Final.

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Final.

Marzo 2020.

La torra el birrete es algo que jamás creí ver sobre mi cuerpo, han pasado cuatro años, casi cinco desde que Jos se plantó en el portón de la escuela para proponerme matrimonio y puedo decir que si, fueron los cuatro años más largos de mi vida, pero por fin me encontraba graduada.

¿La relación con mi familia? Bueno mejoro demasiado, mi madre es una persona soportable ahora y mi padre pues es reservado como siempre, ¿Ana? Bueno ella, se encuentra en espera de un bebe con Azael, al final resulto salir bien aquello y bueno hace dos años se casaron y después de la luna de Miel nos dieron la noticia de que un pequeño Canela se encontraba en aquel vientre, ¿Harry? Bueno ese chico también se encuentra en un feliz matrimonio desde hace un año y aun no encargan bebe, pero sé que pronto lo harán.

Conmigo y respecto a Jos, bueno nos separamos hace un año después de una pelea fuer... Bromas, seguimos juntos y felices, mudo toda su oficina a mi casa y trabajaba desde mi casa, hemos vivido juntos desde hace cuatro años y como lo prometió hemos recreado las escenas sexuales que he escrito, podría decir que, si fue complicado adaptarnos al nuevo método de vida, pero amábamos nuestra compañía y lo más importante nos amamos.

Ahora por fin me encuentro graduada de la universidad, soy médico y empezare a ejercer mi carrera con calma y tranquilidad después de mi boda la cual llevo planeando estos cuatro años y precisamente es hoy, mi madre y hermana entraron a mi habitación y sonrieron al verme empezar a quitarme la toga y el birrete.

Me coloque mi vestido de novia rápidamente, con ayuda de mi madre me coloque los tacones y salimos de la habitación, mi padre como buen señor jefe de la casa según él me entrego al altar que improvisamos en al jardín de mi casa.

Una boda sencilla, tranquila y no tan costosa, solo los amigos y familiares cercanos se encontraban en la ceremonia y claro la pequeña comida que organizamos. Bryan y su esposa hicieron el brindis más divertido de la vida mientras yo cargaba a la pequeña Cielo en mis brazos, su pequeña y amada hija de dos años.

Cuando por fin pude sentarme en la comodidad de mi silla en la mesa de honor Jos llego a mi lado un poco preocupado.

— ¿Todo el orden? — Pregunto y asentí.

— Solo un poco cansada, nada del otro mundo — Dije y el asintió.

Permaneció conmigo dándome algunos mimos, al pasar las horas de un momento me puse de pie y camine hacia la recamara, me quite mis tacones del demonio y los cambie por una hermosas y deliciosas chanclas blancas, mire el balcón de la recamara, me confundí al ver a todos mis amigos parados en medio de aquel callejón que dividía la casa mía y del vecino, me acerque y abrí la puerta, Jos apareció en el otro balcón de la casa de alado, sonreí y el me mostro su hermosa sonrisa de conejo.

— Alana — Dijo y sonreí.

— Neandertal — Dije y el asintió.

— Tenemos dos casas ahora, esta será mi oficina para que en ningún momento este lejos de ti, desde este balcón poder verte y jamás perderte, estoy tan tranquilo ahora por que se que cada que mire esta ventana no habrá una pared tapándome la vista — Dijo y lo mire con mis ojitos bellos brillando.

— Jos, Jos Canela eres un idiota, un idiota que amo — Dije y sonrió.

— Alana Westbrook eres una de las autoras más famosas, has publicados cinco libros y hoy frente a todos quiero proponerte que escribas esta historia de amor y la lances, será un gran éxito como todo lo que haces — Dijo y sonreí divertida.

— ¿Así y como la llamare? — Pregunte y él sonrió.

— Al otro lado de la ventana — Dijo y asentí mientras dejaba caer mis lágrimas.

Se acerco aun más y yo igual para asi besarnos.

Los aplausos no se hicieron esperar y las fotos tampoco, sonreí entre aquel beso y si escribiría esta hermosa historia de amor.

Por que al otro lado de la ventana encontré un balcón y mi mirada ubico a quien seria el amor de mi vida toda la vida y con quien compartiría toda una vida completa.

Por que Jos Canela fue todo desde el comienzo y siempre será ese chico, asi como la luna espera el eclipse con el sol, yo esperare por él y si la vida no nos hubiera querido juntos no importaba, siempre me encontraría del otro lado de la ventana.

Por que Al otro lado de la ventana...

Por que Al otro lado de la ventana

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Al otro lado de la ventana/Jos Canela.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora