Capitulo 13

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Altercado mañanero

Un suspiro despertó a Jennie, limpió sus ojos para ver dónde estaba, cayó en cuenta que no era su casa.

Intentó levantarse, pero los brazos de Chaeyoung estaban atados a su cintura, una sonrisa mañanera se posó en los labios de Jennie al ver la cara divertida que traía Rosé, sus labios ligeramente abiertos dando una visión de sus perfectos dientes, sus pestañas cubriendo los ojos miel que tanto enamoraba a Jane.

La rubia sintió unos ojos penetrantes sobre sí misma, abrió lentamente sus párpados y como esperaba eran los de Jennie, sonrió al verla ya que creía que se fugaría al despertarse.

— Buenos días...

— Buenos días, Jennie.— sin dudarlo acercó la nuca de la chica para besarla.— Creí que te habías ido.

— No iba a perderme de tus besos.— bromeó.

Rosé pellizco cuidadosamente su abdomen y para la grata sorpresa, Jennie tenía el abdomen marcado.

Esto provocó en la chica un deseo de querer seguir tocando, aunque sea solo un poco.

Adentro su mano sobre la tela que la cubría, no la miraba a los ojos, solo se fijaba en su abdomen.

— Si quieres tocarme, pide permiso.— carraspeó Jennie mientras la chica rubia sacaba con cuidado su delgada mano de la prenda que la cubría.— Y... mis ojos están acá arriba, no en mi sostén.

Rosé se apenó un poco por dejarse llevar por sus deseos carnales, no era adecuado tocar de esa manera a la mujer que durmió a su lado, a la que antes de proclamar las buenas noches se besaron como verdaderas apasionadas, la que se montó sobre ella para casi iniciar una relación sexual.

No era adecuado ¿Verdad?.

Jennie sonrió ante la cara de perdida que traía Rosé, se levantó del suelo para tomar sus cosas e irse, todo indicaba que ya había terminado su travesía a lo largo de todo el día de ayer.

Agarró su celular y por fortuna su madre no le había marcado, miró hacía la ventana notando que era demasiado temprano, quizá eran alrededor de las 7 de la mañana.

— Rosie, creo que debo irme.— peinó un poco su cabello para no parecer una loca con su cabello desordenado.— No puedo creer que dormimos en el suelo.

— No es la primera vez que lo hago, pero.— se levantó estirando todo su cuerpo, como era obvio su pequeña playera dejó ver parte de su ropa interior mientras Jennie la observaba como boba.— Me duele un poco la espalda, el suelo no es para nada cómodo.

Jane sonrió al ver el puchero de Rosé por su dolor en la espalda, era tan tierna.

— Espera.— gritó al darse cuenta que ya estaba a punto de salir del departamento.— ¿Quieres desayunar conmigo?...

Jennie volteó encontrando una cara llena de amor, ¿Cómo diablos no iba aceptar desayunar con Rosé?.

Nadie rechazaría una propuesta de parte de ella, absolutamente nadie. Eso lo entendió Jennie, aceptando únicamente con una señal.

— Te prepararé un desayuno digno de una chef.

— ¿De una chef?.

— También cocino Jennie, aunque no lo creas, pero antes.— sacó de la alacena una bolsa con panecillos junto con un envase de nutella.— Mi pasatiempo favorito era cocinar, en especial si era con mi madre.

— Woooow.

— No es tan complicado, aunque a veces si desespera, pero después de quemar casi tres veces la cocina e incendiar por "accidente".— volteó hacia la chica que se encontraba sentada escuchando atentamente todo lo que decía.— Los sartenes de mi madre, vas aprendiendo.

For the Love of Jane [Chaennie]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora