Te Encontré [Namjin]

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El Omega estaba en shock, las palabras del retumbaban en sus oídos, Namjoon al ver a Seokjin solo pudo reír un poco.

-Me refiero a que tengamos una cita, dije de alguna manera lo que siento por ti, pero quiero que esto sea algo formal y deseo que aceptes una cita conmigo- dijo el rey, pues sus palabras eran de otra forma, pero el semblante de Seokjin mostraba miedo, por lo que solo pudo cambiar a una cita.

Seokjin suspiró tranquilo y agradeciendo a su "suerte", no negaría que sentía algo distinto por Namjoon pero aún se sentía confundido y temeroso.

-me parece bien Majestad, si así lo desea usted- dijo Seokjin sonriendo.

-no quiero que aceptes si yo lo deseo, si tú no deseas una cita conmigo lo entenderé- recalcó el Rey.

-Si deseo salir con usted, y agradezco que pase tiempo conmigo- dijo algo sonrojado Seokjin.

Namjoon solo sonrió y se alejó un poco, abrazo nuevamente al omega y dió por terminada la conversación por lo que fueron esta vez al salón real donde habían mandado a llamar al sacerdote, pues una boda ante varios presentes y testigos no era necesario, pero la bendición del sacerdote era importante.

Al llegar vieron a Jimin vestido con un hermoso traje blanco que dejaba a la vista sus clavículas marcadas y aquella marca que su alfa le había hecho, y Jungkook vestía de igual manera un traje pero negro destacando sus facciones fuertes.

Seokjin vio alegre a su amigo, el era un principe desde su nacimiento, pero unos mercenarios le habían arrebatado su vida, ahora volvería a tener una familia a lado de la persona que ama, el pensó nuevamente en encontrar a alguien a quien amé y este también y la imagen de Namjoon apareció provocando un rojo en sus mejillas.

-¿Te sientes bien?- Preguntó Namjoon al ver al Omega.

-¿Eh?, Ah....si, estoy bien- dijo Jin tratando de ignorar esos pensamientos.

-Si te sientes mal no dudes en decírmelo- y Jin asintió.

La ceremonia se llevó a cabo sin ninguna interrupción con los ancianos de la corte que se encargarían de hacer público al nuevo príncipe oficial del reino, la reina sonreía de oreja a oreja al ver a su hijo menor con la persona que amaba, se sintió tranquila pues según ella pronto sus tres hijos tendrían una pareja en la cual apoyarse, a la cual defender y volverse más fuertes, y los omegas eran distintos, hoseok era un Omega amable y seguramente el reino lo amaría más que ahora, pero también sabía separar los asuntos, Jimin era un Omega más sumiso pero que haría lo necesario para proteger lo que ama, Seokjin parecía distinto, más fuerte y regio aunque no lo haya conocido tanto podía ver en ese Omega firmeza, seguridad y orgullo, un digno Omega para su hijo mayor.

Tras las últimas palabras del sacerdote y después de la bendición real todos los dejaron.

-Mi hijo es un hombre derecho y correcto- dijo la reina abrazando a la pareja.

Los abrazos y palabras de felicidad llegaron a la pareja que solo sonreían y compartían su felicidad, el último en felicitarlos fue Namjoon como era la costumbre.

Y así como la costumbre lo dictaba dió la bienvenida al nuevo integrante de la familia real con dos regalos, un regalo elegido por el y otro que lo elegiría el pequeño Omega.

Namjoon ordenó que trajeran el regalo que había elegido para jimin, pensó mucho ya que realmente apreciaba a Jimin.

Una tiara de diamantes que llevaría como símbolo de su realeza y pureza como ser humano y Omega, una persona noble, dos tirantes de la seda más fina que sería el soporte de la tiara.

Jimin lloró de la emoción, pues aún estaba algo inestable con controlar sus hormonas, alegre abrazó al rey.

-Es realmente bello majestad- terminó de decir el Omega.

Jungkook estaba feliz, pues el regalo que su hermano le había dado era su forma de decir que estaba feliz por ellos.

-ahora dime pequeño, ¿Que deseas tú?, No importa lo que me pidas yo lo haré real- dijo Namjoon, pues sabía que Jimin conocía las costumbres y debía ser algo no fantasioso.

Jimin sonrió tímido, ya pensó en lo que pediría y estaba seguro que el Rey con gusto lo cumpliría, la cuestión era si la otra parte aceptaba.

-Siempre me dieron todo, incluso más de lo que imaginé y agradezco mucho sus obsequios, mi deseo es algo que espero no moleste a nadie- dijo Jimin.

-adelante cariño, nada de lo que pidas será molesto- recalcó la reina.

-Espero que se pueda conseguir, yo solo quiero que Jin venga al castillo para hacerme compañía- dijo Jimin dejando atónito al Rey y al Omega mencionado.

Los demás veían con asombro el pedido de Jimin, hoseok y Jisoo compartían una risa alegre y cómplice, los 5 alfas presentes estaban quietos, era normal tener compañía de generalmente omegas, la reina tenía betas que le acompañaban, hoseok tenía como compañía a Jisoo, ya que yoongi estaba más ocupado con asuntos reales junto al rey, no, ese no era el problema, el problema estaba en las segundas intenciones de Jimin, claro que solo los omegas y la reina pudieron darse cuenta y los demás no.

Namjoon por su parte estaba impactado, si tenía pensado encontrar una beta para que lo acompañe ya que Jungkook era muy celoso, pero pensar en Seokjin cerca de el las 24 horas era una idea que le gustaba.

-Bien Jimin, es un día especial para ti y no quiero ser yo quien lo arruine, Jin ¿Aceptarías ser la compañía de Jimin?- dijo directo Namjoon.

Seokjin pensó mil veces desde que oyó el pedido, no había probabilidad de encontrarse con sus padres o Kai ya que Jimin no lo permitiría y tampoco quería arruinar la felicidad de Jimin, ante la mirada de los demás decidió hablar.

-Si Jimin así lo desea será un honor, pero me gustaría dos semanas para poder dejar a mis pequeños huéspedes cómodos y sin necesidad alguna- dijo Seokjin y el rey aceptó el pedido ignorando la alegría de su madre.