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-Tienes más de una semana sin asistencia, ahora tienes el descaro de venir a pedir una quincena de sueldo que ni siquiera has asistido. Es todo lo que te daré, me parece bastante comparado con lo poco que has trabajado últimamente.

Agachó la vista a su pies por unos momentos y después de pensar en las cosas que debía responder. Tomó compostura, lo miró a los ojos y le agradeció con una reverencia. Había sido irrespetuoso, irónico y también irresponsable. Sin embargo, el carácter que poseía no lo dejaba simplemente dejar caer sus hombros hacia abajo y rogar por más, aunque lo necesitara demasiado.

-Lamento mucho no haber venido y hacer un esfuerzo por hacerlo mejor, pero este trabajo ya no es tan cómodo como lo era para mí en su momento.

Y así fue como había salido de la oficina de su ex jefe de trabajo. Ahora, con vergüenza regresaba al lugar a pedir trabajo. Sí, estaba bastante consciente que no había pasado ni cuatro horas de lo ocurrido, pero ahora estaba más desesperado que antes.

Cuando había regresado al hospital y miró al doctor con un semblante serio y una preocupación por los pagos, y sobre todo, ver a Heesook en un estado grave de shook, no pudo soportar la idea de que todo lo que tenía se le venía abajo en tan poco tiempo. El padre de Taehyung, no iba a pagar nada, todo se lo dejaría a su hijo por ser tan inútil y menos mancharía el nombre de su local con ese tipo de cuestiones.

-Sí ella no responde, usted tendrá que hacerse cargo de la demanda. Pero tenga en cuenta de que esto no es un simple juego, su esposa se encuentra débil y sin habla. Los oficiales dicen que su declaración no puede ser tomada hasta que esté en un mejor estado para que no haya confusiones en el caso.

-Ellos creen que ella mentiría, pero estoy seguro de que él fue y también hay testigos que lo corroboran. ¿Porqué mierda no hacen algo?

El doctor se limitó a negar y sentirse asqueado por la situación. Taehyung había sido detenido, pero había una situación extraña que no bastaba para dejarlo encerrado. Pero...¿Qué era?

Jungkook se limitó a observar por los siguientes días a Heesook, sin hablar, sin pronunciar siquiera una palabra. Ella nunca lo vio, ni por un segundo y tampoco miraba a Jimin. Su mirada parecía que estaba en otro mundo, como si su cuerpo permanecía allí, pero su mente y espíritu en otra parte lejana a ellos. Tampoco quería abrumarla con preguntas, pero tenía tanto que decirle que le comía la cabeza verla de esa manera. Heesook no era Heesook, era simplemente una estatua.

-¿Te vas a caer, jungkook! -Sus risas imparables y su manera tan graciosa de gritarle por mantenerse en el suelo para evitar algún posible resbalo de la mesa lo hacía aún más divertido de ver. Estaba siendo un payaso para ella, pero eso también le gustaba a +él, lo mantenía feliz de ver sonrisas y escuchar carcajadas tan fuertes que le llegaban al oído y le llenaban el corazón de felicidad. Era adictivo. -Vamos, bájate. Puedes hacerte daño.

Jungkook sonrió por un milisegundo mientras observa el rostro perdido de la chica postrada en la cama. Se levantó de su silla y fue directo al costado donde ella miraba un sitio de la habitación y sin decir nada se acercó a sus labios y los besó con suavidad. Tal parecía que era más capaz de hacer lo que fuese en este estado, para él era más fácil llegar a ella mientras no lo miraba y simplemente mantenía la vista vacía. No obstante, le sorprendió cuando al separarse de ese beso tan dulce, ella lo estaba observando. Esos ojos oscuros y grandes lo miraban. Permaneció estático, lo aterraba la idea de que ahora ella estaba pensando lo peor sobre él, y era lo que menos quería en estos momentos. Comenzó a llorar y rogar porque no lo odiara, porqué él de verdad la amaba tanto que podría caer en una enorme depresión si lo rechazaba, aún sabiendo que era obvio lo que ocurriría. Una enorme punzada surgió cuando volvió a sentir los labios sobre los suyos una vez más, pero tomándolo con tanta necesidad que lo volvió más loco y enamoradizo que antes. Estaba loco por haber hecho eso o simplemente estaba enamorado, no lo sabía con certeza, pero él no podía alejarse, no tenía ni un poco de remordimiento, no lo pensaba demasiado. Sabía que en cualquier momento podía entrar su hermano o su madre o los padres de Heesook, pero eso era una cuestión que no le importaba. Sólo había una persona que podía detener ese momento tan maravilloso y era ella, y esa voz que no había escuchado hace tiempo, y fue ahí cuando todo a su alrededor se vió más claro que antes. Cuando volvió a escuchar su voz llamar el nombre de su hermano mayor mientras lo besaba a él.

|Lamento mucho no haber estado por bastante tiempo y además dejar aquí un fragmento tan corto. Estos meses no he estado muy bien para escribir y hoy es lo único que me ha salido. Espero comprendan y disfruten lo poco que les entrego. De ante mano muchas gracias por esperar y leer esta historia tan vacía.| Con amor, BLUE.

Inocente Señorita 2 [P.J]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora