Nota de autora: Antes que nada les quiero agradecer por leer esta historia, y anunciarles que intentaré terminarla pronto para que no pierda su sentido inicial. También quiero disculparme por la tardanza y espero que este capitulo les guste.
-Luzu, he notado que tú y Auron se han reconciliado, me alegro mucho por ti -sonrió tomando su mano -Pero mentiría si te dijera que no me siento inquieto.
-¿A qué te refieres? -preguntó auténticamente confundido.
-Bueno... No sé si Auron sea alguien de fiar, sabes bien que no le cuesta engañar a las personas por su propio beneficio y adem...
-Sabes Willy, la gente si es capaz de cambiar, aún si les toma mucho tiempo; pero si nadie les da la oportunidad de hacerlo nunca pensarán que merecen cambiar.
-Luzu no dudo de lo que dices, pero ser precavido nunca está demás.
-¿Entonces ofrecerte a ir a mi casa era solo para alejarme de él?
-Era porque te extrañe. Pero también quiero evitar que te falle de nuevo.
-¡Willy! ¿No crees que Auron pueda cambiar?
-No.
-...
La mirada fría en su rostro le decía que hablaba en serio, Willy no confiaba en Auron ni lo más mínimo, pero eso también significaba que no confiaba en él, que no lo creía capaz de resolver por sí mismo los problemas de su vida. ¿Qué tan diferente resultaba no confiar en Auron a no confiar en él?
-Mira Luzu, sé que tú eres una persona muy bondadosa y que siempre quieres ver lo mejor en los demás, pero justo esa es la razón por la que se aprovechan de ti.
-Tienes razón, todos siempre se aprovechan de mí, sea por una razón o por la otra siempre hay alguien queriendo sacar provecho de mi vida, algunos de mi lealtad, otros de mi paciencia, otros de mi silencio, otros de mi bondad. Todos de mi credulidad.
Comenzó a caminar a paso pesado rumbo a su montaña sin quitar la vista del suelo –"Es momento de que me encargue de nuevo"
-Pero para eso estoy yo aquí Luzu, para protegerte de los demás -sonrió el albino alcanzando el paso del contrario.
-Te equivocas -sonrió -para eso estoy YO aquí, no necesito ayuda, no necesito sonrisas; simplemente me necesito a mí. Iré a mi casa y no quiero que me sigas.
-¡¿De qué hablas!?
-Vete casa Wilfredo.
-¿Entonces continuaremos con el plan? -suspiró camsado.
-¿Llamaremos al cuarto? ¿Será Alex? ¿O quizás Willy? -sonrió coqueto.
No hubo mas respuesta que un silencio abrumador, y es que el ambiente pesado se sentía de sobremanera desde que llegaron a esa cueva, pero ninguno se había animado a preguntar que era lo que ocurría; después de algunos meses sin un solo movimiento de nuevo Luzu los había llamado. Aun eran solo tres jinetes y no sabían lo que debían esperar en esta ocasión. Por alguna razón Lolito había culpado a los jinetes sobre la desaparición de Mangel, aunque todos sabían que Mangel estaba a salvo y que estaba huyendo por sus propios méritos.
O bueno. Eso dijo Mangel.
Sin embargo un hibrido de oso no podía evitar pensar que Luzu si tenía algo que ver con la falta del héroe, ¿por qué Luzu se había contactado con Mangel? ¿O por qué Mangel no se había contactado con él? Siempre habían sido mejores amigos, y que Mangel buscara a Luzu, con quien no solía hablar o convivir tanto, parecía de más de una manera algo muy extraño.
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Llevado al limite.
FanfictionLa vida en Karmaland no siempre es tranquila, es decir, vivir en el mismo pueblo que sus amigos y compañeros conlleva muchas peleas, dramas, traiciones, y risas por supuesto. Y siendo él, el siempre feliz Luzu ha tenido que tragar muchos abusos de c...