La hacker del Mafioso

cap:25 Fiesta

Nathalia:

Después de haberlo hecho en el baño como conejos estamos acostados hablando de todo un poco.

- Entonces cuando estudiabas en el colegio ¿Todos te temían?

Le pregunto alzando las cejas.

- Si, recuerdo partirle la nariz a un niño por que se metió con mi hermano luego cuando se bañaba le robe toda su ropa y la tiré en el bote de basura, el pobre chico no podía salir... Fue tan satisfactorio.

-Eras muy malo, jajaja. 

Le digo abrazándolo.

- No tanto. 

Y reímos los dos.

¿- Cuántas novias tuviste?

- varias. 

Me contesta como sin nada

- ¿Aún hablas... Con ellas?

Le pregunto con miedo a que siga con algunas de ellas.

Él me mira a los ojos.

- No, no acostumbro a repetir mujeres desde que estaba con ellas, no volvía más ni siquiera les volví a hablar

Omg, pienso.

¿- Y tú cuántos novios tuviste?

- Cuatro... O... Cinco... No estoy segura si llamarle novios a eso, era cosa de adolescentes.

¿- Hablas con ellos todavía?

- No, no los he visto más, desde que me mudé aquí.

-Mmm, que bueno.

Sonrío y me quedo junto a él pensando en lo que dijo...

Lo diría de verdad o escuche mal...

De verdad que no tienes idea de cuánto me gustas...

¿Y si le gusto?... No lo creo... Pero podría haber una posibilidad... Bueno creo que es imposible ¿O si?

Escuchamos que tocan la puerta.

¿-Quién? 

Responde Franco.

- La comida está servida señor. Habla unas de las de limpieza.

- Esta bien.

Avisale a nuestros invitados.

-Si señor.

- Estás consciente de que nuestros padres estarán en una sola mesa ¿Cierto?

Hablo un poco nerviosa y muerdo mis labios recordando el último encuentro que no fue hace mucho.

- Estoy consciente de eso. 

Me dice con una mirada que hace que me de hasta deseo de ir al baño y como punzadas en él estomago... No entiendo por qué me mira así...

- Tenemos que bajar. 

Digo nerviosa...

-Si, ponte algo.

Me levanto de la cama y me pongo un vestido blanco con rosas y unas sandalias blancas.

-Listo. 

Le digo mientras lo miro ponerse unos vaqueros y polo.

El me mira.

- Estás preciosa.

Se acerca a mí y besa mis labios castamente...