Al momento de abrir esa puerta la sangre en sus venas se helo cuando vio el rostro en el umbral, era un rostro curiosamente peculiar pero ajeno a lo que deseaba ver
--Hola.-- Dijo el desconocido.-- Vengo por la jardinería.
--Claro, pasa.-- Y mientras le mostraba donde podía encontrar las cosas para trabajar en el jardín el chico que no generaba el interés por conocerlo a Helmut se presento como Ikaris. Luego de un gruñido que podría tomarse como un asentimiento le indico donde podía comenzar y se retiro de regreso al interior de la casa y subió a su habitación para observarlo discretamente desde la ventana.
Luego observo cada uno de sus rasgos, desde su rostro, sus ojos y labios, sus manos y prácticamente cada parte de su cuerpo, y después su mente maquino una larga lista en la que enumeraba cada una de las cosas que le recordaban a James así como cada pequeño detalle que prefería en el y cuando termino seguía ahí viendo en algún punto en el horizonte extrañando de nuevo a James Barnes.
Y para el final del día ya le dirigía al recién conocido Ikaris sus peores miradas de desprecio, gracias a su inusual parecido con su chico y por el hecho de que este posiblemente se encontraba al otro lado del mundo pasándola igual o tal vez peor que él.
Y la rutina se repitió por un par de días.
Un día en el que se quedo hasta tarde trabajando, a petición de sus tías los acompaño en la cena.
Aunque había dado una buena excusa para no tener que bajar y compartir la misma mesa, y dicho sea de paso formar un momento incomodo, fue obligado a salir de su habitación y cenar con el invitado de esa noche.
Así que no le quedo mejor opción que ceder solo por esa vez.
Y con la presencia de Zemo siendo una novedad para el joven le fue inevitable buscar una conversación que no se tratara de un par de palabras.
--¿Y cuando volviste?
--Hace un mes.--Respondió en seco y cortante. Solo había el sonido de los cubiertos contra la bajilla.
--Eres de pocas palabras entonces.
--Suele ser un poco reservado pero Helmut definitivamente es un buen muchacho.
--Es nuestra adoración.
--Eso es evidente.
--No hablen de mi como si no estuviera aquí.-- Todos guardaron silencio y siguieron comiendo pero el ambiente se volvió denso hasta que el sonido de alguien llamando a la puerta corto la tensión.
--Yo voy.-- Y con eso se llevo su cara y mal genio a otra parte.
Como prueba de ello al abrir la puerta su ira se manifestó al azotar la puerta.
Y frente a sus ojos ahí estaba el rostro que tanto ansiaba ver otra vez. Se temió que fuera una ilusión, una mala pasada que le estaba jugando su mente que casi cierra la puerta y regresa a la seguridad de las cuatro paredes de su habitación pero una vez que la figura de James Buchanan Barnes estiro su mano e hizo contacto con su mejilla fue que se dio cuenta que no era su mente ni una clase de sueño extraño, era real, él estaba ahí.
Se fijo en las ojeras bajo sus ojos y su expresión llena de emoción pero reflejando el cansancio que trataba de ocultarle, estaban frente a frente.
--¿Querido, porque tardas tanto?-- Con la voz de su tía Úrsula noto que tal vez el tiempo que se había ausentado había sido más del esperado pues para ambos el tiempo se detuvo en el momento en que sus miradas se cruzaron. --¿Hay algún problema?
--Lo siento, soy nuevo por aquí y creo que me perdí.-- Se podría decir que el primero en volver a tierra fue Barnes pero seria una mentira cuando era evidente que su vista aún no se despegaba del todo de Zemo.-- Busco esta dirección.
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THE MUSICAL
FanfictionBucky es un chico problemático y debido a su conducta termina cumpliendo su castigo ayudando a la obra escolar, sin embargo en cuanto llega al auditorio queda flechado por el director de la obra Helmut Zemo y en un intento de verlo más tiempo, Bucky...