Die For You (HERMIONE y HARRY)

Capítulo 52

—¡Harry! ¿estás ahí? —Hermione llamó en voz alta.

La voz de Hermione estaba cargada de angustia e incertidumbre, llegó hasta él, liberándolo durante un momento de sus pensamientos. Harry acababa de leer uno de los recetarios de su madre y estaba a punto de levantarse para unirse a ella en el primer piso cuando Hermione apareció ante él con los ojos tristes, a punto de llorar. De inmediato la abrazó.

Harry no dijo nada, no quiso preguntarle lo que le ocurría hasta que se calmara un poco, sino que la abrazo fuertemente contra su pecho, mientras ella lloraba tendidamente.

Todo iba de mal en peor. La vida apestaba con ganas, y de nuevo Hermione volvió a desear con todas sus fuerzas que fuera un sueño y que su padre no estuviera muerto. Lo quería ver de nuevo como su ultimo recuerdo bueno. Sentado en su sitio frente al enorme escritorio de madera, donde estaba leyendo el periódico por la mañana y no muerto.

Hermione levantó la vista hacia Harry. Él pudo ver que había estado llorando por mucho tiempo, con la cara apesadumbrada y surcada en lágrimas, sus ojos hinchados llenos de temor. Hermione se agachó de nuevo, llevando la mano hacia su cuello.

—¿Podemos hablar en la cocina? —preguntó Harry.

—Sí, por supuesto —respondió Hermione limpiándose las lágrimas.

Después de un rato en silencio, bajaron a la cocina, Harry preparó la tetera y se sentaron frente a frente. Harry puso dos tazas de té sobre la mesa.

—Gracias —dijo Hermione mientras tomaba la taza que le ofrecía.

El calor que irradiaba la bebida y que se transmitió a todo su cuerpo desde sus manos, fue lo suficientemente reconfortante como para permitirle dirigirle una sonrisa menos forzada.

—¿Me contaras que te ocurrió?

—Ese hombre era mi padre, Harry, quería averiguar quién era el hombre de la fotografía y era él —dijo Hermione mirándolo con intensidad y nerviosismo.

—¿De quién hablas? —preguntó Harry desconcertado.

Hermione, con la cara todavía manchada por las lágrimas le mostró una fotografía. Era una foto donde aparecían Lily y James Potter junto a Albus Dumbledore y otro hombre, la cual, le explicó ella, la había sala de estar justo cuando llegaron. Harry clavó la vista en aquella imagen sin parpadear.

—El hombre de esta fotografía, el que estaba con tus padres y Dumbledore, él era mi padre y ahora sé que todo este tiempo estuvo muerto —Hermione respiró hondo y Harry podía ver que su mente daba vueltas. Sus labios nerviosos se estaban moviendo más rápido de lo que podían para lograr pronunciar las palabras.

—¿Cómo es posible? —sacudió la cabeza con incredulidad.

—La señora Bathilda me lo explico todo, bueno, al menos lo más relevante.

Harry tragó, sintiéndose culpable no pudo mirarla a la cara, por haberla arrastrado a Godric's Hollow donde se reencontró con ese pasado tan doloroso. Parecía ser que aquellos tiempos de paz y tranquilidad se habían vuelto completamente turbulentos.

Hermione le dio un sorbo al té, luchando por componer su semblante y dejar de traslucir la tristeza que sentía ante las circunstancias a las que se enfrentaba, Harry menos que nadie, tenía la culpa. Pero ella lo estaba haciendo sentir culpable.

A pesar de todo lo que había sucedido, sin importar cada situación terrible y devastadora que habían soportado hasta ahora, Hermione estaba feliz de que estuvieran juntos, porque tenía a Harry a su lado y sabía que podía contar con su apoyo. Hermione negó con la cabeza.