Capitulo 6

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-Tengo que hablar con el profesor, ¿me acompañas Yuuri?- escuche a Minami hablar mientras salíamos de la sala.

Le mire atento y no es como si pudiera decirle que no a un chico tan tierno como Minami, mire desde lo lejos a Pichit pero ya se había marchado.

-Bueno, ¿Y para que vas a verlo?- mi voz salió algo nerviosa, pero creo que él no lo noto, lo único que hare será quedarme afuera, se supone que solo debo acompañarlo.

-Me quede con una duda sobre el horario, y lo mejor sería preguntarle directamente, aunque tengo que apurarme- me sonrió y se adelantó a la sala, camine con una velocidad normal, pero no esperaba escuchar un ruido súper fuerte, que venía justamente desde donde estaba Minami.

Abrí mis ojos con sorpresa y corrí hacia lo que parecía ser la oficina de Victor, quien ahora era mi profesor, era bastante extraño. Lo primero que logre ver fue a Victor tirado en el piso y Minami quien trataba de levantarlo.

-Victor...- dije en casi un susurro mientras ayudaba a Minami a levantarlo del piso, lo único en lo que pensamos fue en buscar ayuda para llevarlo, no pesaba casi nada pero era muy alto y sus pies quedaban colgando, lo que hacía más difícil cargarlo hasta la enfermería, cuando íbamos por el pasillo unos chicos nos ayudaron y otros solo se quedaban mirando con sorpresa.

-¡Enfermera¡- grite a todo pulmón, una señora ya de edad camino hacia nosotros y al igual que los demás, abrió sus ojos con sorpresa pero rápidamente nos dijo hacia donde llevar a Victor, Minami hablaba sin parar y estaba seguro de que iba a llorar, me acerque hacia el e hice que apoyara su cabeza contra mi hombro.

-No te preocupes, no fue tu culpa- le hable en un tono de voz más bajo y se apoyó más contra mí.

-¿Qué fue lo que le paso al Seño Nikiforov?- pregunto y Minami se separó de mí, pero tan solo unos milímetros.

-Estaba a punto de abrir la puerta, y no sabía que el profesor estaba justo detrás, entonces ahí fue donde paso, la puerta dio de lleno contra su cabeza y cayó al piso- hablo tan rápido que algunas palabras ni siquiera fueron entendibles, pero la enfermera entendió a la perfección todo.

Y mientras más observaba a Victor sobre la camilla, me convencía a mí mismo que debía de salir de este lugar para que él no me viera pero otra parte de mí, hacía que mi cuerpo estuviese totalmente inmóvil.

-Debo irme Minami, tengo que ir a trabajar- le hable tranquilamente, y mentí un poco pero en verdad ahora iba a ir hacia ese café.- no te preocupes demasiado, solo discúlpate y hazle saber lo que querías preguntarle desde el principio- una sonrisa genuina y amable se formó sobre mi rostro, lo único que podía hacer para ayudarlo a él y a mí mismo, era sonreír e irme rápidamente de la enfermería.

El solo asintió ante mis palabras, me despedí de ambos y camine rápidamente hacia la salida, Pichit iba a salir con Seung-gil pero no había problema, ya al caminar al menos unos diez minutos el café se divisó en mi vista, aún estaba colgado el cartel.

Al entrar el familiar sonido de una campana sonando resonó dentro del recinto, vi a una chica pelirroja que al parecer estaba dando órdenes y traía puesto un delantal que tenía el nombre de la tienda, me acerqué a ella primero.

-Hola, ¿aún está disponible el puesto de camarero?- le hable y trate de no estar muy nervioso, ni demostrar que lo estaba.

-Hola- ella me saludo amablemente, y lo primero en que me fije fueron en sus brillantes ojos azules- aún está disponible, lo necesitamos con mucha urgencia.

-Me gustaría trabajar entonces- hable más calmado esta vez y ella estiro su mano hacia mi.

-Mila Babicheva, un gusto en conocerte- yo también estire mi mano para poder presentarme debidamente.

-Yuuri Katsuki- al final del día, algo había salido bien.

[...]

Ya había pasado un día desde que vi a Victor allí tirado en la camilla y aunque tratase de no pensar en el de esa manera, se me era imposible, casi inevitable.

