La verdad está por revelarse
Es la primera vez que Jimin y Jungkook hablaran de lo que toda Army Jikookmin shiper quiere saber: la verdad entre ellos dos...
* Historia de mi propia autoría
*Es la primera historia que escribo, discúlpame si tengo err...
-Buen viaje Sr. Park, le esperamos en la puerta 11, 15 minutos antes de la hora de abordaje.
Luego de hacer su documentación, Jimin y Jungkook en compañía del padre del menor y el hermano del mayor, los dejaron en la puerta de las salidas internacionales, llevaban consigo ropas color negro, gorras e incluso lentes, si bien ellos no deseaban ocultarse, debían hacerlo para no ser seguidos y poder hacer un viaje tranquilo. Antes de entrar a la sala, los chicos se despidieron de su familia:
- Ji, ven aquí – Jimin llamó a su hermano y le dió un abrazo – Dile a papá que le avisaré cuando estemos en el hotel, ¿sí?, todo tranquilo Ji, te amo. – Está bien Min, te amo – dijo su hermano devolviendo el abrazo.
-Jungkook, te lo encargo, cuídalo mucho, cuídense mucho – Dijo Ji Hyun – Lo que necesiten hijos, Llámenos enseguida. Los amamos. - el padre de Jungkook los abrazó a los dos para después dejarlos ir. –
En los días de descanso de BTS, los chicos podían hacer realmente lo que desearan: quedarse en casa, viajar fuera del país, etc. Y aunque no serían escoltados por los guardaespaldas, siempre habría alguno encubierto para vigilar la seguridad e integridad de cada uno de ellos. Esto suena como una invasión a la privacidad, pero debemos entender el nivel de artistas en los que ellos se habían convertido en los últimos años, ahora eran artistas internacionales y Bit Hit no podía arriesgarse a que sus idols más importantes, estuvieran expuestos por completo. Era por lo que los permisos para viajar al extranjero siempre eran dados, jamás les decían que no a esos viajes.
Ya adentro de la sala, nuestros dulces tortolitos sabiendo que no podían darse amor como querían, hacían pequeños movimientos para tocarse accidentalmente y tomarse de los dedos o tocarse el pecho, abrazarse, todo para no ser vistos como "raros". Sé que no necesito recordarles lo mal visto que está en Corea, la homosexualidad y aunque en Busan ellos eran amados, la doble moral coreana es un nivel aparte. Así que nuestros "príncipes", estaban ansiosos de llegar a Japón.
Jungkook, había estado planeando hacer su GCF, Jimin lo sabía, pero lo que él definitivamente no sabía es que en ese viaje el filmaría el primero; Jungkook mantuvo en secreto la producción, ya que quería hacerlo de regalo para Jimin, así como una sorpresa más de este viaje. Con la cámara encendida JK comenzó su labor, ahora grababa todo lo que sucedía a su alrededor, Jimin como su principal foco de atención.
El vuelo duró alrededor de 3 horas, llegaron a Tokio justo después del atardecer, cuando las luces de Tokio ya se habían encendido, los dos jóvenes enamorados bajaron del avión deseosos de conocer la bella ciudad que no duerme. Tomaron sus maletas y se consiguieron un taxi.
¡Vamos Kookie! - Jimin corrió hacia el taxi- Te estás retrasando por grabar bebé-
-Ya voy Minie, estoy haciendo buenas tomas –¡te dejaré si no vienes ahora! -
Jungkook corrió hacia el mayor, como si el otro realmente le fuera a dejar.
Subieron al taxi -Buenas noches, señor, nos dirigimos al hotel remm Roppongi, por favor – Buenas noches, con gusto – El taxi avanzó y Jungkook encendió su cámara al mismo tiempo.
El Hotel remm es un hotel más ejecutivo que familiar, pero al ubicarse en el área de Roppongi es escogido mayormente por parejas, pues el área es destacada por ser un distrito de entretenimiento animado en el que los residentes y turistas se mezclan en los clubes y bares nocturnos. También se destaca por ser un hotel de habitaciones pequeñas con todo lo necesario para la comodidad de sus clientes. Pero lo que causó mayor intriga a las fans de esta tierna pareja es que el baño de las habitaciones tiene puertas completamente transparentes y hechas de cristal, dejando a la vista su interior a quien pueda estar en aquella habitación. Para ellos esto jamás fue un problema.
Servidos jóvenes, que tengan una grata estancia y disfruten Tokio – Muchas gracias, señor – Agradecieron al mismo tiempo.
Listo bebé nuestro viaje a iniciado – dijo JK a Jimin al bajarse del taxi. Tomaron sus maletas y entraron a la recepción del hotel, Jungkook era el que revisaba absolutamente a lujo de detalle todo con la recepción, mientras Jimin bailaba en el lobby.
Bienvenido Sr. Jeon, usted y su acompañante tienen una reservación con entrada el día de hoy 28 y salida al día 30 de octubre, son 2 noches, en una suite doble con vistas a la torre. Solicitó que a su llegada se le subiera una botella de champagne y una cena ligera. ¿Son correctos estos datos señor? – Si señorita, ¿hay algo más por arreglar? – Está todo en orden señor, la habitación que solicitó se le asignara es la número 811 y aquí le hago entrega de dos llaves digitales de su habitación y las claves de nuestro wifi y caja fuerte. ¿Algo más en lo que pueda ayudarle Sr. Jeon? – En nada más señorita, muchas gracias –
Jimin se había dirigido al elevador una vez que vio a Jungkook tomar las llaves – ¿tanta prisa tienes de llegar a la habitación Jiminie? – Preguntó JK entrando juntos al elevador - Si Kookie, me urge darme un baño – yo también quiero darme un baño bebé. Llegamos al piso, la habitación es la 811-
- Am... bebé... ¿Entonces..., quieres compartir? – dijo Jimin dudoso viendo a Jungkook buscando la habitación
- ¡Aquí es!, 811- puso la llave en la entrada de la puerta y esta en automático se abrió, dejándole espacio para entrar, dio paso a Jimin y luego de él cerró la puerta y dijo – Por cierto...si quiero compartir el baño contigo – lo tomó de la cintura, lo acercó a él y con el corazón agitado lo besó, Jimin le siguió al beso dejando entre abierta su boca, dando paso a la lengua de JK.
Curiosamente no habían pasado ni 2 minutos en la habitación y ellos ya se encontraban deseosos de hacerla suya.
– Jimin shi – dijo susurrando a su oído, lo que provocó en Jimin una ligera sonrisa, resultado de las cosquillas que el susurro le hizo sentir .
– dime Kookie – y... ¿qué tal si jugamos un poco mientras nos bañamos? – dijo apresando con sus labios, su cuello, lamiendo con astucia su manzana; Jimin estaba jadeante, deseoso de tenerlo solo para él - Ven Kookie, vamos a meternos a la bañera – tomó de la mano de Jungkook y lo llevó adentro, lo hizo sentarse y se sentó de espaldas a su pecho, no conforme se pegó a él y restregó sus nalgas al miembro, de su prometido, el que ya comenzaba a despertar, haciendo jadear nuevamente al mayor.
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