Holis mis niñas 👀
Disculpen por desaparecer, pero abri un desayunador con mi hermana y no he tenido tiempo para actualizar, aparte tambien rompí la pantalla de mi laptop 🤧 y no la he podido arreglar y estoy desde la compu de mu hermana, pero ya casi termino de acomodar mi blog por lo menos la parte de esta novela 😅.
Esta o la otra semana estaré abriendo el blog al público, asi que estén atentos 🤭.
Les dejo un adelanto de lo que se viene 👀.
***
―¿Qué?
―Creo que prefieres que la situación continúe antes que pedirme ayuda.
No estuvo mal.
Si no hubiera sido por él, habría visto algo muy interesante y podría haber causado un desastre en la familia Valentin para vengarme.
―¿Cómo diablos has estado viviendo con los Valentin?
Carlen todavía no podía creer lo que había visto.
Canna rodó por el suelo de tierra y fue golpeada como un animal. Aceptó la violencia como si le fuera demasiado familiar.
¿Ha vivido de esa manera?
―El tiempo que te has quedado con los Valentin ¿Te han tratado de esa forma?
Era ridículo, me recogí el cabello con brusquedad y pregunté.
―¿Por qué no me lo dijiste?
―¿Qué diferencia haría?
―¿Qué?
―¿Qué diferencia haría?
Mientras escuchaba en silencio, comencé a enojarme.
Canna se sintió tan molesta que todavía sentía un hormigueo.
―No fue muy diferente de mi tiempo con los Addis.
En ese entonces Ju Hwa nunca le contó esto a la familia Addis.
No, ni siquiera pensó en decírlo.
En primer lugar, no pensó que Addis estaría de su lado.
«Pero deberías haber dicho cómo te sientes acerca de cómo te acosaban, Lee Ju Hwa. Tal vez hubieran hecho algo por el honor de la familia Addis.»
Lee Ju Hwa estuvo en silencio durante todo el matrimonio.
Suspiré al pensar en ella.
―....
Carlen se quedó sin habla
Sus palabras parecían haber salido de los bosques.
―¿Qué quieres decir?
―Fui ignorada, perseguida, a veces golpeada, era así en Addis ¿no es así?
―¿Alguien te golpeó?
―Tu madre, Chloe.
―...!
―Cuando era niña, tu hermano, Orsini.
El rostro de Carlen estaba rojo.
¿Vergüenza, culpa o ira?
Tal vez piensa que su hermana lo ridiculizó como una basura.
Fuera lo que fuera, ni siquiera me importaba.
―Y tú.
―Yo nunca ... nunca te he...