Mi Amor y Dolor

Epílogo

-Despiértate- escucho una lejana voz y suelto un gruñido-, por favor Hazel, despiértate.

Finalmente abro los ojos y veo a Chloe, mirándome como si yo estuviera muerta.

-¿Qué quieres?

-Que empieces a dormir en tu cuarto, para empezar.

Desde hace... varios meses, no he podido dormir sola en mi cuarto. No sueño pesadillas, pero... me da miedo estar sola.

Por eso, duermo con Chloe.

No duermo con Gemma porque ella suele hablar dormida, y honestamente creo que eso me da más miedo que estar sola.

-Déjame dormir 5 minutos más, por favor- digo y ella me golpea fuerte con una almohada.

-No, cariño, despierta.

Yo me inclino para quedar sentada en la cama y cruzo mis brazos.

-Chloe, me estás empezando a molestar.

A mí desde el capítulo 1.

¿Qué?

Nada.

-Es que... no puedes seguir así ¿Okey?

-¿Así como?

-Connor me ha dicho que te duermes en clases.

-En algunas, tal vez.

-Has reprobado 4 materias.

-Cinco- la corrijo.

-Y no estás teniendo una buena alimentación.

-Claro que sí.

-Has rebajado 6 kilos, Hazel. Tía Johana dice que estás en el hueso.

-Ella solo quiere que me opere los senos y el trasero así como ella.

-Puede ser. Pero de igual manera... sabes que no estás bien.

-Si es por lo de mis estudios, tranquila, mamá y papá no se enterarán de mis malas notas.

-¿Qué?

-Hablé con mi tía Johana y va a pagarle a los profesores para que me dejen graduar.

-Tus estudios son lo de menos. Ni siquiera bebes agua, Hazel.

-¿Es necesario?

-Estás de nuevo en depresión. ¿Esto va a pasar cada vez que pierdas algo o a alguien? Porque ya estoy empezando a cansarme, Hazel.

>>Debes levantarte, animarte. Si quieres no lo hagas por ti, pero hazlo por mí, por Gemma, por Jonh, por Johana, por papá y mamá. Todos nosotros nos preocupamos por ti.

>>Hace una semana, papá hizo una reunión familiar donde obviamente no participaste porque estuviste encerrada aquí. En esa reunión nos dijo a todos que teníamos que cuidarte.

-¿Cuidarme?

-¿No lo entiendes? ¡Tenemos miedo de que intentes suicidarte de nuevo!- pronuncia y yo suelto una risa.

-Solo lo intenté una vez, hace un año, después de la muerte de Mateo.

-Pero en esos tiempos estabas deprimida, igual que ahora. No te cuesta nada intentarlo de nuevo.

-No lo haré.

-Júralo.

-Lo juro.

-Debes empezar de nuevo, Hazel.

-Estoy cansada de empezar de nuevo.

Ella se queda en silencio por unos segundos hasta que decide hablar de nuevo.