¿Cómo fue que ese chico tan alegre y lleno de vida, se convirtiera en lo que tuve frente a mis ojos ayer? .Su cabellera plateada larga había desaparecido, el color en sus manos, nariz y mejillas también, todo era pálido si te fijabas cuidadosamente.

Y tenía la curiosidad de saber en como habrá cambiado el calor de sus delgadas manos.

Pero no era momento para eso, había estado trabajado mucho para llegar a la universidad en la que estoy, y finalmente había conseguido un nuevo trabajo, me pase la mayor parte de estos años recibiendo negación por parte de mi familia, y probablemente la única persona que me quiere es Pichit, él es lo más cercano al significado de familia que tengo ahora.

Siempre está allí para mí, me anima a intentar cosas nuevas que yo por mi cuenta jamás haría, aunque al final siempre me arrepiento de hacerlo y me quedo sin siquiera moverme. Camine por el pequeño pasillo del departamento y tome la mochila que había dejado sobre el sillón, ayer llegamos a casa por la tarde y tuve más tiempo para organizar mi horario.

Revise que todo estuviese en su lugar y cerré la puerta, Pichit y yo habíamos elegido un departamento bastante cercano a la universidad, tan solo debía caminar dos o tres cuadras y ya estaría llegando temprano. Mire hacia adelante y vi su reconocida cabellera negra, pero lo que más llamaba la atención en él era esa mochila de hámster que compro por internet hace unos meses, el busco por un montón de páginas en internet, hasta encontrar la mochila que encajara con el perfectamente.

-¡Hola Yuuri¡- me grito a unos pasos de distancia, le sonreí en modo de saludo y el paso su mano por mi espalda, desde que éramos pequeños estábamos acostumbrados a caminar así, no siempre pero era agradable hacerlo.

Seguimos caminando por unos quince minutos hasta que llegamos a la universidad, ya habían unos estudiantes esperando a que comenzaran las clases pero al parecer su horario era diferente o solo les gustaba llegar más temprano para estar en el campus, y no los contradecía, pues Pichit y yo nos dirigíamos a ese mismo lugar.

Vi a los mismos chicos de ayer, a J.J, Minami-kun y Seung-gil, los tres eran bastante amigables y ahora que nos vieron el primero en acercarse casi corriendo fue Minami.

-¡Chicos¡- grito con una gran sonrisa sobre su rostro, la actitud extraña de ayer había desaparecido, se sentía bien poder hacer nuevos amigos aunque no fuera por mi cuenta, pero era un avance. Seung-gil quien era el más serio de todos me observo y sonrió levemente, para luego seguir viendo algo en su celular, debía de ser importante si no despegaba la vista de él.

Luego de unos segundos los cinco nos sentamos sobre el pasto, deje mi mochila en el piso y acomode mis lentes que se cayeron un poco, levante mi vista al escuchar mi nombre por parte de Jean.

El me comenzó a mostrar un extraño video, pero que luego de unos segundos me hizo estallar en risas, de reojo vi como Pichit sonreía al verme y yo aunque tratase de no reír, se me hacía muy difícil al tan solo recordar el video.

-¡No me lo recuerdes¡- le grite riendo pero él me ponía el celular frente a mí de nuevo, el timbre resonó dentro de toda la universidad, y gran cantidad de estudiantes se levantaban del piso para poder ir a sus clases, al igual que yo. Tome mi mochila nuevamente y camine junto a los demás hacia el salón, cuando entramos Jean me dio una sonrisa y yo solo le sonreí de vuelta, hace un buen tiempo que no me reía de esa manera, ni recordaba que pudiera hacerlo si siempre estaba al pendiente de las solicitudes y mis múltiples trabajo.

Pero ya no debía preocuparme de la universidad, ahora trabajaría en esa cafetería y con el dinero que gane allí será suficiente, pues también tengo una beca en esta universidad, la cual reducía bastante el costo.

Ahora solo debía prepararme mentalmente en solo ver a Victor como mi profesor, y esperaba que él no me reconociera, había paso muy buenos momentos con él en el pasado aunque también hubo unos muy malos, incluso si no había sido su culpa. Pero el solo se fue sin decir una sola palabra al respecto, y ahora me lo encontraba nuevamente. Haciendo que nuevamente mi corazón saltara con emoción, cuando el "amor" lo evite por tanto tiempo, debía seguir manteniéndome firme ante la promesa que me hice a mí mismo.

No quería volver a enamorarme, jamás.

Warm Rain [Victuuri]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora