27

667 55 18
                                    

Se escucharon unos pasos fuertes, un toque en la puerta y después sin esperar respuesta, entró el padre de Taehyung a su habitación con un cinturón en la mano. Tenía siete años, raspones en las rodillas y seguía llorando del ardor. Su padre se acercó a él y alzó su mano para golpear su estómago con más fuerza, que el niño grito fuerte y con intentos trató de cubrirse a cada golpe que su padre le daba con tal fuerza que lo único que le quedaba era cubrirse la cabeza con sus manos y recibir los golpes hasta que cesaran.

[...]

El llamado del juez por tercera vez lo sacó de su recuerdo.

—Tenemos al señor Kim Taehyung. Acusado por agravió, atentó con la muerte de la señorita Kim Heesook —Dirigió la mirada hacia ella, quién veía la mesa frente a ella.— Se le acusa de violentar a una embarazada y como consecuencia se dio la perdida del bebé. Los testigos aseguran haber visto al Señor Taehyung golpear repetidas veces en el estómago de la joven, que yacía en el suelo casi inconsciente. Gracias a los estudios que se le hizo a ambas personas, tanto como a el y ella. Se asegura de que la pérdida del bebé sí fueron a causa de los golpes, patadas que dio el hombre. Por lo tanto... 25 años por homicidio de un menor de edad, 12 años por intento de homicidio y años 5 por violentar a una embarazada.

—¡Señoria! Eso no puede ser —El padre de Taehyung se levantó de su asiento con coraje e impotencia.

El juez golpeó el mazo y dio por terminada la sentencia. El pelirrojo miró hacia sus manos y sintió como lo tomaban por la espalda y hacían que se quedara de pie para ser esposado. Lo empujaron suavemente para que camine y de ahí giró su rostro al lado derecho que se encontraba Heesook que lo miraba por encima del hombro de Jimin. A ése grado Taehyung no sentía la necesidad de correr, de gritar o siquiera llorar. Caminó escuchando como su padre le gritaba que todo iba a estar bien y que lo sacaría de allí, pero la verdad era que eso no podía pasar. Taehyung había caído hasta el suelo, hizo y enterró su propia tumba.

El aire fresco de fuera le erizó la piel a HeeSook, se abrazó a sí misma y después sintió los brazos de Jimin y un beso en la nariz. Se acurrucó en su pecho escuchando sus latidos y reconfortanse después de todas las emociones tan fuertes que había pasado hace unos minutos atrás. Era liviano ahora, se sentía mucho mejor su mente, cerró sus ojos y abrazó con fuerzas a su novio y dejó soltar unas cuantas lágrimas en memoria de su pequeño bebé.
Despues de unos momentos así, Jimin decidió ir a ver la tumba dónde está durmiendo el pequeño niño que no nació y que en fuertes circunstancias se supo el sexo. Ninguno dedicó tiempo de decir nada, ambos abrazados miraban la lápida que no sobre pasaba de un metro. "Estarás viviendo en nuetros corazones hasta el día que vayamos a verte"

HeeSook suspiró, relajó su frente y sonrió.
—Te amo...

—Te amamos.

Recargó su brazo en su hombro y la atrajo a él, le besó la cabeza y le susurró un te amo también hacia ella y recibió de vuelta lo mismo.

Jungkook tomó la mano de su mamá mirando hacia la lápida, sus ojos estaban humedecidos, casi las lágrimas saliendo y su madre estaba igual. Sin embargo, en todos había felicidad porque por fin se había hecho justicia, a pesar de que parecía que sería muy difícil debido a la influencia y el dinero de la familia Kim, pero habían sido bastante afortunados de que no haya sido así y muy valientes, sobre todo Heesook qué estuvo recordando mientras relató los hechos ocurridos aquél día tormentoso y doloroso.

[---]

La madre de Jimin volvía a su casa, y Jungkook también debía aun que para él era muy difícil ahora separarse de su hermano y de Heesook, su deber como estudiante volvía a comenzar. Sus maletas ya estaban hechas, lo más difícil era el despedirse de ambos.

Jimin relajó su cabeza en el hombro de Heesook a su lado, quién lo acariciaba suavemente y le daba de vez en cuando pequeños besos.

—Tus padres están muy contentos. Me hizo un bien el que hayas estado con ellos después de todo lo que ocurrió. Tú papá lloró... ¿Lo habías visto así?

—Nunca. Siempre fue un hombre que se le veía bastante rígido y seguro, aun así supuse que en cualquier momento él también estallaría.

—Es verdad, pero se siente bien ¿no?

—Se siente más qué bien ahora.

—Chicos... nos vamos ya —Habló la mujer por detrás y ambos se giraron para verlos. Jimin se apresuró para ayudar con las maletas. —Podemos tomar un taxi, no es necesario que nos lleves hasta la estación.

—Es lo poco que debo hacer después de que se hayan quedado con nosotros.

—Si señora, estamos agradecidos de habernos acompañado y de quedarse hasta más tiempo del que debían.

—No se preocupen, eso es lo que hace la familia —Se acercó para tomarle la mejilla a ella y sonreirle. —Pero tampoco se olviden de llamarnos, al menos una vez al mes. ¿Verdad Jungkook?

En ése momento las miradas se fueron a él, su nariz y ojos estaban rojos, lágrimas caían y temblaba. Jimin pronto se acercó para abrazarlo y acariciar su espalda.

—Está bien, está bien. Puedes venir cuando sean vacaciones, estaremos aquí para recibirte o alguna vez podemos ir.

—Los voy a extrañar —Dijo bajo y con voz quebrada.

Se aferró a su cuerpo y después de un rato se desvaneció el abrazo, miró hacia Heesook, no podía acercarse, sus piernas estaban estáticas. Hasta que ella fue quién le dio un largo abrazo, luego lo soltó para mirarlo a los ojos y se acercó a su mejilla izquierda para darle un beso. Jungkook cerró sus ojos sintiendo y guardando en su mente el tacto de los labios contra su mejilla y de pronto abrió los ojos para mirar los de ella y encontrarse con una ligera sonrisa, sonrió también.

No sería un adiós, si no un hasta luego.

Jimin observó a su novia quién estaba relajada en el asiento del copiloto y acarició una de sus piernas para llamar su atención.

—Eres hermosa... —Ella sonrió y acarició sus mejillas, sintió los labios contra la palma de su mano y después una ligera mordida. —Te amo Heesook.

—Y yo te amo a ti Jimin —Se sonrojó ligeramente y apartó la vista hacia adelante y mientras él conducía a su casa, Heesook estaba cada vez más feliz de poder dar justicia a lo que le pasó a su pequeño bebé.

💙💙💙💙Gracias por leer

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

💙💙💙💙
Gracias por leer.

Inocente Señorita 2 [P.J]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora