Alfa Jerome

Yue

Un nuevo día llegaba a la manada, Jerome no tenía noticias sobre Steven o Dragos, eso indicaba que dentro de todo, la situación estaba controlada a su parecer.

Se dispuso a comenzar un nuevo día, después de que desayunaran, él pensaba llevar a las humanas al pueblo cercano para que la hermana de Brenda se reuniera con su esposo, y tratar de que al alejar a su luna de la manada el maleficio que tenía en su cuerpo se debilitara, aun así sabía que debía reunir mucha paciencia para lidiar con ella hasta que el hechizo fuera completamente removido.

<<Set- Una vez que se remueva la maldición en nuestra luna debemos averiguar quién la maldijo.

Jer- Pues si es alguien que piense que de esa forma la rechazaré pues podrían ser varias personas.

Set- Tu crees??

Jer- Los ancianos no creen en una luna humana, creen que me hará débil, también pueden ser las hembras que usamos en nuestra época de celo, mas de una quiso convertirse en nuestra luna.

Set- Cierto.... Ninguna de ellas daba la talla, todas ambiciosas y sin escrúpulos, peor que nuestras hermanas.

Jer- Bien habrá que concentrarse en esto, vayamos a desayunar así nos ponemos en marcha al pueblo.>>

Llegaba al comedor y escucho la discusión de Brenda con el pequeño Joaquín, un muchacho de once años que ayudaba en la casa junto a su hermana mayor Nai.

Bre- Escúchame enano inútil, quiero comida decente no esta porquería que no comerían ni los perros- gritando al muchacho quién mantenía la cabeza agachada.

Jer- (furioso) Basta- con su voz de alfa -Joaquín- suavizando su tono -sirve a todos el desayuno y a quién no le guste pues que no coma, anda pequeño- dicho eso el pequeño se fue corriendo a la cocina.

Clara quién tenía lagrimas en los ojos miraba suplicante al alfa enojado, Tina, la hermana de Brenda la miraba con desaprobación y las hermanas de Jerome prefirieron levantarse de la mesa e irse a desayunar a la cocina.

Bre- Soy la maldita luna de tu manda, por qué me desautorizas??- gritando furiosa.

Jer- (riendo sarcástico) Aun no eres la luna, todavía no esta mi reclamo en ti, es mas, incluso aun  puedo rechazarte y volverías al pueblucho ese de donde eres- dicho eso se sentó a la mesa a esperar el desayuno.

Brenda mientras tanto parecía un volcán a punto de erupcionar, su madre le pedía que se sentara y se callara, pero para ella era imposible.

Bre- Tu quien te crees que eres para rechazarme, seguro es por la ramera esa de la cazadora verdad??- con eso Jerome empezó a mostrar sus ojos rojos lo cual alerto a Tina y Clara -te crees que te dejare cambiarme por ella?? la matare antes, soy una gran guerrero, fui una de las mejores en mi escuadrón y una maldita bruja con complejo de cazadora no va a quitarme lo que es mío- gritaba con furia cada palabra y Jerome estaba al borde de perder el control.

Planeaba seguir gritando pero Tina la agarro de un brazo dándole la vuelta para que la enfrentara y con un puño bien cerrado y fuerte la golpeo dejándola inconsciente.

Cla- Está peor a cada momento, realmente no parece mi hija- soltando un sollozo.

Tin- Quién sea él que le hizo esto a mi hermana esta desesperado porque la rechaces- dijo mirando con enojo al lobo quien estaba agarrado al borde de la mesa con sus garras tratando de controla su furia.

Jer- Que preparen la comida para el viaje, salimos en cinco minutos- mirando a su luna inconsciente en el suelo- que Marcus la cargue hasta mi auto- le dijo a Clara que asintió con la cabeza, no se creía capas de tocarla sin querer lastimarla, sus palabras y acciones realmente lo habían enfurecido, imaginar a Brenda intentar matar a Dakota fue la gota que rebalso su vaso.

Dos horas después habían dejado a Tina en el pueblo con su esposo, él les había contado la destrucción total del nido del norte y que al sur solo quedaba uno, ya que el cazador Paul y sus guerreros habían destruido uno de los dos grandes nidos que allí había, sabía que el líder Steven estaba aplacando a los del nido del pueblo de Clara, eso indicaba buenas noticias.

