Plegó las alas y descendió hasta arrodillarse a sus pies desnudos. Sakura Haruno le observó mientras se quitaba la máscara y besaba su empeine. La cara desfigurada no ocultaba lo guapo que había sido y su mirada, aunque ahora oscura, ocultaba el poder de su sangre maldita.
—Mi señora.
—Llegas tarde —lo regañó—. ¿Qué ha pasado esta vez? ¿Has salvado a una joven doncella? ¿Llevado el alma de una anciana?
—No —negó él sin apenas poder ocultar lo gracioso que le resultaba enfadarla—. Me he perdido divagando en las nubes mientras veía la sangre de mis enemigos llover como si de una lluvia carmesí se tratase.
Sus labios subieron por su pierna, acariciando sus dedos sus muslos.
—Tu imaginación se supera cada vez más.
Alargó una mano hasta arrancar una de sus plumas, olisqueándola. Luego, lamió las puntas. Pudo ver su rostro tensarse y la forma en que sus ojos cambiaron de color momentáneamente. Al mismo instante, separó sus piernas para encajarse entre ellas, arqueando su cuerpo hacia ella, ofreciéndose.
Sakura ladeó la cabeza, divertida con ello. Acarició su mentón, pensativa.
—Los demonios sois tan sencillos de llevar al pecado.
Obito extendió su boca en una mueca socarrona.
—Y a ti te encanta llevarnos al pecado.
Ella arrugó la nariz.
—Para esos sois mis demonios. Los que me atormentaron durante años, bajo mi cama, mi armario, bajo mis ideales y mis miedos. Sois míos y como tales, me servís.
Él enarcó una oscura ceja.
—Aunque, yo soy tu preferido.
—Obviamente —reconoció sonriendo—. Fuiste el más cruel de todos. El que más insistías en dominarme, para al final, terminar de rodillas ante mí.
—Maté a mucha gente para llegar si quiera a tocarte. Arrase con cuanto conocía y te hacía daño. Modifiqué el mundo por ti.
—Eso también liberó a los demonios —le recordó.
—Lo sé —reconoció él mordisqueando los nudillos de sus manos—. Pero eso te convirtió a ti en nuestra reina.
Sakura aumentó su sonrisa. Una que en antaño fue dulce a una retorcida y cruel.
Miró a lo lejos, donde otros demonios plegaban sus alas y sus ojos brillaban, amenazantes. Ese era su reino. Ella era la reina.
Bajó la mirada hacia el demonio entre sus piernas.
—Hazme tuya —le dijo—. Igual que la primera vez. Igual que las futuras veces.
El demonio sonrió, con esa forma cruel y lasciva que tan bien conocía.
—Como quiera mi reina.
Los rayos del cielo oscuro sesgaron la noche. El aleteo de alas de crueles profecías cubrió sus gemidos. El mundo era suyo.
Y era perfecto.
.
.
"Una humana corrompida. Un alma pura convertida en la señora de la oscuridad. El pecado como algo idílico. Qué clase de mundo es ese que puede gobernar. Pues no es otra más que la parte del destino entre el bien y el mal".
La bruja dejó el libro una vez más y apagó la vela en silencio. Se sentó de nuevo en la butaca y observó las luces encendidas.
"Aún queda mucho destino".
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Rose
FanfictionUna rosa y muchas espinas. Amores de cuento de hadas, una bruja, un libro y algunos niños. ¿El misterio será la rosa? Este fic participa en el #multisakumonth2021 y es #sakuharem #multisakumonth2k21 Muchas gracias a la página por dar la oportunidad...