For the Love of Jane [Chaennie]

Capitulo 41

Kill this love

— ...¿Rosé?.

Quedó muda, el flujo de sangre disminuyó considerablemente provocando palpitaciones más lentas, sentía que de verdad estaba al borde de la muerte.

— Hola...— sonrió de lado y en un susurro.

Seguía conservando su sonrisa y su cabello rubio, seguía igual como la imaginaba desde su última despedida.

— Perdón, Jennie.— trató de abrazarla pero se alejó quedando con los brazos extendidos.

— ¿Tu qué mierda haces acá?.— su pecho se comprimía.— ...Eres una hija de puta, Roseanne.

— Jen.— entró al departamento dejando a un lado el cuchillo del suelo.— Jen, escúchame.

— ¿Que quieres que escuché?.— la encaró.— ¿Que me cuentes toda tu jodida vida oculta? ¿Que me des una puta explicación de cómo llegaste acá?.

— No.— dijo sería y tranquila.— De verdad perdón... si nunca supiste de mi fue por qué no quería involucrarme en lo que has conseguido.

Trató de tomar su mano pero la empujó sin mirarle a los ojos.

— A mi también me ha dolido estar lejos de ti. Te necesito, Jennie...

— Te tardaste seis años.— río.— Solo para venir y decirme eso, mientras yo estaba como una estúpida buscándote en cada rincón del mundo.

— Jen-.

— Y todavía tienes el descaro para estar en mi departamento.

Intentó empujarla afuera pero se resistió, le dolía tener que verla en el momento menos indicado de la vida.

— Si vine hasta aquí es por qué de verdad quiero volverlo a intentar.— lagrimeo.— No logré soportar ni un segundo más sin ti.

— Pero si seis años.

Miraron la verdadera herida de sus corazones al mirar las orbes negras y profundas de sus ojos.

— ...Perdón, Jen.— lloró.

Esperó recibir un abrazo a cambio, pero no tuvo ningún gesto de disculpa.

— ¿Crees que en tu estupidez vas a llegar a pedirme perdón y solo con eso solucionar algo que ya está muerto, Roseanne?.

Cayó rendida al suelo, la chica rubia llevó su mano al pecho sintiendo a precisión su corazón romper.

Soportó como pudo mirar la escena de Rosé, paso a su lado abriendo de nuevo la puerta y levantando el cuchillo para evitar un accidente grave.

La miro llorar después de un largo pero largo tiempo.

La mujer en el suelo gateó hasta levantarse quedando frente a frente de Jennie. Las dos tenían los ojos rojos y cicatrices en sus mejillas.

Pero no aguantó más y se arrepintió por todo lo anterior.

Si de verdad supiera Roseanne lo que siente y sintió todos estos años quizá en este momento estarían en la cama arreglándolo de otro modo.

Era mejor evitar explicaciones del porqué llegó.

Aún la amaba y dolía tener que aceptarlo.

Pero no quita el hecho que se merecía más insultos por aparecer de la nada como un maldito mago.

Como la maldita hija de perra que era por aparecer así de la nada.

:O🥀.