eran buena compañía y me hacían reír pero no era suficiente, yo quería verlo, yo quería reír a su lado y abrazarlo, había pasado una semana y lo extrañaba mucho, no me imaginaba en un mes, quizá estaba en una esquina pidiendo limosnas.

Tomé el móvil entre mis dedos y presioné la tecla llamar en su iconito de contactos.

“El número al que usted ha llamado se encuentra fuera de línea”.

Es el fin –dije antes de ponerme a llorar-

Solo quedaba buscarlo y vivir de los recuerdos, el punto aquí era ¿dónde lo buscaba?, no tenía ni idea de dónde podía estar.

La puerta sonó.

En ese momento me limpié las lágrimas y corrí para recibir otro ramo de margaritas, estaba casi segura que esta vez eran de Marggiorie la diagramadora de la revista, pero en su lugar estaba él.

¿Qué quieres? –le dije seria-

Alzó al rostro y me miró.

Un ojo morado y el labio ensangrentado me indicaban que él había estado en alguna pelea.

¿Qué te ha pasado? –le dije un tanto preocupada-

Entró sin pedir permiso y empujándome hacia un lado.

Solo vengo a advertirte que no voy a dejar que ese estúpido te toque o te mire, no quiero verte cerca de él o va a irle peor –dijo molesto-

¿De qué hablas? –le dije desconcertada-

Miró las flores y luego me miró con una sonrisa irónica.

¿Te gusta que te llene de flores? –dijo- Yo puedo traerte tulipanes importados si me lo permites.

Estás hablando tonterías –le dije- esto me lo han mandado mis compañeros de trabajo.

No es tu cumpleaños –dijo él-

Estuve enferma –le dije- ahora por favor… explica cómo es eso de que le va a ir peor… ¿A quién? –le dije sin siquiera saber de quién estaba hablando-

De tu querido –dijo enojado- esta mañana me fue a buscar –dijo enojado-

¿Jung Shin? –le dije sorprendida-

Él mismo, fue a mi departamento y como verás no fue un conversación de amigos precisamente –aclaró Jong Hyun- nos golpeamos y… -me miró- no entiendo porque hace todo esto.

Porque estamos enamorados, ¿no lo entiendes?-le grité- has alejado a la persona que más amo en este mundo luego de mi madre, por tus estúpidas ideas, por tu estúpido ego.

Es solo un capricho –dijo acercándose- nos vamos a terminar casando y riéndonos de todo esto.

Estás equivocado –dije- yo no te quiero y no quiero volverte a amar, no quiero quererte, te has vuelto alguien repudiable y odioso.

Piensa bien lo que dices –me cogió por los hombros- te puedes arrepentir de todo esto.

No me arrepiento de nada –dije enojada- solo esfúmate y déjame vivir mi vida.

¿Qué harás? –dijo él- ¿ir tras él?

Si –lo empujé- voy a buscarlo y a decirle la verdad, lo amo y no amaré a nadie más a que a él.

No te engañes, eso lo dices ahora, te apuesto que en unos meses estarás otra vez enamorada de mi –dijo-

Por favor –lo miré- vete y no me busques más, ya ha sido suficiente, entiende que lo que hubo alguna vez entre nosotros, ya tuvo un final –le dije- Jong Hyun vete a hacer tu vida que yo ya pensé en hacer la mía.

No se va a quedar así –dijo él- Jung Shin va a pagar por esto –señaló su rostro-

Vete –grité-

Me miró y salió corriendo del departamento, muy propio de él, Jung Shin había idoa  buscarlo y lo había golpeado, me había parecido tan heroico como también jalado de los pelos, exponerse a golpear a una estrella del medio, era peligrosísimo, podía no volver a fotografiar si es que a Jong Hyun se le daba la gana de denunciarlo, a estas alturas yo lo creía capaz de todo, tuve miedo en ese momento ya no por mi si no por Jung Shin.

<<¿Dónde estás alma gemela?>>

Encuadra, enfoca y dispara / JungShin / CNBLUE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora