La constante punzada en sus caderas le molestaba, pero si con eso podía obtener a un James con el pecho descubierto, los cabellos rebeldes que con el tiempo habían crecido comenzaban a ser un nido revoltoso de color oscuro. Bajar su vista y presenciar los rastros de la noche anterior en el cuello y labios hinchados en el cuerpo ajeno le daban la tranquilidad de que todo estaría bien si era con él.
Se dijo a si mismo que estaría bien si se quedaba en cama por unos minutos más.
Pero luego comenzó un ataque de besos que partió desde su nuca, pasó por su frente, su nariz y dejo múltiples más por sus mejillas.
--Buenos días amor.-- Escuchó la voz ronca en su oído.
Helmut en cambio, no quiso colaborar así que se apego a Barnes y se escondió en su pecho, convencido de que con esa infalible movimiento podría ganarse unos instantes de más dentro de cama.
--Cinco minutos más
--¿Con que privilegio dices eso?
--No se de que estas hablando
--Cuando hago eso me tiras de la cama ¿Qué evita que yo no pueda hacer lo mismo?
--Te falta odio Barnes.-- La voz de Helmut sonó amortiguada por la almohada y un gran porción de la sabana, la cual había aprovechado para adueñarse de ella por completo, dejando completamente a la intemperie a su marido.
--De acuerdo.-- Se giró y le dio la espalda a Helmut --Si esos uno setenta son la diferencia entre estar más cerca del infierno con un calor insoportable y tener una asombrosa vista aérea, no discutiré tus privilegios.-- Esa declaración le valió una patada que lo lanzó fuera de la cama y lo hizo besar la fría madera del piso.
--Ahora sabes lo que estar más cerca del infierno.
--Ok ya entendí el mensaje. Me controlaré la próxima vez.-- Decir lo maravillado que lo tenía ese hombre era para tomar una taza de té en la terraza durante todo el día, una vez que empezara a enumerar sus razones seria una tarea que podía extenderse para la eternidad.
Ese cuerpo que con los años se consolido en un excelente ejemplar del hombre perfecto, los pequeños rastros de barba sobre su mentón, esa calidez y seguridad que le brindaba tan solo su presencia, sin mencionar cada una de esas pequeñas muestras diarias que le recordaban cuanto lo amaba, era como un sueño, solo que este sueño era realidad y era suyo.
Helmut recordaba sus días como estudiante junto con James, le sonaba como algo lejano que había sucedido hace tantos siglos atrás, que solo se trataba de un cuento de hadas pero luego miraba la sortija brillando en su dedo anular y todo lo que había pasado a su lado era verdad y le faltaban cientos de momentos por vivir con ese hombre al que no solo podía llamar su esposo, su compañero de vida y si quería ponerse más sentimental, hasta podría llamarlo sin problema su alma destinada en esta y en todas sus vidas pasadas y posteriores.
Pensar que James Buchanan Barnes había sido hecho exclusivamente para él le dibujaba una sonrisa que el consideraba tonta pero para Bucky era de lo más lindo que había visto en el mundo.
Salió de su ensoñación cuando Bucky entró a su habitación con una taza de café negro bien cargado y una taza de té de cerezo.
Ambos habían terminado la escuela y se habían graduado de la universidad, Barnes se hacía un nombre entre la escena actoral aunque de momento conseguía papeles secundarios no le faltaban ofertas de trabajo. Zemo tenía unos cuantos proyectos como director y productor, comenzaba a tener reconocimientos en algunos festivales.
Una inexplicable felicidad y fortuna bendecía a este joven matrimonio.
Definitivamente un sueño hecho realidad del cual tenía la satisfacción de vivir cada día en cuanto abría los ojos y en lo más profundo de su corazón deseaba que así fuera todos los días por el resto de su vida.
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Finalmente esta historia se acabo, de hecho desde hace mucho que ya la tenía terminada
Muchas gracias por el apoyo a este pequeño proyecto ajajajajaja, espero que se hayan divertido leyendo como yo me divertí escribiéndolo. Muchas gracias por el apoyo otra vez.
LXS AMO Y HASTA LA PROXIMAAAAAA!!!!!!!!!
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THE MUSICAL
FanfictionBucky es un chico problemático y debido a su conducta termina cumpliendo su castigo ayudando a la obra escolar, sin embargo en cuanto llega al auditorio queda flechado por el director de la obra Helmut Zemo y en un intento de verlo más tiempo, Bucky...