Mentiras de amor

8. Un peligro cercano

Michael

-Parecen imbéciles-

Charles y yo nos detuvimos al ver a nuestro lado de manera retadora y con cara de fastidio a Amanda.

Inmediatamente me sentí avergonzado. ¿Qué estaba haciendo? ¿Por qué me molesto saber que Charles se acostó con Carolina? Ni siquiera soy algo de Carolina.

Me levanté rápidamente quitando a Charles quien se posicionaba sobre mí.

-Amanda, lo sentimos - dijimos al unísono Charles y yo. Amanda levanto una ceja y cruzo sus brazos. Definitivamente quien estaba frente a nosotros era el lado adulto de ella. Ese lado es el peor...

- ¿Eso es lo que tiene para decir? ¿Notan lo que hicieron? Estamos en la casa de Carlos quien se ofreció a recibirnos y darnos alojamiento para después de la fiesta... Es el cumpleaños de Carlos y ustedes están ahí como imbéciles peleando por mujeres que ni siquiera les pertenece... Recapaciten sus idioteces y discúlpense.

Ambos asentimos y dejamos nuestras cabeza abajo, hasta que ella se fue del lugar y todas las personas alrededor estaban congeladas...

Amanda en su lado adulto era como un cuchillo filoso y enojada era realmente terrible, pues su forma de razonar y hablar era como la de un padre.

-Yo lo sabía, Amanda solo es una mosquita muerta-dijo una chica de entre el público... ¿Amanda solo es una mosquita muerta? Sé que a mucha gente no les agrada ella por su síndrome y que mucha gente cree que es falso. Pero ella es la persona más sincera y abierta con todo, que yo conozca... bueno Carolina. ¡Carolina!

Gire mi mirada y ella ni siquiera nos presto atención, estaba tomando su cerveza mientras escribía un mensaje. Ahora me siento más estúpido que antes.

Amanda tiene razón. Pelando por mujeres que no nos pertenecen...

*Actualidad*

Charles

-No lo comprendo... ¿no crees que es mucho drama entre tú y Amanda, por una relación que ni siquiera se formalizo? -dijo Carolina con estrés, mientras limpiaba mi herida en el labio y la otra en los nudillos.

-No lo sé... de verdad quiero estar con ella... ouch - dije quitando mi mano, Carolina me vio con enojo y dijo.

-No seas gallina, si ahí andabas de estúpido peleando por algo tan tonto, entonces te aguantas.

- ¿Por qué estas tan furiosa?

-Porque - suspiró con cansancio y me vio a los ojos- no lo sé la verdad... creo que los problemas de mi hogar que ahogan y - unas lagrimas bajaron por sus ojos-creo que me metí en algo que no debía Charles... - empezó a llorar más fuerte y se recostó sobre mí, así que la abracé.

-Vamos respira Carolina, sabes que acá voy a estar... tranquilizante un poco.

-Desearía que fuera así de sencillo Charles...

Carolina

Charles me acurruco entre sus brazos y se quedo conmigo hasta que deje de llorar y una sensación que había tenido por Charles en mi corazón, volvió a aparecer. Él siempre ha sido así conmigo; aunque la gente crea que nos conocimos hace poco, en realidad nos conocemos desde que éramos niños.

¿Estas bien? - se acercó a mí un niño pelinegro, tan pálido que pensé que estaba enfermo.

-Mjm- asentí. Él se sentó a mi lado y dijo.