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Capítulo 23

El banquete estaba más lleno que nunca.

Incluso las débiles damas decidieron asistir al banquete con la ayuda de sus doncellas.

Con el tiempo, el interés de todos por Ariel creció y llegó a su punto máximo.

El Conde Caterbell, que estaba a cargo de la donación para el banquete, recogió un sobre con el escudo de La Carte.

- "Este es un artículo presentado por el Gran Duque de La Carte. En primer lugar, un cuadro con la firma manuscrita de la Princesa. A continuación..."

El Conde se atragantó al intentar leer el contenido de la carta.

- " ¡¿Ha donado el collar de diamantes azules llamado la lágrima de la sirena.....?!"

- "Gasp!"

El interior de la sala se quedó en silencio en un instante.

Todo el mundo se detuvo después de hacer un sonido asfixiante.

Las lágrimas de la sirena...

El diamante azul, el diamante más raro, ¡es algo sorprendente!

La lágrima de sirena es un collar tan caro que no podría comprarse ni siquiera sumando todos los precios de los artículos presentados por los nobles en el banquete.

También había nobles que quería obtenerlo, aunque sea una vez en su vida.

La gente estaba sorprendida por la riqueza del Gran Duque de donar el hermoso collar de diamantes más raros del imperio de manera tan casual en el banquete de caridad, pero deberían estar sorprendidos por algo más.

'Espere un minuto. ¿El...orden?'

Cuando se presentaban tales artículos, era un principio indicar el más valioso primero y el menos valioso después.

Pero había algo más en el orden antes de la lágrima de la Sirena. Es una pintura de la Princesa.

' ¡¿Significa esto que la pintura vale más que el diamante azul?!'

Todos los nobles miraron con asombro el cuadro en tela.

El Conde Caterbell bajó la tela con manos temblorosas.

Los reunidos en la sala saludaron el cuadro con los ojos entrecerrados por la luz.

- "Ooh....!!"

Fue el mayor intercambio de dinero de caridad en la historia del Imperio.

Los aristócratas comenzaron a pujar y a subir su precio como si estuvieran hipnotizados por él.

- "¡10 millones de denales!"

- "¡15 millones de denales!"

- "Yo no puedo perder. ¡15,5 millones de denales!"

Era la primera pintura de Ariel, pero ahora la curiosidad por ella ha alcanzado su nivel más alto.

Por otra parte, parecía completamente diferente a los que creían que la pintura valía más que un diamante azul.

Cualquiera que sea la pintura, el valor de la pintura era superior al del diamante, todo porque el Gran Duque la declaro más valiosa que el diamante azul.

Los nobles dejaron a un lado el collar de lágrimas de sirena y empezaron a pujar por la pintura de Ariel.

- "Lo comprare."

- "El Conde lo doblara en por mí."

- "No, ¡lo haré yo!"

El emperador, que estaba presente, se reía de la divertida reacción de la gente por el Gran Duque.