LOS HIJOS DEL INFRAMUNDO

CAPÍTULO XXI

Hola a todos. Aquí les dejo el cap de hoy, espero les guste y no olviden dejar sus comentarios y votar

TISIFONE.

-Guapo, estoy aburrida- Digo mientras lo abrazo por la espalda.

-Alejate- Gruñe sin dejar de mirar los planos y no tardo en sentir miradas divertidas sobre nosotros.

-Estoy taaaaan aburrida- Suelto al tiempo que deslizo mis manos por debajo de la camisa para palpar un poco su vientre aunque me es difícil ya que su gran tamaño es imposible de rodear por completo.

-Tal vez si le agrego lágrimas de sirena- Murmura mientras me toma de las muñecas y saca mis manos de su camisa.

-¿Que quieres hacer?- Interrogo al tiempo que me siento en la mesa junto a sus planos y puedo apreciar su hermoso rostro que se muestra severo como siempre.

-¿Porque no te rindes?, si fuera tu ya estaría cansado de no lograr nada- Pregunta tomando un lápiz y anotando algo en una libreta.

-Mis ganas de ti no se quitan, se están acumulando- Digo y él pone los ojos en blanco para luego negar ligeramente.

-¿De donde sacas todas esas frases?.

-Las he leído y memorizado para este momento.

-Olvidalo. No quiero saber más.

Él continua observando el plano y trazando algo en la libreta mientras frunce el ceño ligeramente ante la concentración que tiene en este nuevo proyecto. Su camiseta negra y algo ajustada me deja apreciar su trabajado cuerpo además de que ese jean algo suelto le queda genial pues se ajusta un poco en su trasero, su cabello rojizo me hace querer peinarlo y sus labios...tan hermosos.

-¿Que trato hiciste con mis ojos que solo te ven perfecto a ti?.

El lápiz se le cae de la mano y un fuerte sonrojo llega a sus mejillas pero pronto se lleva el puño a la boca para empezar a toser, se agacha para tomar el lápiz del suelo y me lanza una mirada fulminante.

-Vete, estoy ocupado- Suelta con molestia pero antes de que vuelva a ponerse a escribir atrapo su mano con las mías y sonrió ante la diferencia de tamaño.

-Te amo, Hefesto, no dudes de eso- Murmuro con una sonrisa y su sonrojo se intensifica.

-Ven- Ordena caminando hacia las escalera para ir a su habitación.

No tardo en seguirlo y al llegar a su cuarto el cierra la puerta con seguro para luego sentarse en la cama. No espero a que me invite y me siento en sus piernas aunque lanza un gruñido a manera de protesta.

-¿Porque me traes aquí?- Interrogo con una sonrisa mientras juego con su cabello y acerco mi rostro al suyo.

-Por esto- Suelta para luego besarme con rudeza, su lengua rasposa arremetiendo contra la mía y dejándome apreciar la calidez de su boca.

Sus manos me toman de la cintura y me hacen mover sobre el bulto que trata de atravesar sus pantalones. Gimo ante la mordida que le da a mi labio inferior pero dejo eso de lado al sentir como desliza sus labios hacia mi cuello para besarlo con intensidad.

-Guapo- Gimo aferrándome con fuerza a su espalda al sentir como su bulto golpea mi intimidad por encima de la ropa.

-No te puedo asegurar que te gustara hacerlo conmigo- Suelta mientras me observa con una mirada cargada de deseo y lujuria aunque tambien de miedo.

-Cualquier cosa que haga contigo me gustara.

Hefesto sonríe ligeramente y en un movimiento rápido me acuesta en la cama para luego ponerse sobre mi, su lengua recorriendo mi cuello mientras sus manos acarician mis piernas para luego ascender hasta que sus dedos callosos juegan con el elástico de mi ropa interior.