¿Sabes una cosa?

155.Ssom

"Personas que desarrollan sentimientos"

Luis Miguel

Luego de unas semanas no éramos los mismos, había una tensión entre los dos constante, ella se había recuperado ya que tuvo una gripe leve. No sabía si festejar nuestro aniversario le pareciera tan emocionante ahora, creo que las cosas han cambiado mucho en esta relación, no se si por la monotonía o hay algo más que no hace que tengamos la chispa de siempre, he de reconocer que errores he tenido y ella ha sabido comportarse frente a ello.
Tenía todo preparado para irnos a Las Vegas, así que llego a casa y la encuentro en la alberca con Miguel, me quito los zapatos y subo mi pantalón a las rodillas dejando caer mis pies a la orilla de la piscina.
-¿Cómo estás?.-Menciono observándola.
- Mucho mejor, este pequeño pedía a gritos el agua.
-¿Puedes venir aquí?.- Nada poco a poco llegando a mi
- Aquí estoy.
-Quiero hacer un poco más divertido y ameno esto ¿Te parece? -Menciono bajando un poco mi torso para quedar frente a ella y dejando un beso en sus labios, me alejo y la observo, me acerco nuevamente y dejo otro beso.-¿si? ¿O te vas a ser de rogar? -Menciono dejando otro beso.

- ¿Debería hacerme de rogar? Seguiré cada una de tus ideas loquillo.
-No seria mala idea, me gustaría intentar convencerte, pero .-Saco de mi bolsillo unos tikets de vuelo a Las Vegas.-Creo que te convenzo de camino a Las Vegas, en nuestro aniversario.
- Micky, yo te invité, eres un roba ideas.- Hace un puchero.- Me desquitaré Basteri, ya sabes cómo soy.
-Y Reconozco que si, pero yo organice el viaje, entonces te devuelvo la invitación, no seas rencorosa.-Menciono quitando mi camisa y dejándome caer al agua despacio y quedar frente a ella.
- Convénceme y sácame este rencor que tengo.- Menciona imitándome.
Me carcajeo un poco y busco su cintura mientras carga a Migue de lado.
- Ven sacó tanto rencor que te hace daño.-Lleno de besos  su hombro para llegar a su cuello.
-Dime que si.
- Si sigues con esos besos, tal vez.
Dejo uno en la cabecita de Miguel y el sujeta mis mejillas.
-Espera que me han detenido.-Me suelta y llegó a sus mejillas hasta llegar a sus labios, me quedó allí hasta profundizar un suave y delicado beso.-Mmm espero que eso sea un si.
- Un sí rotundo, estos pequeños son testigos del amor de papá y mamá.- Menciona sentando a Miguel en la orilla de la piscina.
-Y está llenito de amor.-Menciono haciendo arañitas en su pancita
-¿Dejaremos a Miguel? Creo que con María Victoria estaríamos bien.
- Como tu quieras está bien, al parecer esta pequeña por fin se arrulló porque cuando entramos al agua, creo que hasta Migue sentía sus pataditas.
-Es inquieto, es todo lo contrario a Miguel.-Menciono y siento una punzada del lado izquierdo de mi cabeza, lo ignoro y sigo jugando con Miguel.
- Quiero conocerlo o conocerla ya, me derrito por él, quiero verte cambiando pañales de nuevo.
-¿Verme? Con este pequeño quede cancelado con los pañales, pero se que tampoco podré evitarlo, me gusta hacerlo, y me gusta que descanses cuando debes.-La punzada en mi cabeza no cesaba.-Amor ¿vas a quedarte más aquí? Creo que iré a tomarme un baño.
- ¿Te sientes bien? Te veo un poco pálido, si quieres salgámonos todos de una vez.
-Solo es un dolor de cabeza, debo buscar mis medicamentos, pero si te quieres quedar no hay problema.
- Mi amor.- Posa su mano en mi mejilla.- Son muy frecuentes, ¿Son a raíz de lo del oído?
La observo.-A veces, por un tiempo paran, y luego vuelven, y si es a raíz de ello, pero no te preocupes, aunque a veces pasa cuando trato de ensayar.
- Deberíamos buscar un especialista, mirar las causas para que después no vayan a empeorar, que deseo con todo mi corazón que no ocurra cariño.
-No es necesario, bien sabes que odio estar con un doctor, cuando paso esto me dieron indicaciones y se que puede pasar o no.-Toco su mano en mi mejilla y la acaricio.-Puedes estar tranquila.
- Estaría más tranquila si te ve alguien experto pero respetaré tu decisión, Migue, bebé y yo te consentiremos para que se te pase el dolor de cabeza, vamos arriba.
Sonrió .-Si quieres estar más tranquila puedes hablar con el doctor que siguió mi caso.-Menciono cargando a Miguel y saliendo del ahí primero, estiro mi mano para que la tome y salga de la piscina.
- No quiero ser intensa con el tema, solo quiero que sepas que me preocupo por ti y si tú dices que estás bien, te voy a creer porque no hay secretos entre nosotros, ¿No?
-No los hay, oye hablando de secretos...
- Le tengo miedo a esa frase.
-¿Por qué? No sabes qué tan Bueno o malo sea.