La hacker del Mafioso

cap:40 Paola

Nathalia:

Luego de acabar mi trabajo como hacker, me voy a mi habitación y me doy una buena y larga ducha.

Mi prometido la verdad que si está loco ¿Saben como destruyo las últimas casas? Pues él y Quimian se fueron a distancia muy lejos y con un cohete Boom, la explotaban y observaban el fuego desde lejos comiéndo palomitas.

Y para la última, los dos estaban peleando por quemarla primero... ¿Loco no?

Si y luego dicen que somos nosotras las mujeres que somos locas.

Al salir de la ducha me coloco mi crema de dormir con olor a fresa  y mi aceite para la panza.

Luego me coloco una bata de dormir porque ya la panza no me permite dormirme con mis pijamas favoritas provocativas.

Escucho como tocan mi puerta.

¿– Si?

– Nathalia soy yo, Esmeralda.

Inmediatamente voy y abro la puerta.

¿– Qué pasa?
Pregunto preocupada.

- Han traído a una joven malherida y Franco dió la orden que tú la atendieras.

-De acuerdo, no hay problema.

Salgo así mismo como estoy y me dirijo hacía dónde se encuentra la joven.

Entro a la habitación y me encuentro a Soledad colocándole medicina a una joven muy delgada, golpeada y malherida.

-¿Qué le paso?
Pregunto con algo de pena...

-El señor la encontró en unas de las casas de Francio.

Responde uno de los hombres de mi futuro esposo.

Asiento ya imaginándome el trato que se le debió de dar a esta joven.

Me acerco a ella y se ve bastante joven.

¿– Cuál es tu edad?
Le pregunto.

Ella me mira con bastante miedo, y me responde.

– 19...

¿Es que doy tanto miedo? ¿Por qué me mira con terror?
Pienso sin dejar de mirarla.

Le sonrío para que se tranquilice...

– Soledad...

– Dime
Me responde sin mirarme, aún curando a la joven.

¿– Me veo fea?
Le pregunto en un susurro.

– No ¿Por qué preguntas?
Me mira extrañada.

-Es que...
Y la señalo con la cabeza.
<<Ella me mira... Con miedo... Como si fuera fea...

Soledad rueda los ojos.

-Está muy traumada tontita, al parecer ha sufrido daños físicos e psicológico

-Oh.
Digo observándola.

-No la mires mucho que la pones nerviosa.

Me habla en un tono bajo soledad.

-Oh está bien.
Hablo mirando hacía otro lado.

-Nathalia... Me voy a dormir ya la revisé y si ocurre algo me avisas ¿ De cuerdo?

-Está bien soledad.

Ella se despide de mí con un beso en la frente como hacía antes y se marcha dejándome sola con la joven, ya que todos se han ido.

¿- Cuál es tu nombre?
Le pregunto acariciando mi panza, porque los dos pequeños terremotos que llevo dentro no se están quietos.

-Paola.
Responde sin mirarme.