Maratón 3/3
Al día siguiente, avisamos a mi hermano de que se lo íbamos a explicar a los abuelos de Peter, él estuvo de acuerdo, ya que era lo mejor que podía hacer.
En el desayuno se lo contamos todo, se quedaron bastante sorprendidos porque no imaginaban que esa hermana que tanto había hablado Agus, fuese yo. Lo tomaron bien, y me dijeron que me iban a proteger.Sinceramente tenía miedo, mi peor pesadilla podía aparecer en cualquier momento por aquí, y no estaba preparada mentalmente ni físicamente para echarle cara.
Dicen que tu pasado siempre te persigue, y en mi caso es todo verdad, me fui de dónde nací, para que todo acabase, para que mi mayor pesadilla desapareciese, pero nada de eso sirvió.Hice de todo para que no me localizasen, nunca pagaba con tarjeta, siempre en efectivo, así no tendrían ningún registro mio, me cambiaba de móvil cada seis meses, uno barato, ya que no tengo dinero, o incluso había meses que no tenía móvil porque no podía pagármelo, vivía en lo peor del barrio de Seattle, porque sabía que por ahí no se acercarían...pero nada de todo ese funciono.
Y ahora estoy aquí, muerta de miedo, la pequeña diferencia es que esta mi hermano conmigo, y sobretodo esta Peter a mi lado.
Sorprendentemente está actuando de una forma que jamás vi. Me cuida, me apoya, y sobretodo esta siendo muy sobreprotector conmigo. Es verdad es algo que me gusta, es una faceta suya que me fascina, pero a la vez me agobia, no había tenido a nadie que se preocupase tanto por mi desde hacía años. Santiago apenas se preocupaba por mi, así que la actitud de Peter me incomoda en cierto modo, pero a la vez me encanta, supongo que es cuestión de tiempo que me acostumbre, porque quiero a este hombre en mi vida.
Peter y mi hermano, se fueron a hablar sobre el tema, querían tener algo planeado, y no querían que yo me involucrase.
Bajo las escaleras para dirigirme a la cocina, y me encuentro con la nonna de Peter. Era mi parte favorita de la casa, era acogedora, la parte más bonita de la casa, te daban ganas de pasarte horas y horas estando ahí.
-Ciao bella, como estas?.- pregunta animadamente-Bien, exhausta emocionalmente pero bien, mi cerebro parece una máquina que constantemente esta en funcionamiento, pero supongo que tarde o temprano mi peor pesadilla tendría que salir a flote.
-Cara, no te tienes porque preocupar, todo va a salir bien, y además tienes a mi niño contigo, él te va a cuidar, se le nota que te quiere mucho, y que daría todo por ti.- dice, y yo le dedico una sonrisa.
-Te puedo preguntar una cosa?.- le pregunto y ella asiente.- como era Peter de pequeño?
-Bueno, Peter no tuvo una infancia que digamos muy buena, la paso muy mal cuando era un niño, y durante la adolescencia también. Ha sufrido mucho de pequeño, pero bueno este tema creo que lo deberías de hablar con él, yo no soy la indicada para hablar sobre eso. Además seguro que te has fijado que tiene que cicatrices por todo el cuerpo. dice, y yo abro los ojos como platos, es una jodida broma verdad...-por la expresión de tu cara, diría que no lo has visto, y que he metido la pata hasta el fondo, no le digas nada a Peter por favor, es un tema que lleva bastante mal.-No, no te preocupes no le diré nada, tienes razón, no sabía nada, no he visto aún su cuerpo.- le digo, pero si otras partes de su cuerpo, pienso.
...
Ahora paso mucho más tiempo con mi hermano, come con nosotros, cena con nosotros, pero sin desatender las tareas que tiene.
Nos despedimos de todos, y Peter y yo subimos hasta la habitación. Nos ponemos los pijamas y nos acostamos en la cama abrazados.
-Cómo estas hoy?.- pregunta en un susurro.
-Estoy bastante bien hoy, más calmada, pero aún sigo teniendo el miedo de que pueda venir, y pueda hacer conmigo lo que le de la gana, es horrible siempre tener ese pensamiento.
-Ey, no te preocupes vale.- dice colocándome un mechón de pelo detrás de la oreja.- sabes que estoy aquí, y que nada te va a pasar, te lo prometo.- me dice convincente.Me doy la vuelta encarándolo, y lo beso como si mi vida dependiese de eso, lo beso con pasión, con suavidad, pero sobretodo lo beso como no lo había hecho antes.
Se pone encima de mi, y le intentó quitar la camiseta, pero no me deja, y recuerdo las palabras de su abuela, creo que es un buen momento, aunque lo más probable es que acabemos en una discusión.-Por qué no me dejas quitarte la camiseta?.- le pregunto a la espera de su respuesta.
-No quiero hablar de ese tema ahora, quiero disfrutarte.- dice y me besa el cuello, pero no dejo por finalizado el tema.-Que pasa Peter? Por qué?.- vuelvo a insistir.
-No, no, ¡No quiero hablar de ese tema te he dicho!, no es algo que me enorgullece.- dice levantando la voz
-Confía en mi, no te voy a hacer nada malo, no me lo perdonaría, debes confiar en mí.- le digo tocándole la mejilla.
-Yo...no, no sé que hacer...yo jamás nadie a parte de mi familia lo ha visto, yo...parezco un monstruo, y no quiero que te vayas de mi lado, no lo soportaría.- me dice abrazándome, y yo le correspondo.
-Shh...déjame ayudarte.- le digo, a apartándolo de mi y le digo que se ponga de rodillas en la cama.
-Que, que vas a hacer...?.- pregunta con un ligero temblor en la voz.
-Debes confiar en mi, no voy a hacer nada para hacerte daño, y en el momento en que no puedas más me lo dices y paramos. Confías en mí?.- le digo tocándole la mejilla y le doy un leve beso en la comisura de los labios.-Confío en ti, como si de mi vida se tratase.- me dedica una leve sonrisa.
Allá vamos...
Cojo la camiseta por los bordes inferiores, y poco a poco la voy levantando, escucho como la respiración de Peter va siento más pesada, y cada vez le cuesta más controlar lo que esta sintiendo, tienes los ojos cerrados, y yo no puedo parar de admirar su belleza, sinceramente es guapísimo este hombre.
Continuo levantándole la camiseta, ya había visto alguna que otra pequeña cicatriz, pero eran hermosas, hasta que llego a la parte del pecho...se me parte el corazón, tiene dos cicatrices de lado a lado del pecho, en forma de ''X'', quien demonios le ha ocasionado todo este sufrimiento...
-Deberás pensar que soy un monstruo con tantas cicatrices.- hace una pequeña pausa, y yo le acaricio la mejilla.- pero solo has visto las del pecho, te faltan las de la espalda... que son todavía más horribles
Se da la vuelta, y entre tantas cicatrices reconozco algo y mi mundo se cae en pedazos otra vez en menos de un día...
Reconocería esas dos iniciales en cualquier lado... C.E.
Carlos EspositoMi padre
Y hasta aquí llega esta maratón espero que les haya gustado, ¿Creen que Lali le cuente a Peter que fue su padre quien lo lastimo? , déjenme sus comentarios y sus votos, besos.
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Pedro
RomanceMariana "Lali" Esposito, una chica de veintiún años, alegre, risueña, amable... esta en su ultimo año estudiando secretariado ejecutivo. Su amiga le consigue un trabajo de secretaria en una de las empresas mas prestigiosas y reconocidas a nivel mund...