Hojas Secas En Otoño

| 𝐂ᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 𝐎ᴄʜᴏ |

ɪᴛᴀʟɪᴀ

ᴅᴇᴀᴍ ᴅᴀᴡsᴏɴ

Antoni me escribe que está en el lado de las bebidas, camino hacia allí hasta que los veo, el lugar está alumbrado y tiene música de fondo, muchos jóvenes y adolescentes pasean por aquí.

— ¿Qué hubo viejo? — me saluda Antoni.

— ¿Cómo está el ambiente ? — Pregunto

— Bien, hay buena movida. — responde y no paso por alto que Mazón este fumando, tenemos prohibido hacer eso. Lo Señalo con la mirada a Antoni — Está nervioso — confiesa.

— ¿Por qué?

— Sin querer vio un documento en la carpeta del técnico que  va ha haber fichaje para los club profesionales, pero no vio la fecha.

Asiento, la academia ha ido creciendo no solo en estructura, sino en reputación, y ya había rumores de eso — ¿Crees que nos fichen ?

— Si, esta.....

— Dean — gritan a un lado y miro hacia donde viene la voz que conozco.

Natalie

Está con sus amigas y se acerca a saludarnos, hacemos un solo grupo y empezamos a tomar cervezas, risas y coqueto rodea el lugar.

— ¿Cómo has estado? — pregunta en mi oído Natalie.

— Bien y ¿tu?

— No también como tú — suspira para después sonreír, es bonita, la minifalda que trae me muestra las piernas que  han rodea mi cintura antes, me inclino a besarla y ella rodea mi cuello, estoy caliente y parece que ella también.

Nos separamos, me despido de mis amigos y la llevo a un motel, adentro doy rienda suelta a mi instinto, Natalie me conoce, sabe mi ritmo y no tiene problema con eso, he bebido alcohol y estoy cansado de los entrenamientos, decido pasar la noche con ella.

— ¿Qué te ha traído nuevamente a dejarte follar por mi? — Pregunto, hace un año que no nos vemos, ella se fue a la universidad y dejamos de comunicarnos.

Suspira — Das buen sexo — dice y le mando una sonora nalgada.

Su cabeza está entre mi pecho y mi brazo, ya no decimos nada y me despierto a las seis, la despierto pero dice que volverá a la ciudad, la dejo ahí voy a mi casa, es sábado, no tengo entrenamiento y decido seguir durmiendo hasta las diez, me levanto y voy ha ver el partido que están mirando los gemelos hasta que veo Keira pasar.

— Adiós Keira — decimos los tres en coro ganando nos una risa de su parte, sale y un poco después sale mi madre.

— Keira olvidó su teléfono — dice mostrando el aparato, me pongo de pie y lo recibo para ir a alcanzarla, es un Alcatel muy antiguo, salgo a la calle pero lo veo a lo lejos que va corriendo hacia "DonaCoffe", me debato en ir o no ir, pero terminó llendo, está cerca y nada me cuesta.

Entró y la busco con la mirada hasta que la veo salir llorando, busco cual sea el motivo, hasta que lo hayo.

Jean Scarlett.

Trato de ir hacia ella pero es más veloz que yo y cuando creo que la alcanzaré, se adentra a una casa un tanto deteriorada.

Me quedo preguntando ¿ Porque lloraba?

Con esa incógnita en mi cabeza y el saber que el sábado será el fichaje, paso mi semana.

Estoy tirado en el sofá mirando el noticiero mientras espero que sean las nueve e irme a mi entrenamiento, el timbre suena y salgo a ver qué es, no solemos tener visitas en día de semana, abro y ...