°|Parte 9|°

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—¿Es un desconocido...?

Claro no me creyeron, les dije que me escucharan sin alterarse, ya que conozco a todos lo suficiente como para saber que se alteraran, me gritaran y me obligaran a decir todo.

—Bueno al que escucharon por llamada es un amigo mío, él a veces se queda adormir aquí cuando vengo solo —Explique más calmado.

—¿Por eso lo del comentario de la habitación?

—Si Jane, bueno él y yo nos tenemos mucha confianza porque él ha estado en mi vida desde que tenía cerca de 300 años y él me ha ayudado mucho a lo largo de mi vida, además de que es uno de los principales inversionistas en las empresas que son de mi total propiedad, además de que juntos creamos una empresa de vinos y licores y un plus, yo tengo acciones en la mayoría de sus empresas por no decir en todas, unas acciones llegando a más del 50% y claro él también tiene acciones de mis empresas y fabricas —Explique superficialmente nuestra relación, sabiendo que no estarían conformes.

—¿Y porque jamás había escuchado que él tiene acciones en nuestras empresas? —Me pregunto Leah directamente, se notaba enojada pero no tanto como hace unos minutos.

—Porque los asuntos de "mis" empresas se quedan entre mi abuelo, mis inversionistas, mis accionistas y yo —Suspiré con cansancio —. Nadie más tiene o puede saber de eso y la razón por la que no lo mencione antes, es porque él y yo tenemos asuntos delicados que tratar, además se suponía que él estaba en Japón, bueno si eso es todo, creo que me puedo ir verdad —Dije un poco frustrado.

Cuando me iba a dar la vuelta para irme me agarraron por los brazos, evitando que me fuera y al parecer no me podía ir peor, el timbre de la puerta principal se hizo escuchar. Todos me observaron interrogantes, me hice el que no escuchó nada, pero nuevamente no me creyeron y me apuntaron a las escaleras, claramente para que bajara a abrirle a "mi invitado" si supieran que yo no invite a nadie, ese idiota se invitó solo, o mejor dicho se invita solo a donde quiera que vaya, parece mi novio.

Volví a suspirar cansado ya que, si así era mi "nueva vida", que no pasaba de un día de vivirla, no quería ni imaginar como seria de ahora en adelante con ellos viviendo conmigo y no digo que me moleste, de hecho, pienso que tendré más compañía, pero será complicado.

Abandone mis pensamientos y baje las escaleras hasta llegar a la puerta, todo eso con el paso más lento que mi cuerpo no humano me permitió con todos siguiéndome y apurándome el paso, cuando estaba en frente de la puerta, volví a suspirar y me prepare mentalmente para verlo, puse mi mano en la perilla y la gire, pero cuando abrí la puerta no me dio tiempo de verlo, lo único que sentí fue un brazo en mi cintura y a alguien cargándome, por instinto envolví mis brazos en el cuello de mi agresor «si se le puede llamar así», cuando me bajo me beso, sí, definitivamente ese era "mi invitado".

—Ya deja de besarme Diego ¿Cómo es que me encontraste? Si no le avise a nadie de mi regreso

Un joven alto, de cabellos negros y ojos castaños, piel morena pero algo pálida, labios medianamente gruesos y rosados, piernas largas, rostro un poco aniñado, pero de facciones fuertes, nariz delgada y respingada, pómulos marcados y dientes color marfil, se veía con orgullo, todavía abrazando a Jacob con felicidad y cariño en su felina mirada.

—Ya te dije, tengo a mis contactos —Contesto riendo —, pero fuera de broma no puedo creer que no me avisaras, sabes el dolor que se siente saber que tu pareja no te dice algo de su regreso, uno aquí muriéndose de preocupación por saber si una carita tan linda como la de mi amor no estaba en este mundo

—Cálmese don dramas y para empezar tú y yo no somos pareja, ¿de acuerdo?

—De acuerdo corazón de melón.

Crepúsculo, Nueva Historia...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora