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Capítulo 28

Le dijo a Susan que era mejor así, pero Ariel sentía lo mismo.

'Desearía haber nacido como una La Carte desde el principio'

Cuando sea adulta, tendrá que divorciarse de Luciano y entonces también tendrá que dejar este lugar.

'Eso significa que también romperé con Susan cuando llegue el momento'

'Si yo fuera la hija del Gran Duque, nunca tendría que casarme'

Habría vivido toda su vida con Matías, Luciano, Allen, Woods y Susan sin romper con nadie.

'Eso significa que también estaré junto a Luciano como su hermana, ¿verdad?'

A diferencia de su hermano Jerónimo, que solía golpearla y atormentarla día tras día, Luciano era un poco caprichoso, pero no le hacía nada malo.

'Me gustaría tener una familia como esta....'

Eso pensó Ariel, enterrando su cara en el hombro de Matías, aspirando su aroma algo almizclado y fresco.

◈◆◈◆◈◆

*Pio Pio* *Pio Pio*

El sonido de un pájaro se escuchó desde la rama frente a la ventana.

Los capullos que se formaban en las ramas también revoloteaban con gracia.

El invierno, que parecía no terminar nunca, ha pasado y la primavera ha llegado al Imperio.

En la mansión de La Carte sopla un aire cálido y las flores del jardín que se ve desde la ventana de la habitación de Ariel están en plena floración.

Y a Ariel le gusta comer fresas en estos días.

- "Ñam"

Las fresas eran rojas, dulces, ácidas y jugosas.

La frescura de la fresa se extiende en su boca mientras las come una a una.

'Cuando vivía en un marqués, sólo comía las que quedaban aplastadas en la tarta de cumpleaños sobrante de Jerome'

Pero ahora, todas las fresas frescas de aquí eran de Ariel.

Ariel comía fresas, incluso las mojaba en crema. También se bebía lo que Susan exprimía y lo mezclaba con leche.

Cuando Ariel, que es quien más come, se hizo especialmente adicta a las fresas, Susan y las criadas se dieron cuenta de lo lindo que es y no supieron qué hacer.

Entonces, un día, Susan adquirió una gran cantidad de fresas con las criadas y lo convirtió todo en un jarabe de fresa.

- "De esta manera, podrás saborear las fresas incluso después de que pase la primavera".

Se dice que el jarabe de fresa, hecho con azúcar y fresas por encima, se come con un té caliente y se echa en las tortitas en lugar del jarabe de arce.

A Ariel le gustaba todo lo que estuviera hecho con fresas, así que miró con alegría las botellas de fresa roja con algunos arándanos y hojas de menta.

Cuando Matías se enteró de que a Ariel le gustaban las fresas, compró la mayor plantación de fresas del imperio sin mostrar mucha preocupación.

- "Diles que envíen aquí sólo los mejores productos"

A partir de entonces, las fresas gruesas, dulces y ácidas con magia de conservación comenzaron a entrar en la finca del Gran Duque a lo largo de las cuatro estaciones.