REY DE LOS DIOSES VS EL REY DE LOS DEMONIOS

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El sol brillaba intensamente sobre el lago, creando reflejos danzantes sobre la superficie del agua. Issei y Gabriel se encontraban cerca del lago, un lugar lleno de recuerdos compartidos. Gabriel estaba recostada en el hombro de Issei, y la calidez del momento los envolvía en una sensación de atemporalidad.

"Parece que no hubiera pasado el tiempo," susurró Gabriel, su voz llena de nostalgia.

"Parece que no hubiera pasado el tiempo," susurró Gabriel, su voz llena de nostalgia

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"Para nosotros, unos mil años no son nada. Somos casi eternos," murmuró Issei, tratando de consolarla.

"Aun así, pasó," dijo la joven, levantándose lentamente de su asiento. Issei la miró con incredulidad, pensando que sus palabras la habían herido. Sin embargo, Gabriel le dio una sonrisa tranquilizadora, disipando cualquier duda. Sin previo aviso, comenzó a desabrocharse la parte superior de su ropa, revelando su sostén. Luego, con una confianza y gracia inigualables, se lo quitó, dejando ver sus pechos desnudos y sus pezones rosados. Issei observaba embelesado, la perfección de su piel y la elegancia de cada movimiento.

Gabriel continuó, desnudándose completamente, dejando caer la parte inferior de su ropa. Su cuerpo entero se mostró ante Issei, quien no podía apartar la mirada de su belleza. La joven sonrió con picardía, sabiendo que Issei entendía perfectamente lo que quería.

"Veo que ya no te pones nervioso. Supongo que has visto muchas mujeres desnudas," comentó Gabriel, divertida.

"Tal vez," respondió Issei con una sonrisa. Gabriel dio un salto y se sumergió en el lago, el agua envolviéndola en un abrazo refrescante. Issei recordó la primera vez que estuvieron en ese lugar; ella había hecho lo mismo y él se había puesto nervioso, ya que era la primera mujer que veía desnuda. Ahora, la situación era diferente. Aunque seguía sintiendo mariposas en el estómago, ya no tenía el mismo efecto sobre él.

Gabriel lo miraba desde el agua, llamándolo con la mano. Esta vez, Issei no dudó. Comenzó a desvestirse, dejando caer cada prenda hasta quedar completamente desnudo. Con una decisión firme, se metió al agua. Aprovechando que Gabriel estaba de espaldas, la abrazó desde atrás, sintiendo su intimidad rozar el trasero de la joven. Gabriel dio un pequeño salto al sentirlo, pero se acomodó entre los brazos de Issei, disfrutando de la cercanía.

"Creí que no entrarías," murmuró Gabriel, nerviosa pero contenta, tratando de controlar sus pensamientos.

"No perdería esta oportunidad," dijo Issei coqueto, acercándose más a ella. Sus manos comenzaron a explorar su cuerpo, acariciando suavemente su piel, mientras sus labios daban mordidas juguetonas en la nuca de Gabriel. La joven dejó escapar suspiros de placer.

Gabriel se giró, quedando de frente a su amado, y sus labios se encontraron en un beso apasionado. Sus lenguas jugaban, explorándose con intensidad. Sus pechos desnudos chocaban contra el torso de Issei, y la intimidad de este rozaba la suya, aumentando el deseo entre ambos. Issei llevó sus manos al trasero de Gabriel, apretándolo suavemente, haciendo que la joven emitiera un tierno gemido.

LUCIFERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora