Capítulo 4

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Pasaron tres días, luego cuatro... no fue hasta el viernes, es decir cinco días después de la fiesta que Nat regreso a la escuela. 

Antes de eso, nadie la había visto en lo absoluto, Steve decía haber hablado con ella al teléfono pero todos los días en la escuela se la pasaba frustrado pensando en Natasha, claro que aunque intentará el jamás me diría nada sobre ella.

Que Romanoff haya estado faltando seguido significa que yo hice la detencion sola limpiando aquellos malditos laboratorios, jodida Natasha.

Algunas veces ella faltaba de esa manera repentina por varios lapsos de tiempo pero nunca le había tomado importancia, ahora es diferente pues Steve realmente se ve más preocupado que en las veces anteriores.

El y Peggy hablan a escondidas de los demás, no lo sé… ella tampoco ha publicado nada en ninguna de sus redes. No es como que la siguiera, o estuviese buscando para asegurarme, Bucky me lo contaba… finalmente decidí dejar el tema por la paz, no es problema mío. 

Son las últimas semanas del semestre, todos están un poco locos.

Steve y sus amigos se encuentran tomando clases de álgebra junto con Hope, no son muy buenos en ello... Sharon y Peggy que recién se habían vuelto a integrar estaban en sus últimas clases de literatura.

Y, yo bueno, he excentado casi por completo mis asignaturas así que me encuentro en la cafetería terminando los pocos deberes que tengo pendientes.

Una refresh de dragon fruit proveniente de la tienda de la cafetería fue asentado a un lado de mi, rápidamente levante la vista para ver quién había sido la amable persona y fue cuando aquellos ojos verdes chocaron con los míos.

Romanoff... Me da una sonrisa y yo me siento más que extrañada. La miro de reojo esperando a que hable.

- Bien, lo diré, necesito los apuntes de química, soy mala en eso y me atrase con las faltas - Se sienta a mi lado y la verdad es que a diferencia de la Nat de siempre , esta vez se le ve abrumada.

- ¿A dónde fuiste tantos días? - Me miró y la sentí tensarse, me arrepentí de preguntar - Seguramente querías un descanso de mi,¿no es así? - al momento se relajo, y soltó una pequeña risa que me hizo sentir tranquila.

- Si, ya sabes, lo necesitaba pero veo que tu me extrañaste demasiado. - se esfuerza en mantenerse fuerte pero si observas su rostro con atención puedes ver que no es así - Imagina si tardaba un día más.

-Bueno, bebida por apuntes, aceptó - Comencé a buscar mi libreta de la asignatura y se la tendí.

Esa fue la primera vez en que ambas nos sonreímos de manera genuina desde que nos conocimos.

No se que estaba surgiendo en mi al verla de esa manera pero quería saber que le sucedía, quería saber si podía ayudar a que se sintiera mejor. Suena estúpido, lo sé, me llevo mejor con el profesor Jarvis que con ella pero soy Sagitario, no puedo evitar querer ser amable con todo el mundo. Es eso, ¿no? Solo quiero ser amable, no es que realmente me importe como se siente.

Me di cuenta de que la estaba observando más de la cuenta y como no quería parecer una psicótica, regrese a completar mis tareas, ella estaba concentrada en lo suyo, yo en lo mío... Es agradable, esta vez no hubo bromas, ni comentarios molestos, solo silencio.

- Esta mierda de las nomenclaturas, no sé, no entiendo - ella rompe el silencio señalando cierto ejercicio.

- Solo debes seguir estos pasos - con mi dedo apunte a la información que tenía subrayada - para describir los elementos y funciona para todo los tipos y eso - ella escucha atenta, esta a punto de preguntar algo más pero un flash de teléfono llama nuestra atención.

Hungry EyesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora