capítulo 10.

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“Mi corazón está a punto de romperse
Y no puedo seguir fingiendo
La fantasía de que serás mía
Estoy soñando”

“I Should Be So Lucky” - Kylie Minogue

Hermione había quedado con Harry y Ron de ir a comer algo en Hogsmeade durante el domingo libre, estaba nerviosa de encontrarse con ellos y tenía miedo de lo que podían llegar a decir sobre la última carta que les envió.

La castaña yacía sentada en espera de sus amigos con cierto nerviosismo, sentía que quería desmayarse en ese momento. Intentaba relajarse pero no podía, definitivamente no era muy gryffindor de su parte tener temor en ese momento; a la vez quería buscar el lado comprensible, lo había ¿Quién no estaría de tal manera ante esa situación? ¡Había correspondido un beso de Bellatrix! ¡Y le gustó!

En ese momento Hermione vió entrar a sus amigos, quienes comenzaron a buscarla con la mirada; al dar con ella, sintió su cuerpo debilitarse y el corazón le latía con rapidez, cuando menos pensó ya tenía sentados justo enfrente a Harry y a Ron, quiénes la miraban con atención.

- Mione ¿Estás bien? -preguntó Harry.

– Eh... Si si, hola chicos. –dijo un tanto nerviosa la castaña.– los he extrañado... –confesó.

– Y nosotros a ti, Herms, pero hay algo de lo que tenemos que hablar. -dijo Ron.

– Bien, ya sé de que quieren hablar conmigo y les pido que no me hagan un sermón porque sé que fue un error el que cometí. Ni yo sé que pasó... -habló Hermione rápidamente antes de que Harry y Ron pudieran hacerlo.

– No es tanto eso, lo que queremos decir es que... Nos preocupas, Hermione, esa mujer causó nada más que daños y no sabemos que intenciones tenga contigo. -dijo Potter en un intento de tranquilizar a su amiga.

– Sabemos que las personas cambian, pero no tenemos idea de lo que planea ella. Sólo te pedimos que tengas cuidado y no te dejes llevar mucho.

Ese fue Ron, quien sostenía la mano de Granger con delicadeza, si bien no estaba de acuerdo en lo que estaba pasando, pero lo que menos quería en esos momentos era causar un problema y que Hermione le odiara y se alejara.

– Gracias por preocuparse, tendré cuidado pues yo también me siento un tanto confundida al respecto.

La bruja se tranquilizó completamente, estaba feliz de que sus amigos no la hayan juzgado tan mal al respecto. Cambiaron de tema y comenzaron a hablar sobre sus días, el como iban y sobre todo el control que tenía Cédric en el puesto que anteriormente ocupó Hermione.



Mansión Lestrange

Bueno, así que te dejaron venir. -inquirió Rodolphus, brindándole una taza de café a su esposa.

Sí, definitivamente creo que la he cagado.. -musitó Bella.- besé a Granger, entonces ayer que volvimos de con Andi, le dije que todo lo que pasó fue un impulso y no significó nada; cuando realmente significó bastante.

– Bella no te ofendas, eres una mujer muy inteligente, pero emocionalmente hablando te falta mejorar y muchísimo.

– Eso lo sé, Rodolphus. Estoy confirmando nuevamente que soy un asco, quien lo diría... Bellatrix Lestrange despreciandose a sí misma, ni yo lo imaginé, esa niña me cambió todo. -suspiró Bellatrix.- No me siento merecedora de recibir cariño y amor, hice tantas cosas malas por culpa de ese calvo y de igual manera mía al gozar de todo ello.

– ¿Te estás arrepintiendo? -Rodolphus estaba sorprendido.

– Se podría decir que sí...

Rodolphus sin duda alguna estaba un poco extrañado de aquél comportamiento por parte de Bellatrix. Y es que verla "arrepentida" podría sorprender a todos, ya que ella no era cualquier persona en el mundo.

𝐆𝐎𝐋𝐃𝐄𝐍 | 𝘉𝘦𝘭𝘭𝘢𝘮𝘪𝘰𝘯𝘦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora