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Capítulo 21

"Rojo escarlata...?"

Ariel susurró en voz baja.

"Y los ojos de la Señora son como rubíes. Parecen bonitas piezas de joyería."

"Nunca había oído hablar de algo así."

Susan levantó los delgados brazos de Ariel y se levantó un poco la manga.

"Mira tu piel. Es blanca, suave y húmeda. Cuanto más crezcas, más hermoso y más justa serás."

Susan besó suavemente a Ariel en el interior de su brazo.

"Tu piel es blanca como la nieve, no creo que pueda encontrarte cuando nieva."

Ariel tartamudeó confundida.

"Pero.... ¿No es raro que tenga una piel tan blanca?"

"No es raro. ¡Hay muchos jóvenes que quieren tener la piel blanca y no encontrar ninguna forma de tener la piel blanca! Eres muy bendecida."

"Bendecida...? "

Susan acarició las mejillas de Ariel.

"Sí. La joven señora está realmente bendecida con la belleza. No los conozco, pero estoy segura de que serás mucho más hermosa que tu padre o tu hermano. Tanto en el corazón como en la apariencia."

Ariel volvió a preguntar como si se lo hubieran confirmado.

"¿Estás segura de que soy bonita, Susan? ¿No soy bonita solo a los ojos de Susan?"

Susan se echó a reír.

"Joven señora, incluso si le pregunta a alguien más en este mundo, todos definitivamente dirán que tiene una apariencia muy hermosa. ¿Has visto al tesorero Dalton o a las doncellas enamorarse cuando te miran?"

Susan fingió no darse cuenta, pero sabía que el mayordomo, Allen, también le pasaba lo mismo.

Sería malo burlarse demasiado del viejo.

"Solo hay dos personas en el mundo que dicen que no eres bonita, y no sabes que eres bonita porque vives con ellos."

"Es... es eso realmente así?"

Susan asintió enérgicamente a Ariel, quien agarro su ropa con los ojos llorosos.

"Se lo digo enserio, joven señora. Lo juro por mi nombre."

Susan llevó a Ariel al frente del espejo rosa de cuerpo entero.

Ariel parecía asustada cuando se vio a sí misma.

"Mira al espejo. Recuérdalo bien de ahora en adelante."

".........qué?"

Susan miró el reflejo de Ariel en el espejo.

"A partir de ahora, lo que estás viendo ahora mismo es hermoso. No hay otro estándar. La apariencia de la Dama es bonita."

"A partir de ahora, la apariencia que tengo es bonita... "

"Sí, tus estándares siempre tienen que ser hermoso. De esa manera, incluso si no cumple con los estándares del mundo, aún puede mostrar su belleza sin quedarse atrás."

Ariel se acercó al espejo.

Hasta ahora, incluso si había un espejo, no se miraba en el a menudo.

Ella no quería verse en el espejo incluso cuando Susan le ata el pelo con lindas cintas o la viste.

Se sentía triste al ver su feo apariencia en cosas bonitas.

Pero cuando escuchó a Susan se miró al espejo y vio su pelo color rojo por primera vez.