Para la mitad de esa semana, es decir, tres días después, Harry se dio cuenta de que tal vez tener citas sin tener que follar era incluso divertido. Ginny era una gran chica. Era graciosa, linda y extrovertida. Puede que no fuera tan fan del Quidditch como lo era Draco, y a veces tardara uno o dos segundos en entender sus bromas, pero aún así Harry casi, casi podía decir que ella le gustaba.
Claro, la falta de sexo seguía haciéndole dudar de vez en cuando, su miembro era el único descontento en todo el asunto. Y el que Ginny se le insinuara —lo cual ocurría todos los días en algún momento inespecífico— no ayuda mucho. Pero Harry se obligaba a cambiar de tema recordándose que él no era un adolescente que se dejaría llevar por sus hormonas. Él estaba atraído por fin hacia una chica fuera de la cama, no lo echaría a perder con su tonta lujuria.
Volviendo al presente, ellos se encontraban viendo una película en la pequeña televisión que había había el salón. Harry sabía que era una de ficción, pero no podía decir con exactitud cual. Era entretenido pero él no era un aficionado.
—Harry... —ella murmuró con la cabeza apoyada en su pecho.
—Dime.
—Um, ese amigo tuyo, Malfoy, ¿es gay?
Harry no parecía entender la pregunta, cpmo si la respuesta fuera algo obvia, pero tuvo que plantearse que Draco no era una persona que alardeara de sus preferencias y que ella no era la primera curiosa. A diferencia de otros, Draco era discreto cuando miraba a alguien, como se vestía, incluso la forma en la que refería sus gustos. Él no actuaba, ni lucía como uno. Si Harry no llevara años conociéndolo, y estuviera en posición de Ginny, quizás él también estaría confundido.
—¿Por qué la pregunta? —terminó respondiendo.
Ella dudó
—¿No lo es? Digo, lo he visto un par de veces cuando voy de visita y él me saluda, pero se ve casi como reservado —Harry asintió con la cabeza—. Pero... cuando viene a tu casa y está contigo lo noto, como distinto, ¿sabes? Más suelto, hasta alegre diría yo.
Harry no pudo evitar reír levemente. Es que se le era chistoso como ella parecía tan nerviosa de preguntarle algo así. Ginny no le estaba diciendo nada nuevo y él no tenía filtros a la hora de hablar de su amigo.
—Ah. Ya veo —dijo con diversión—. Pues sí, él es gay. Solo que uno más aburrido.
—¿Tú y él fueron algo? —soltó sin pensarlo dos veces.
Nuevamente, Harry se mostró poco sorprendido, a pesar de que estaba seguro de haberle dicho a ella en aquel pub que no era gay, el ser cuestionado sobre su relación con Draco no era extraño.
—Oh, sí. Una vez nos estábamos bañando juntos y ese lunático me metió un dedo enjabonado en el culo, ¿puedes creerlo? Después de eso salimos por dos años hasta que me fue infiel. Desde entonces le tengo miedo a las pollas.
Ginny respondió a su broma con una carcajada pegadiza y le golpeó el pecho, justo al lado de donde reposaba su cabeza.
—Tonto, estoy hablando enserio —le reprochó subiendo la mirada hasta encontrar los ojos verdes de Harry.
El de cabello castaño sonrió de lado, subiendo un poco sus lentes.
—No, nunca fuimos ni seremos nada. No le gusto a Draco y soy heterosexual. Solo somos mejores amigos.
—Ah... —si la convenció o no, Harry no hizo constancia por haberse distraído de nuevo con la película.
Al menos duró cinco segundos con la mirada en la pantalla antes de que ella lo atrajera hacia un beso. Harry suspiró mientras movía sus labios suavemente, todavía si ella parecía insistir en aumentar el ritmo, no quería excitarse en vano.

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Estrechez
أدب الهواةHarry está sexualmente frustrado. Aceptó el dejar de pensar en el sexo como algo prioritario para salir con una chica de manera formal, correcta. Cuando finalmente es novio de Ginny y deciden tener relaciones, él no está feliz de que ella no sea pr...