COMPROMISO

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Las lágrimas caían incesantemente de los ojos de Aika Kiriyuu mientras observaba a Raynare, el ángel caído, sosteniendo el Twilight Healing que había extraído del cuerpo de Asia. El dolor y la desesperación se mezclaban en su voz, creando una sinfonía de sufrimiento.

"¡¡Asia!!" gritó desesperada Aika, sintiendo una impotencia desgarradora al ver a su amiga inerte en el suelo.

"Gracias por todo, Kiriyuu-san. Fue lindo tener amigas como tú e Ingvild-chan..." fueron las últimas palabras de Asia antes de caer, inerte y sin vida, sus ojos cerrándose lentamente mientras su alma parecía abandonar su cuerpo.

" fueron las últimas palabras de Asia antes de caer, inerte y sin vida, sus ojos cerrándose lentamente mientras su alma parecía abandonar su cuerpo

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Kiriyuu, con las piernas atravesadas por lanzas de luz, hizo un esfuerzo supremo por mantenerse en pie. Sus lágrimas caían sin cesar, mezclándose con la sangre que manchaba el suelo. "Debo vengar a Asia. Ella no tenía por qué terminar así. ¡¡Este maldito mundo fue el culpable!!" gritó, llena de ira y dolor, su voz resonando en el aire como un eco de desesperación.

Raynare sonreía burlona, disfrutando del sufrimiento de Kiriyuu. "Te mandaré con tu querida Asia-chan," dijo con una voz llena de maldad y satisfacción.

 "Te mandaré con tu querida Asia-chan," dijo con una voz llena de maldad y satisfacción

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"¡Ya basta!" gritó Ingvild, llegando justo a tiempo para ver la trágica escena. Sus ojos brillaban con un fuego sombrío, su cabello púrpura cubriendo parcialmente su rostro. Su energía mágica se arremolinaba a su alrededor, creando una atmósfera cargada de poder y furia.

Raynare intentó atacar a Ingvild, pero esta creó una cúpula de agua alrededor del ángel caído, encerrándola en una prisión líquida. El agua se movía con vida propia, respondiendo a la ira de Ingvild.

 El agua se movía con vida propia, respondiendo a la ira de Ingvild

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LUCIFERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora