Los lobos encontraron su piedra lunar, pero no a su alfa.
Addison sigue buscando a donde pertenece. Solo sabe que, de algún u otro modo, tiene que ver con los lobos.
Tal vez... la luna le de las respuestas que busca. Aunque no será tan simple.
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Eh... ¿Ahora que se suponía que tenía que hacer?
La voz misteriosa ya no estaba aquí. Y me estaba dejando como un loco que hablaba solo.
- ¿En serio me vas a dejar solo? Vine hasta aquí por ti. ¿Ahora que se supone que haga?... ¿Justo ahora no quieres contestar? Esto es injusto.... ¡Ya dime que tengo que hacer? Por si no te has dado cuenta, no soy adivino.
Decidí dejar al viento de lado, y buscar una forma de... recuperar a Lena.
Empecé a dar vueltas a su alrededor.
OK. Sabía que no era el momento, pero Lena estaba más hermosa... ¡Concéntrate, Wyatt! Tenía que sacarla de ahí.
Me acerqué a ella, e hice el intento de cargarla. Pero en ese mismo instante, sentí como me empezaba a doler la cabeza. Un nudo se formó en mi garganta. Mi vista se nubló. Empecé a parpadear rápidamente, para poder aclarar mi visión. Cuando todo volvió a la normalidad, estaba en el bosque. Justo donde... estaba antes. Acostado en el suelo.
- ¿Se va a hacer un acostumbre, eso de encontrarte desmayado? -me preguntó Willa, mientras me ayudaba a sentarme.
- ¿Dónde está Lena? -fue lo primero que pregunté.
- ¿Lena? No sabemos nada de ella desde hace días. ¿Estás bien?
¿Todo había sido un sueño? Pero... no podía ser eso. Mi brazo me dolía, exactamente como cuando estaba con Lena.
- Sí. Eso creo. Yo... me iré a dormir. Descansa, Willa.
No la dejé contestar, y me fui a dormir.
¿Qué fue todo eso? ¿En verdad no había estado con Lena? Porque todo se sintió muy real.
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Intenté vincularme con el aire. Algo dentro de mi, quería creer que, por lo menos, había recuperado mis habilidades. Pero no era así. Apenas y pude hacer que el viento me ayudara a llegar rápidamente con los demás. Era... mejor que nada, ¿no?
- ¿Lena? -fue lo primero que escuché de Luke.- ¿Dónde estuviste?
