De conversaciones adultas

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El corazón de una Cullen

Capítulo XVII

De conversaciones adultas

Se duchó con toda la calma del mundo. Luego de que Alice interviniera oportunamente para hacerla desistir de su partida, a la morena no le quedó de otra más que seguir la pantomima de su familia –en un bloque conformado por Alice, Nessie y la propia Bella-, que al parecer se afanaba en hacerla notar ante Alexander como alguien deseado. Aspecto que la tenía turbada en vista de la belleza de su novia.

-Tía Gabriela –escuchó a Nessie en el pasillo-. ¿Estás lista?

-En un segundo salgo –soltó muy a su pesar. Había pasado la última hora debajo del agua por lo que sabía que no podía postergar más aquello.

Para cuando se ponía lo último de sus prensas su sobrina entró a la habitación de aquella acogedora cabaña que no había cambiado con los años.

-¿Estás segura que no prefieres alojarte en la casa grande? Hay más espacio que aquí, además nuestra biblioteca no está tan surtida como la del abuelo...

Gabriela sonrió por lo que trataba de hacer.

-Solo me quedaré un par de días, además, no le veo sentido quedarme por allá cuando son demasiados vampiros. Aquí estoy bien.

-Bueno. Entonces te prohíbo te enclaustres por acá; tenemos un año de no verte y debes convivir con todos. Y sí, con todos me refiero también a Alexander, ha preguntado por ti...

-No, Nessie. Basta.

Soltó firme pero con media sonrisa. La chica la miró con los ojos entrecerrados.

-Sé lo que pretendes y de una vez te pido que le pares. Es dulce lo que tratas de hacer, pero debes entender que él está con alguien más...

-Y tú pareces no entender la situación aquí. Dios, tía, eres tan testaruda que me desesperas. Papá me advirtió de esto, pero no creí que fuera cierto. Alexander solo trajo a Rebeca para darte celos.

La carcajada que le brotó desde lo más profundo de la garganta enfadó a Nessie al ver que su tía no se estaba tomando en serio aquello.

-Vaya, me alegro ser motivo de tu diversión.

-Ness, no quiero ser grosera, pero es más complicado de lo que parece ser. Es lindo ver que lo intentas, pero no funcionará.

-Ya veremos...

Salió decidida hasta el pórtico de su cabaña.

-Tienes quince minutos, tía. Planeé una serie de actividades en el transcurso del día ahora que todos llegaron ya.

...

Aunque para Gabriela no resultó una sorpresa las intenciones de Nessie, en su afán porque estuviera más tiempo en presencia de Alexander, aquello lejos de abonar a lo que sea que planeara su sobrina no hizo más que empeorar las cosas, pues se percató con un dejo de amargura cómo Rebeca había resultado ser alguien agradable y buena para él.

En la lista considerable de actividades, Nessie los había puesto a todos a jugar una especia de Trivia histórico que a la mayoría le encantó. Llevaban varias horas jugándolo y ello supuso una tortura para ella, pues si bien la estaban pasando bien –en especial por cómo el equipo de Carlisle era quien más batalla estaba dando-, el estar del lado de Alexander y su novia no lo hizo fácil por cómo ambos parecía se desenvolvían excelentemente bien como pareja.

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