Kageyama Tobio fue rechazado por sus cuatro almas gemelas en su primer año en Kitagawa Daiichi. Seguido de eso, estuvo involucrado en un accidente y dejo Miyagi sin que nadie lo supiera.
Tres años después, él regresa con sus padres, listo para come...
Kageyama Tobio conoció a sus almas gemelas demasiado joven. A la edad de 13 años, se encontró con dos de ellos en su primer día en la Secundaria Kitagawa Daiichi. Ambos tenían su misma edad, y sus nombres eran Kunimi Akira y Kindaichi Yuutarou. En su segundo día, sin embargo, también encontró a los otros dos. Sus nuevos sempais en el club de vóley, Iwaizumi Hajime y Oikawa Tooru.
Kageyama creyó que, a pesar de ser demasiado jóvenes, y ser cinco en una relación, todo estaría bien, ya que se tenían los unos a los otros, y durante medio año, así fue. Hasta la final del Inter High, todo estuvo bien. Sin embargo, después de perder contra Shiratorizawa, Oikawa cambió, y toda su relación se desmorono.
En sus mejores días, Kageyama no piensa en lo absoluto en sus almas gemelas y en el accidente en el que estuvo involucrado poco después, pero en los peores...
En sus peores días, Kageyama recuerda la noche en el gimnasio, en que le pidió a Oikawa que le enseñara a servir, y como él lo golpeó.
En sus peores días, recuerda la mirada de lastima en la cara de Iwaizumi antes de rechazarlo, y como Kunimi y Kindaichi no hicieron, ni dijeron nada por él, sino que siguieron a sus mayores sin cuestionar, y también lo rechazaron.
En sus peores días, recuerda como llegó a su casa sin derramar ni una lágrima, con la mirada vacía a pesar de estar sintiendo mucho dolor.
En sus peores días, recuerda como su abuelo le dijo que lo llevaría al día siguiente al hospital, para hablar con un doctor sobre la posibilidad de que él armara un muro en su mente, para bloquear las emociones de sus almas gemelas.
En sus peores días, recuerda ver la camioneta acercarse a gran velocidad hacia el taxi en el que iba con su abuelo, y como este lo abrazo para protegerlo del choque con su cuerpo.
En sus peores días, Kageyama recuerda como se quedó mudo, sin su abuelo y sin sus almas gemelas.
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¡Hola, Lectores! ¡Ya lo sé! Yo sigo empezando historias sin terminar las que tengo a la mitad, y estoy segura de que van a terminar queriendo matarme en algún momento, pero es que la idea para esta historia se me ocurrió de repente y no pude evitar comenzar a escribir. Espero que les guste.
