Si hay alguna falta ortográfica me dejan saber en los comentarios. Disfruten💕
(...)
— No quiero — me abrazo a mi misma mientras observo cómo Papi Bruce pone algo en el agua. Daddy Bruce está frente a mi tratando de quitarme la ropa pero no me dejaba.
— Muy bien Ryt, ¿Que tal si te vas y me dejas con esta pequeña?— dice Papi Bruce acercándose a nosotros apartando a Daddy.
— ¿Seguro?
—Claro, ahora lárgate— casi lo saca a empujones del baño y le cerro la puerta en la cara.
— Te dejare la ropa lista e iré a servir la comida— dijo detrás de la puerta.
— Si, Si, cómo sea— dijo lo suficientemente alto para que lo escuchara.
Una pequeña risa sale de mis labios a ver cómo se tratan, es una relación de amor y odio la de estos dos. Papi Bruce me observa con detenimiento mientras acaricia mi rostro y sonreí también.
Estaba sentada sobre el mueble del lavamanos cuando comienza a abrir los botones de la camisa.
Había un algo en él que me hacía sentir segura.
Me agarra por la cintura y me deposita en el suelo dejando caer la camisa por mis hombros. Me cubro los pechos con mis brazos ya que no tenía nada debajo de esta más que las bragas.
Espero que me diga algo pero solo prosigue quitándome las medias y bajar las bragas pero lo retrocedo un poco.
— ¿Podrías darte la vuelta, por favor?— susurró y el asiente dándose la vuelta.
Me quito las bragas rápido y me amarro el pelo en un moño alto desordenado con una liga que siempre uso como pulsera para en ocasiones de emergencia.
Me entro en la bañera con el agua más de media y noto como las burbujas del agua me cubrían.
—Te puedes girar.
Se acerca a cerrar la llave del agua que todavía corría.
— ¿Quieres una? — me pregunta señalando unas bolas de diferentes colores en una linda canasta dorada.
— No se que son— le digo encogiéndome de hombros.
El se ríe y elige una.
— Son esas bolas que pones en el agua y se deshacen soltando burbujas y un rico olor depende de su fragancia— asiento un poco aturdida, nunca había usado eso.
Asombrada le digo —Nunca había usado eso y menos he visto una de cerca, en mi país no nos bañamos— digo sin tener idea de lo que salió por mi boca.
Me sentía muy relajada, el agua fresca contra mi piel y el sube aroma de algo que no sabía bien lo que era.
— ¿Qué? — dice confundido y riendo.
Pienso unos segundos en lo que dije y abro mis ojos entendiendo.
— No, no, no quería decir eso— niego rápido haciendo que su sonrisa crezca en sus labios — Me refiero que no tenemos baño de espumas, son más así como duchas o baños rápidos ¿me entiendes?— miro hacia arriba ya que todavía estaba parado y yo me sentía aún más pequeña en esta posición.
El asiente aún riendo y me extiende aquella bola blanca con toque rosados.
—Te entiendo pequeña, cuando fui a tu país la primera vez me lo encontré raro pero después me acostumbre, ahora ponla en el agua— asiento mientras la tomo y la pongo en el agua y está se comienza a deshacer soltando un delicioso olor a coco.
ESTÁS LEYENDO
Una Pequeña Princesa Traviesa
Random¿Quien diría que un extraño entraría a mi habitación en medio de la noche? ¿Quien diría que esa noche me secuestrarían? ¿Quien diría diría que tres hombres me querían para ellos? Y no de esa forma. ¿Quien diría que después de ese momento mi vida c...