Nathalia:
Franco y Quenan nos lleva a mí y Paola a una habitación de seguridad.
-Amor, por favor prométeme que no harás ninguna locura que te perjudique… Por favor no salgas.
Me mira a los ojos, suplicándome con la mirada.-Está bien, te lo prometo.
Le digo.Quisiera decirle tantas cosas, pero no quiero incomodar a Paola y Quimian.
Franco lo nota, me toma de la mano, me lleva por los pasillos y entramos a un pequeño baño.
Él toma mis manos y suspira acariciando mis nudillos.
-Nat... Amor...
Habla un poco bajo.
<<Perdóname, Perdona cada vez que te he fallado, las veces que te he hecho sentir mal y las veces que has pasado un mal rato por mi culpa…-Amor... No tienes por qué pedir Perdón... Yooo…
-shhhh, pone un dedo en mis labios.
-Solo quiero escuchar de tu boca decir que me perdonas.
Y al decir eso se acerca a mis labios y me besa con amor y pasión.
Al separarnos un poco.
-Te amo Franco y te perdono, aunque no tengo nada que perdonarte en una relación siempre hay altas y bajas.
Hablo susurrando y acariciando sus mejillas.-Te necesito amor, te necesito en estos momentos.
Me susurra muy bajo.
Lo tomo del cuello y lo beso con pasión y acercándolo a mí cuanto la panza me permite.
- Soy toda tuya... Hazme tuya Franco.
Sin mucho esfuerzo me sube encima del lavabo y baja mis bragas.
Le quito su cinturón y bajo sus pantalones encontrándome con su amigo ya erecto.-Mmm, parece que alguién ya me extrañaba.
Digo con una sonrisa coqueta.-Siempre princesa.
Habla con la voz ronca.Y sin previo aviso se hunde en mí de una sola estocada, ahogo un gemido en sus labios.
-Fraaa...nnn... Co... Mmm
Gimo.
-Dime amor ¿Qué quieres?
Dice con la voz agitada.-Más rrapi... Dooo....aaahhh.
Sus estocadas son firmes fuertes y precisas.
Luego de unos minutos de gran intensidad acabamos juntos.
-Te amo, Nathalia smith.
Me susurra.-Y yo a ti Franco de Lucas.
Beso sus labios y él me ayuda a bajar delicadamente, ya que la panza casi no me deja.Luego de limpiarnos salimos los dos tomados de la mano.
-Tienes que volver.
Le digo con algo de nervios.-Me aseguraré de eso.
Me da un último beso y abre la puerta.
-Ya es hora Quenan, vamos.
-Si ya voy.
Dice algo... Ido... Nervioso... ¿Qué hubo aquí?-Y Paola.
La llama Franco .-¿Si?
-Cuida de mi mujer.
-Si señor...
Franco y Quenan se van y yo observo a Paola.
-¿Algo, que me quieras contar?
Ella me mira nerviosa.
-Ammm, noo...
-ahh, si claro.
Acaricio mi panza.
Papá estará bien, mis niños.
Pienso.Me dirijo hacía mis bebes y entro a todas las cámaras de seguridad.
Es hora de trabajar.
Franco:
Reúno a todos mis hombres, ya listos.
-Supongo que ya saben lo que deben hacer ¿Cierto ?... Solo tengo para decirles que luchemos con todo lo que tenemos y si llego nuestra hora, pues morir con honor... Y luego de esto... ¡Tomaremos todos unas vacaciones...-
-¡TODOS LISTOS!-¡SI SEÑOR!
Gritan todos.Cada hombre toma su lugar y nosotros él nuestro.
-Quenan, antes que nada... Te noto algo extraño...¿Algo que deba saber?
-Nada importante.
-si claro.
Contesto... Ajá estoy seguro de que algo paso en mi ausencia.-Amor se acercan unos Diez vehículos blindados por la parte norte.
Habla Nathalia por el micrófono
-Buen trabajo gracias... Ya es hora Quenan.
-¿Cómo en los viejos tiempos?
-Si como en los viejos tiempos.
-Todas las unidades de la parte norte estén listos.
Hablo por el micrófono.-Copiado.
Responden.-Unos treinta hombres a pies por la parte sur a las doce en punto.
Dice Nathalia.-Perfecto, es nuestro turno Quenan.
-¿El que mata más lleva un premio?
-Está bien, quien gana tiene que pagar la boda al otro.
-No hay problema, vamos.
Empezamos a disparar a cada hombre que iba acercándose a la casa.
Los disparos no se esperaron para escucharse... Y todo se volvió un campo de sangre.
-¿Cuánto llevas?
Me pregunta Quenan.-Quince.
Le contesto ¿Y tú?-Trece.
-Perfecto.
Acabo con el resto que faltaba.
-Mañana hablaremos de los preparativos de la boda.
Le digo con una sonrisa.-Mierda.
Dice arrugando el ceño.-Amor, estamos rodeados son demasiados.
La escucho desesperada.
-Cariño tranquila, no hay problema que no tenga solución.
Llamo a un viejo amigo Aquino.
-Que sorpresa Franco a que se debe tu llamada.
-Necesito un favor tuyo.
¿-Que quieres?
-Necesito hombres lo más rápido posible.
-Te presto cincuenta de mis mejores hombres... Estarán allá en cinco minutos.
- Perfecto, y gracias.
-Siempre, es bueno hacer negocios contigo, de Lucas.
Cierro el teléfono y veo como entran hombres a mi casa y entre ellos Francio... Maldito.
-No te muevas de aquí Quenan, debo de hacer algo.
-Cuidate amigo, no te dejes cegar por la venganza.
-Lo tendré en cuenta.
Bajo las escaleras de pronto y las luces se apagan, siento un fuerte golpe en la cabeza que me tumba al suelo.
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La hacker del Mafioso
عاطفيةElla una hacker, con cara de niña buena... pero con un pasado que la hace sentir culpable... El un mfioso, fingiendo ser un empresario.... dos vidas tan distinta¿que le tendra el destino preparado? ¡Descubrelo!! aquí en la hacker del mafioso Crédit...