La belleza del paisaje en dicho escenario comenzaba a marchitarse cual llegada del otoño y aun así en su corazón el vigor de la primera era tan ferviente que su pecho dolía con cada uno de sus latidos. Con el ascenso de la luna no solo el panorama se volvió oscuro, las cosas no siempre serian tan brillantes como las estrellas o las luces de la vida nocturna de la ciudad.
--Si quieres puedes quedarte conmigo por hoy.-- Aparcaron en algún lugar de la ciudad. El oscuro manto de la noche hacia acto de presencia así como las luces en las farolas que iluminaban la ciudad.
--Gracias James. Pero me temo que a estas alturas ya debe tener todo tu historial, así que lo más probable es que nos este esperando en tu casa.
--¿Entonces qué puedo hacer por ti?-- Huir a cualquier otra parte hubiera sido su respuesta pero seria casi seguro que su madre lo atormentaría de nuevo con sus supuestas responsabilidades y su estatus.
Así que solo atino a abalanzarse sobre James y devorar sus labios con hambre. Quería fundirse y desaparecer en algún lugar entre los brazos de Bucky, manos, sus labios, en su pecho, en sus ojos, en lo profundo de su ser. En cambio Bucky, estaba abrumado con tantas emociones y sensaciones que recibía de Helmut, las revoluciones subieron a mil por hora cuando los besos descendieron por el cuello y su manzana de Adán mientras que las inquietas manos recorrían su pecho y un poco más con violento cuando se acercaba a la hebilla de su cinturón eran descargas que lo atravesaban y lo estimulaban.
todo ese contacto se sentía bien pero no se sentía bien.
--Helmut espera.—No quiso escuchar y en cambio su mano se incursiono entre aquella zona creando fricción.
Volvió a besar sus labios, aún más desesperado, desenfrenado. Se volvió un contacto húmedo.
--Helmut.-- Sostuvo sus manos y lo hizo verlo directamente a los ojos.
--¿No quieres esto?
--Si quiero esto pero no de esta forma.-- Durante unos momentos Helmut no dijo nada, solo bajo la mirada y su mirada se perdió en algún punto entre el visor de la camioneta, sus zapatos y sus manos. -- Lo siento.
--Tengo que irme.-- Como un impulso salió de la camioneta dejando aturdido a Bucky.
--¡Espera!--Rápidamente Bucky fue tras él.--¡Helmut!-- Alcanzo su brazo y con fuerza lo hizo voltearse y verlo a la cara.
--¡Suéltame James!
-- ¡No puedes irte así nada mas!
--¡Tal vez pueda!-- Lagrimas empezaron a caer por su rostro.--Si no me voy ella me va a encontrar y me va alejar de ti.
--Podemos pensar en lago.-- Dejo de aplicar fuerza y suavemente tomo su mano y entrelazo sus dedos.
--¿Crees que no intente razonar con ella antes? ¡Es prácticamente imposible!
-- Debe haber una manera.
--No la hay James. No se puede razonar con ella.--A este punto, por sus mejillas corrían abundantes las lagrimas y su rostro vuelto una enorme mancha por la impotencia.--No quiero que me aleje de ti.
--Helmut yo- Al otro lado de la calle junto a un auto estaba Oeznik, manteniendo su distancia.
No se necesitaron palabras para entender que estaba ahí para buscar al joven Zemo. Una vez que subiera ahí, había una gran posibilidad de que no lo volviera a ver. Lo más acertado a suponer era que nunca se volverían a ver.
Entonces supo que todo lo que podía hacer en momentos como ese era abrazarlo, abrazarlo fuertemente hasta que se fundieran y se volvieran uno. Poner todo su esfuerzo en recordar cada uno de los lunares en su rostro, la forma en la que sus manos se complementaban tan bien estando juntas, el olor de su perfume, en su suave voz y esa risa que cautivaba a su corazón. Sin darse cuenta, se había vuelto una parte importante para el que no sabia que es lo que tendría que hacer para vivir sin él.
--No me quiero ir James.-- Dijo con la voz hecha apenas un hilo audible para Barnes.
--Hey --Sostuvo su rostro y mientras acariciaba sus mejillas trataba de dispersar las lagrimas en su rostro pero parecía que el las estaba absorbiendo y las expulsaba de sus propios ojos porque ahora era Barnes quien trataba de retener el llanto.-- Si es necesario iré a buscarte. Te lo prometo.-- La mirada de Helmut adquirió un brillo que pudo ser esperanzador u ocasionado por las lagrimas, cualquiera que fuera el motivo, a James le pareció una bella vista de Helmut.
--Más te vale que seas un hombre de palabra.-- El agarre se desvaneció y con el no le quedo de otra a Zemo que subir al auto y que este arrancara, aun con eso no pudo despegar su mirada de Barnes. No fue hasta que finalmente lo perdió completamente de vista que se dio el lujo de llorar desconsolado en el asiento trasero. Mientras tanto, en el asiento del conductor Oeznik observaba por el retrovisor como el joven del que había estado a cargo durante tanto tiempo se desmoronaba, deseando en lo profundo el bienestar del joven Zemo y su corazón, así como la claridad para la señora Zemo que en su intento de retener a su hijo solo hacia que este le terminara odiando más de lo que ya lo hacia.
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Tener esta canción mientras piensas en esa persona que sabias que inevitablemente tendría que partir, es cuando más duele escuchar esta canción.
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THE MUSICAL
FanfictionBucky es un chico problemático y debido a su conducta termina cumpliendo su castigo ayudando a la obra escolar, sin embargo en cuanto llega al auditorio queda flechado por el director de la obra Helmut Zemo y en un intento de verlo más tiempo, Bucky...