a different sparkle ━━ adrien agreste/chatnoir.

twenty two

Becca limpió su boca con su mano y se echó para atrás. Su garganta ardía y veía borroso debido a las lágrimas que se le acumularon en sus ojos.

Lo había tirado todo. Incluso el pequeño desayuno saludable que su mamá le preparó en la mañana.

En ese momento se preguntó por qué lo había hecho, solo comió unas cuantas galletas. El ejercicio que haría ese día bajaría todas las calorías, pero no. Estaba decidida a disminuir su talla para la obra.

Se levantó con dificultad del suelo y se dirigió a su lavabo, para enseguida lavarse las manos y los dientes. Tenía que prepararse para su clase de ballet que comenzaría en una hora, por lo que se apresuró a quitarse la ropa y buscar su uniforme.

(...)

—Después de tanto esperar, aquí están las invitaciones para la obra. —la adulta mostró un montón de sobres y sus alumnas sonrieron emocionadas.— Estas son especiales, tienen boletos para asientos en las primeras filas, así que escojan bien a quienes se los darán.

La maestra Jules empezó a repartir dos sobres por alumna, estás eran de color blanco y rodeadas por una cinta rosada, con el nombre de la academia por fuera y dentro detalles del evento.

La pelirroja al estar frente a Becca, sonrió levemente y le entregó tres invitaciones. Ella la miró confundida.

—Tienes que reservar una para el joven Agreste, sabes que se lo prometí a su padre.

La castaña recordó inmediatamente esa tarde en la casa del diseñador y la propuesta de su maestra —que él y su hijo estarían invitados a la presentación.—.

Becca asintió levemente y su corazón se aceleró. Tan solo pensar en que Adrien la vería durante toda la obra la ponía más que nerviosa.

Tomó aire y guardó sus sobres, tendría que idearse una forma de invitarlo sin lucir extraña.

(...)

adrien's pov.
—No es malo que lo que estoy haciendo, ¿verdad Plagg?

Nuevamente me encontraba en el dilema de cada miércoles por semana.

Quería visitar a Becca para charlar y verla un rato más.

Sentía que el tiempo que pasábamos en la escuela juntos ya no era suficiente. Me encantaba estar con ella, a pesar de que la mayoría de las veces pasaba nerviosa o nuestros amigos nos interrumpían y se negaban a dejarnos solos. Cada conversación era de lo más interesante y divertida, y solo por eso tenía la necesidad de conocerla más.

Sabía que siendo Chat Noir todo sería diferente, considerando que ella no tiene la más mínima idea de que somos la misma persona, pero aún así, verla me haría sentir feliz.

Y también podía preguntarle sobre mi y que pensaba sobre mis cambios últimamente.

—¿A que te refieres? ¿A que te conviertes en Chat Noir solo para sacarle información a Becca y usarla a tu favor? —preguntaba con "confusión" e inocencia mientras flotaba alrededor mío.— ¡Nah! Para nada.

Rodeé los ojos. —Me haces sentir culpable.

—Pues no deberías, no estás siendo deshonesto ni tampoco usando los poderes que se te han otorgado sin razón. —volvió a decir sarcástico y yo lo miré mal.— ¡Okey perdón!

La verdad es que Plagg tenía razón. Estaba siendo deshonesto y aprovechado, sin duda Becca me odiaría si lo supiera, e incluso corría el riesgo de que Ladybug me descubriera.