¿Sabes una cosa?

159. Hollo

"Sola"

Me levanto con una gran presión en el pecho, abro los ojos y Miguel tiene su cabeza sobre mí y Micky tiene una de sus piernas sobre mi cadera, me muevo un poco y ambos se despiertan.

- Necesito ir al baño.- Miro a Luis.- Córrete cariño.- Menciono moviendo a Miguelito.
-¿Que Sucede? ¿Necesitas algo?
- No, solo que me sueltes para ir al baño.
Se da cuenta que su pierna me lo impedía y se levanta de la cama saliendo de la habitación, voy al baño con rapidez y regreso por Miguel, bajo a la cocina por el desayuno y él está ahí.

- Buenos días.- Menciono en general.- Señora Rosa, por favor podrías regalarme un bowl de fruta para Miguel y una dona con una taza de café para mí.
-Estaré en el despacho si necesitas algo.-Termina su café y se pone de pie.
- Vale.- Menciono y él deja un beso en la frente de Miguel y se retira, así transcurre el día lleno de distancias, me quedo dormida bastante tiempo, bajo a llevarle los medicamentos a Micky y no lo encuentro por ningún lado, así que llamo a Alejandro.

- Hola mi querida Ara, que extraño escucharte por este canal, pero, más extraño es no verte aquí.- Menciona gritando debido al bastante ruido que tenía de fondo.

- ¿Están en el estudio? ¿En un bar?, no me digas, en el concierto ¿Verdad?

- ¿Micky no te dijo? Lo hicimos porque juró que su doctor le dio de alta.

- Alejandro, tu lo conoces, con tal de trabajar es capaz de mentir las veces que sea necesarias, aún está débil, no sé que carajos hace por allá, tú, que eres su amigo, su manager, debes hacerle entender que su salud es primero que cualquier cosa, porque a mi no me escucha y no le voy a insistir más, con sinceridad.- Menciono con coraje.

- Ara realmente no sabía, te pido una disculpa, lo bajaría del escenario ya pero el concierto está por acabar y sería caso perdido.

- No Alejo, conmigo no te excuses, esto no es culpa de nadie más que de él, ¿te puedo pedir un favor?
- Estoy a tus órdenes.- Responde.
- Alístame el avión para mañana a las 9 de la mañana, para regresar a Los Ángeles.

- ¿Estás segura?
- Completamente, espero que les termine de ir muy bien.- Cuelgo y me siento con fuerza en el sofá, paso mis manos por mi cara en forma de desesperación y mis lagrimas se avecinan, cierro los ojos conteniéndolas y recostándome. Espero a calmarme y voy por mi bebé, nos recostamos en la alfombra de su recámara y nos disponemos a ver una película juntos, Migue pronto se queda dormido y lo acomodo en su cuna, empiezo a organizar mis cosas y las de Miguel para regresar a casa, en eso, de una de las repisas cae el CD que hace algunos años le había regalado a Micky de cumpleaños, lo coloco, empiezan a sonar las canciones.

Empiezo a analizar la letra de cada una de ellas hasta que llego a "Sola", me siento en el piso y me recuesto a la cama y coloco mi cabeza en esta, cierro los ojos y empiezo a cantar muy fuerte.- Sola, en este cuarto me encuentro llorando, sola, recordando que estuve en tus brazos, horas y muy lentas se pasan las horas, loca, estoy a punto de volverme loca aquí sola sin ti.

Luis Miguel
Terminamos el concierto y tenia demasiado calor, pero tenía demasiada energía, observo a Alejandro de brazos cruzados con una botella de agua, me la entrega y da la vuelta.
-Todo salió bien ¿No?
-¿Bien? Micky deberías estar en tu casa en este momento, no aquí en el concierto.
-No iba a cancelar el evento, ya lo teníamos todo organizado, no es muy educado cancelar conciertos cuando soy consiente que puedo cantar.
-¿Y si te pasa lo mismo en público? Que yo sepa eres demasiado privado con tu vida para que eso suceda.
-Pues al fin soy yo el cantante.
-Y yo tu manager y más que eso tú amigo y entiende de una vez que nos preocupamos por ti, Dios, eres tan  testarudo, no te dejas cuidar ni te tú esposa.
-Ahora entiendo, ¿Qué le dijiste?
-Lo que tú me habías dicho pero al parecer no estas en tan perfecto estado como me acabas de indicar, ya que tu médico te dio de alta.
Resoplo un poco y llevo mis dedos a mi cien pensando un poco.
-Precisamente por cosas cómo estás no quería que nadie supiese o se entrometiera en mi salud, el único que sabe cómo estoy soy yo, se Perfecto cuando puedo dar un concierto y cuando no.
-Aracely tenía tanta razón, haces cualquier cosa con tal de trabajar, como si por un concierto  se te acabara el mundo, pero haz lo que quieras, estar tras de ti es inútil, solo te recomiendo que vayas por tu esposa antes de que sea tarde.
-¿A que te refieres?
Alejandro levanta sus manos y comienza a caminar.
-No me dejes hablando así que sabes más que nadie que odio que lo hagas.
-Así se siente que no escuches a nadie referente a tu salud, hablamos cuando me traigas un papel firmado por tu doctor verdadero.-Comienza a caminar más rápido.
-Alejandro, ven aquí coño.-Menciono lanzándole ella botella de agua y desaparece de mi vista.
Me dirijo al camerino y me doy un baño, tomo una botella de tequila y comienzo a saborearla poco a poco, el líquido quema un poco mi garganta un par de veces y salgo de la bañera, me visto y salgo de allí encontrándome con algunos fotógrafos, me monto al auto y me dirijo a casa, termino la botella y llego a casa, entro a casa y escucho una breve canción al fondo, quito mi gabán y lo dejo en el perchero, me dirijo a la cocina y tomo un poco de agua, observo la hora y son las 11:30.
Decido ir a la habitación y al pasar por el pasillo escucho una voz.
"Sola, en este cuarto me encuentro llorando, sola, recordando que estuve en tus brazos, horas y muy lentas se pasan las horas, loca, estoy a punto de volverme loca aquí sola sin ti."