Ya iban de regreso a la manada, Jerome conducía, Clara en frente y Brenda atrás que aunque ya no era tan hostil, seguía en sus pensamientos de superioridad y Jerome no la quería cerca, iba tan sumido en sus pensamientos que no noto a los vampiros impactar en su auto sacándolo del camino haciendo que se estrellaran contra un árbol.

Clara estaba golpeada, viva pero inconsciente, Brenda estaba algo aturdida pero bien y Jerome ileso a pesar del impacto, furioso bajo a enfrentar a esos chupa sangre, antes de salir le dijo a Brenda que no saliera pero ella no pensaba obedecerlo y bajo también del auto.

???- Vaya vaya pulgoso, muy valiente debo admitir- riendo bajo.

Jer- Quien eres sanguijuela??

??? Mi nombre es Yue, sabes no busco problemas contigo- y dirigió la mirada a Brenda -solo busco cerciorarme algo con tu luna- dicho eso empezó a acercarse a Brenda.

Jer- Crees que te dejare acercarte??- reía como loco -no eres nada para mi o mi lobo.

Yue- Probablemente tengas razón- dijo mirando sus uñas -por eso traje refuerzos.

Dicho eso, mas de treinta vampiros salieron del bosque cercano, Jerome sin pensar cambio dándole el control a Set, mataban vampiros si compasión, no eran hábiles para pelear pero eran muchos para él solo.

Yue- (acercándose a Brenda) Sabes solo quiero probar tu sangre, pues estamos en busca de una luna que es un tanto especial.

Bre- A mi no te me acercas mugroso, además yo no soy la luna que estas buscando- mirando a Jerome se le formo una sonrisa.- pero se donde puedes encontrar a la que buscas.- pero un rugido furioso la hizo callarse de repente.

Yue la golpeo enviándola lejos contra un árbol, concentrándose en el enorme lobo que tenía en frente, él era un vampiro antiguo, y era bastante fuerte para someter a un solo lobo aun cuando se tratara de un alfa. Le hizo señas a unos adolescentes recién convertidos que se encontraban en el bosque y ellos dispararon flechas de plata al lobo feroz impactando dos de ellas en su lomo y costillas.

Un aullido de dolor se escucho por kilómetros, Yue se acercaba a Set quien se encontraba débil por la plata rodeado de vampiros que lo tenían inmovilizado.

Yue- Sabes pulgoso, dicen que el mayor dolor que experimenta un lobo es el de su compañera engañándolo- Set gruñía furioso, deseaba arrancarle la cabeza a ese chupa sangre - Mathew, Bobby quiero que se diviertan con su luna, ella esta allá atrás- señalando el árbol donde impactó Brenda -pero la dejan con vida.- Y así salieron gritando y sonriendo como locos para donde se encontraba la mujer.

Set empezó a moverse colérico, quiso ponerse de pie, logro alejar a varios vampiros que lo tenían preso pero antes de escapar de todos, Yue le clavo una daga de plata en las costillas, opuestas donde estaba la flecha. Otro aullido de dolor salió de él.

A lo lejos se empezaron a escuchar los gritos desesperados de Brenda pidiendo ayuda, eso desesperaba mas a Set pero la plata lo había debilitado mucho sin mencionar que por la herida de la daga estaba perdiendo mucha sangre.

De repente los gritos de Brenda se detuvieron de golpe, Yue quien mantenía una espada de plata la cual tomaba con un guante ya que también la plata lo lastimaba y la daga con la otra mano, esperaba el sufrimiento del lobo en lo que violaban a su compañera para si después matarlo, pero ese dolor nunca vino, volvió a apuñalarlo con la misma daga y esta vez la dejo clavada y el aullido de Set fue de agonía, cuando de repente una lluvia de flechas cayo dejando a todos los vampiros que sometían al lobo desintegrados, miro en dirección a donde estaba la mujer del lobo solo para ver a una mujer con traje de cazadora, armada con todo tipo de cuchillos y dagas, cubierta con una capa y su rostro cubierto con una mascada, solo se veían sus ojos azules. Dos enormes lobos que parecían sacados del inframundo parados uno a cada lado de la mujer. El lobo miro a la mujer y en la mente del mismo se escuchó la voz de Jerome.

Jer- Dakota.

Jejejejeje no se lo esperaban.

Meli.