Te Encontré [Namjin]

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Los gritos del Omega alteraban al rey quien tenía ganas de romper aquellas puertas de su habitación que le habían cerrado para poder realizar el parto, le dolía escuchar como su Omega sufría pero sus hermanos y cuñados lo apoyaban pues también estaban ansiosos, de un momento a otro todo quedó en silencio preocupando al rey pero después fuertes llantos de bebé lo hicieron sonreír.

La puerta se abrió dejando ver a la doctora con una sonrisa cansada por su labor, vio a todos esperando a que hablara y así lo hizo.

-Lo felicito majestad los bebés nacieron saludables y fuertes- dijo la doctora haciendo una reverencia.

-¿Dijo bebés?¿Son dos?- preguntó Namjoon sonriendo ampliamente mostrando sus hoyuelos.

-son gemelos, dos pequeños varones Majestad, pueden pasar pero no hagan alboroto, su majestad Seokjin está recuperándose.

Dicho eso la doctora volvió a entrar a la habitación seguido de los demás, todos vieron a Seokjin totalmente cansado pero sonriendo mientras sostenía dos pequeños bebés que dormían plácidamente, Namjoon se acercó lentamente a Seokjin quien le sonreía y lloraba de alegría.

Vio a sus pequeños hijos, uno con el cabello negro y más robusto, y otro con el cabello castaño y más pequeño, levantó primero a uno dejando un beso en la pequeña frente y después al otro repitiendo la acción.

-Son lo más bello que ví en mi vida, Jin son nuestros hijos- dijo esta vez besando la frente de su omega.

-Lo son Nam, al fin están con nosotros- dijo hablando alegre.

Los demás veían con ternura la escena, poco después se acercaron dando las debidas felicitaciones a los padres y amando a sus pequeños sobrinos, después los dejaron solos para que descansen pues Seokjin aún seguía cansado.

-Te amo tanto, soy el alfa más feliz del mundo- dijo nuevamente mientras veía con ternura a Seokjin y sus hijos.

Seokjin solo asintió mientras acurrucaba a sus hijos y cerraba sus ojos quedando dormido.

El día siguiente los bebés fueron anunciados oficialmente ante el reino y todos celebraron el nacimiento de no solo uno, si no dos pequeños bebés en la familia real, Taehyung y Jungkook junto a sus omegas le dieron los primeros obsequios a sus sobrinos, seguidos de Yoongi, pronto se tendría que hacer una celebración para los bebés pero talvez dentro de un mes, Namjoon cuidaba a su omega y a Jin.

Ese mismo día recibieron la carta de sus madres pues no podían ir aunque quisieran, los felicitaban y se alegraban por la llegada de sus nietos.

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Dos años pasaron demasiado rápido, los pequeños Kim SeoJoon y Kim MinJoon eran unos niños muy traviesos para su edad, cuidados por muchos sirvientes y mimados por sus padres, en dos meses ellos tendrían un pequeño primo por parte de Hoseok y Taehyung, y ya dentro de nueve meses la llegada del hijo de Jimin y Jungkook, el reino había crecido aún más, Yoongi fue ascendido a rey de otro reino por lo que tuvo que marcharse, claro que cuando se podía se reunirán con escusa de diplomacia.

Lamentablemente la madre Seokjin había muerto hace un año, era como si solo hubiese esperado para ver a su hijo feliz y con una vida sin riesgos, Taehyung debía hacerse cargo de ese reino por herencia ya que Seokjin no lo haría, pero para eso faltaban unos cuantos años o cuando su madre decida que ya no puede más, Jungkook había reemplazado a Yoongi por lo que sus deberes reales habían aumentado, pero no tanto como ser rey, agradecía aquello ya que así tendría siempre tiempo para pasar con su Omega.

Ese día Namjoon organizaba todo para partir con sus pequeños hijos y Seokjin a la casa de campo real, al llegar todos fueron a aquella pradera dónde los pequeños empezaron a jugar juntos, dos pequeños niños idénticos y a la vez distintos, SeoJoon era un niño fuerte, travieso y más activo, MinJoon era más calmado y delicado, era claro que uno era un Omega y el otro alfa, más por qué el pequeño SeoJoon era muy protector con su hermano.

Seokjin y Namjoon los veían felices mientras se sentaban y abrazaban como siempre, con Seokjin apoyado en Namjoon, los pequeños correteaban y jugaban con los soldados que los cuidaban, sabían que habría cosas que los pondrían a prueba pero ellos lo superarían juntos, ya que como toda pareja siempre habrá discusiones por cosas triviales, ellos se tenían confianza y jamás dejarían de amarse.

Mientras veían a los niños Seokjin besó de imprevisto a Namjoon quien correspondió rato después.

-¿Y eso?- preguntó con una sonrisa.

-Te amo, gracias por hacerme tan feliz- dijo el Omega mientras lo miraba con ojos brillosos el horizonte adornado con sus hijos.

-yo también te amo.

Así se quedaron observando su vida, la que tendrían, una llena de alegría y paz, con sus pequeños hijos alegrando el palacio y sus vidas.

Y hasta aquí mi reporte Joaquín XD, siempre quise decir eso.