17:00 hs, minutos después de la boda.
— No puedo creer que prefirieron venir a hacer esto en vez de hacer ese viaje típico de recién casados. — Opinó Mitsuya mientras iba de la mano con Hakkai. — ¡Incluso no dejaste que Emma se cambie! — Refunfuño el platinado.
— Ya Mitsuya, que si sigues así se te va a reventar una arteria y no podemos permitir que Hakkai se quede solo. — Bromeó Draken.
Él sabía de ante mano que su amigo se enojaría al ver su precioso vestido recorrer las calles de japón que, aunque estén limpias, polvo siempre había.
— Lo dices porque tú no estuviste diseñando esto desde hace tiempo. No sé qué te vio Emma, ojalá te abandone en el avión y se tome otro vuelo. — Le sacó su lengua como un niño al más alto, sonriendo unos segundos después.
— Dejen de pelear, ya no son niños hermanos dragón. — Manjiro, quien iba sobre la espalda de Chifuyu, se sumó a aquella conversación.
Quería aparentar que era el más maduro, causando que todos allí comenzaran a reír por eso. Manjiro podría ser muchas cosas, pero no muy maduro que se diga.
— ¿Falta mucho? Me duelen los pies. — Se quejó un Takemichi con el rostro mostrando una mueca de dolor.
Había comprado zapatos un número menos del que debía y no pudo cambiarlo porque no lo notó hasta el día de la boda.
— Jodete, a ver si aprendes a revisar las cosas cuando las compras. — Regañó Yuzuha.
Iba del brazo de Hina, riendo por la conversación que tenían sus amigos en ese pequeño trayecto que debían hacer. Pensó que no se imaginaba una vida lejos de todas esas personas.
— Que son molestos, ya hemos llegado. — Cortó Kazutora, el que menos había hablado en todo ese recorrido.
Draken, Hakkai y Pah-chin comenzaron a excavar debajo de un árbol, justo donde habían enterrado una "cápsula del tiempo" hace 12 años. En ese tiempo, a aquellos adolescentes les pareció buena idea, deseaban ver en un futuro qué dijeron a esa edad de 14/15 años. Muy probablemente babosadas, no eran más que unos pcríos que se metían en peleas y causaban estragos entre otras bandas de Japón.
Todos allí querían saber si seguían opinando igual, si habían cumplido su sueño o dónde estaban en ese momento. Aunque sólo algunos de ellos participaron igualmente querían que los demás estuvieran presente.
Hakkai, quien no había aportado nada a la capsula, se ofreció a repartir las cartas. Cartas que ellos mismos se dejaron y cada quien comenzó a leerla, algunas partes en voz alta y otras casi en un susurro para ellos.
— Draken del futuro, ¿cómo estás? Espero que puedas confesarle tu amor a Emma, yo estoy harto de jugar al desentendido. — Apenas empezaba y ya había hecho reír a todos allí, menos la chica nombrada que se ruborizó. — También espero que tengas tu propio emprendimiento de motocicletas.
Cada uno siguió leyendo, arrancándole risas a los presentes en el lugar, no podían creer las ocurrencias que tenían algunos y los deseos absurdos que llegaron a escribir, aunque uno que otro les arrebató una lágrima
— Huh? ¿Alguno de ustedes recuerda haber dejado una caja aquí? — Pah-chin se encontraba un poco confuso, creía recordar que sólo serían cartas guardadas en un recipiente de metal.
— No creo, ábrela y ve si tiene nombre. — Ese había sido Mikey, siempre tan curioso.
Alguien aún más curioso que Manjiro, era Mitsuya, quien ya se encontraba agachado mirando el interior del pozo, tomando entre sus manos la enigmática caja. Sus ojos se abrieron de par en par, como si hubiese visto un fantasma posarse en sus manos. Su mirada se dirigió hacia Chifuyu, quien lo observaba curioso ante la reacción. Podría haberse imaginado cualquier cosa, incluso que sea brujería.

ESTÁS LEYENDO
Dear Keisuke: I still love you. [BajiFuyu] |
FanfictionDonde Matsuno Chifuyu le lee cartas a su alma gemela, Keisuke Baji. Aclaraciones: hay spoilers del manga, algunas otras cosas serán inventadas y sobre todo CONTIENE ANGST. Se tocan temas sobre la muerte, el suicidio, depresión y dependencias no sana...