Recuerdos de nuestro Capitán.

13

Pasaron unos días desde ese acontecimiento. Ahora solo era Ace y Luffy, se la pasaban haciendo lo que con Sabo hacían, corrían de aquí para allá, cazando y buscando peleas. Sin embargo, aún no olvidaban a su hermano.

— ¡Aquí voy, Ace! —dijo el pequeño azabache con la cicatriz debajo de su ojo corriendo hacia el pecoso mientras parecía tomar impulso con su brazo en otro intento de hacer su ataque "Gomu Gomu no Pistol" que en esos tiempos no le salía.

El pecoso estaba frente a él esperando el ataque del menor, sin embargo, no se movía ni un pelo de él, se encontraba de brazos cruzados y mirada un tanto seria— ¡Gomu gomu no.... Pistol! —gritó el menor sorprendiendo a Ace cuando vio que el brazo de su pequeño hermano se estiró mucho más de lo que se esperaba, pero aun así lo esquivó con facilidad.

Solo vio como el brazo del menor se regresaba hacía éste, haciendo que diera mil vueltas como trompo, hasta caer al suelo.

Ace río— ¿Qué demonios es eso? Así no podrás ganar —cesó de reír mientras veía a su hermano menor mareado en el suelo— No importa que tan fuerte seas, tu puntería no sirve. Después de todo la goma no sirve en combate —señaló a Ace.

— ¡Cállate! ¡No molestes! —gritó un pequeño Luffy molesto, y claro el mayor no iba a permitir que le hablase así.

— ¡¿Qué te pasa?! ¡Solo digo la verdad! —exclamó el pecoso— ¡Lo único qué haces es golpearte a ti mismo y hundirte en el agua como roca!

Los Sombrero de Paja expectantes de tales escenas solo suspiraron. Realmente sus peleas eran típicas entre los hermanos, si quiera... ¿No podía animarlo ni un poco?

— ¡Deja de burlarte de mí Gomu Gomu no mi! ¡Algún día te hará llorar! —gritó el menor, mientras juntaba su frente contra el pecoso empujándolo ligeramente— ¡He pensado en un ataque más poderoso que el Pistol!

— Luffy, es genial. Tu brazo se estiró más que ayer. —se escuchó entre la discusión la gentil voz del rubio, incluso los Sombrero de Paja pudieron escucharla.

— ¿Eh? ¿Sabo? —preguntó el pequeño reno mirando hacia donde la voz había sonado.

En eso Luffy cambió rápidamente su expresión a una sonrisa complacida por las palabras de ilusión del Sabo que no se encontraba ahí.

— ¡Sabo! ¡Eres muy suave con Luffy! —reclamó Ace señalando al lugar donde solía estar el rubio, pero sin percatarse de la situación.

— ¡Lo sabía, soy más fuerte que ayer! —exclamó el feliz Luffy levantando sus brazos.

— ¡Oye, Sabo! —dijeron en unísono los azabaches, hasta que silenciaron con los ojos cristalizados, haciendo un pequeño esfuerzo por no deprimirse, al haberse dado cuenta que el rubio no estaba ahí, y no estaría más.

Luffy haciendo un pequeño puchero se apartó un poco de Ace ganándose así la atención de la tripulación y de Ace.

— Luffy... —dijo Chopper preocupado de que el pequeño de su capitán se pusiera nuevamente triste, realmente no le gustaba verlo así ni en sus recuerdos.

Luffy suspiró— Sabo si era un buen hermano.

— Claramente lo era —suspiró Nami, dándole la razón a Luffy, pues en el tiempo que iban viendo las memorias, claramente Ace era muy diferente a cuando lo conocieron, pero eso no le quita de encima el hecho de que también es un buen hermano mayor que se preocupaba por Luffy.

— Lo es —confirmó Robin con una sonrisa, los demás entendieron, pues claro, Luffy aún tenía a Sabo.

Ace al escuchar las palabras del menor no dudo ni un minuto en ponerse histérico, básicamente como siempre— ¿¡Qué dijiste!? ¿¡Insinúas que mejor hubiese muerto yo!? —reclamó el Ace ardido.

— ¡Yo no dije eso! —contestó Luffy volteándose a ver al pecoso.

— ¡Básicamente si! —respondió Ace dándole un buen golpe en la cabeza al pobre de Luffy.

— ¡Duele! —se quejó Luffy, poniéndose sus manos en su cabeza donde había recibido el golpe, seguidamente para volver a ver a su hermano— ¡Sabo no me pegaba de esa forma!

— ¿¡Qué dijiste!? —gritó Ace, bastante cabreado por algo que nunca dijo Luffy, pero en el entendimiento de Ace, básicamente eso fue una indirecta.

— ¿¡Qué te pasa!? ¡Deberías ser más amable conmigo! —gritó Luffy.

— ¡Nunca!

Los sombrero de paja solo rieron nerviosamente al ver la escena— Claro, nunca faltan esos hermanos —habló Sanji mientras veía a los pequeños discutir, un tanto divertidos de la escena.

Un rato después, regresaron a donde se encontraba la cabaña de los bandidos, estos dos habían construido unas pequeñas casas fuera de la de los bandidos, la de Ace estaba mejor construida y la de Luffy, bueno, tampoco estaba mal.

Al terminar Ace escribió en un papel "Decidí formar mi propio país" eso fue lo que leyeron los Mugiwaras, pero no fue lo único ya que el menor también había escrito un mensaje para los bandidos "Yo también" y así se lo entregaron a estos.

Los bandidos al recibir los papeles de estos salieron a ver qué era lo que ocurría, para ver a los dos pequeños dentro de sus casas sentados con un total orgullo— ¿Ahora que es lo que planean? —preguntó Dadan.

— ¡Para ser fuertes tenemos que aprender a vivir por nuestra cuenta! —respondió Luffy.

— Solo usaremos el baño —siguió Ace para continuamente ver a Luffy al mismo tiempo que el a él, seguidamente voltearse indignados con un ligero "¡Hmp!" de parte de los dos infantes, claramente estaban aún molestos por su discusión.

Dadan suspiró, y no hizo más preguntas, después de todo era cosa de los niños, además de ser unos pequeños monstruos seguían siendo niños, y eso lo entendía.

Robin soltó una pequeña risa, y sus compañeros también la entendieron, pues notaban lo mucho que Luffy imitaba a Ace, como los hermanos normalmente lo hacen, pero ver esa parte de vida de cuando era menor de su capitán, se les hacía realmente tierno, en especial a las chicas, aunque a los demás tampoco se quedaban muy atrás de estar de acuerdo.