Capitulo final.

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Un año después...

Jung Hoseok.

Con un gran respiro y sosteniendo mi abultada barriga entra en la empresa con el emblema Kim es suficiente para recibir la atención de los empleados de la recepción me indican en camino hacia la oficina de Taehyung y nerviosos por el cachorro de pronto cumplir nueve meses que cargo en mi vientre soy el centro de atención hasta ver mi salvación.

− ¡Hoseok! ¿Qué haces aquí?

−Vengo a ver a mi esposo, claramente.

−Jin te advirtió que no hagas movimientos bruscos. ¿Qué hay del bebé?

−El bebe no deja de patearme el intestino porque quiere ver a su papá.

Haciéndome el favor de acompañarme al fin me digno en visitar por primera vez este lugar, llegando al ultimo piso de arriba desde el cristal observo lo que con tanto empeño ha trabajado mi Taehyung. Saliendo del elevador Namjoon me guía hacia su oficina y tras anunciarme soy recibido por mi alfa que se pone de pie emocionado por mi visita.

−Lo dejare a solas, tengo que retirarme.

−Gracias, Namjoon. Hiciste un buen trabajo.

Después de que agradece Namjoon, el castaño me lleva adentro para que tome asiento en la pequeña sala, estiro mis pies ahora hinchados y como si me tratara de un cerdito con sobrepaso me doy un respiro sobando mi vientre.

−Antes de que digas algo acabo de salir de mi revisión, no me sentía con ánimos de llegar a casa porque mi pequeño ha estado dando patadas a lo loco. −Aviso mientras lo veo acomodando lo de su escritorio− ¿Cómo ha estado el trabajo hoy?

−Bien, los empleados están emocionados por la reunión familiar que patrocina la empresa. −Lo noto nervioso por guardar todo lo de su escritorio− Mañana mismo Namjoon tendrá el cargo de la empresa.

− ¿Está bien que Namjoon tenga se haga cargo de todo?

−Si, con mi hermano Yoongi vacacionando en una de sus islas a quien mas confió es a Namjoon. Se que hará un gran trabajo mientras te cuido.

Recupero el aliento, lo suficiente para escabullirme y ver cada retrato de fotografía en su escritorio, en cuanto nota mis manos puestas en los marcos, me llena de nostalgia ver cada momento. Nuestra boda en Japón y en México, nuestras reuniones familiares y esa fotografía que se encuentra debajo de su mano boca abajo.

− ¿Qué? ¿Es una fotografía de tu amante Namjoon?

−Tal vez.

La guarda en su primer cajón y antes de que pueda poner mis manos en ella, posa sus manos en mi vientre, las patadas se tranquilizan y dejándome ese gusto de sentir sus caricias ahora descanso sobre sus piernas.

−Pronto veremos a nuestro bebé Mark. −Le recuerdo a la bomba de tiempo que esta en mi vientre mientras acaricio su cabello− Sera de nuevo una sensación para tu familia tener un bebé.

−Estará lleno de tantos regalos y amor. −Besa mi frente sin dejar de acariciar mi vientre− En cuanto salga de aquí seré completamente tuyo y el pequeño Mark.

−Aun no me lo creo que estarás conmigo en la mansión.

El trabajo de Taehyung se había vuelto al abrir más sucursales de paquetería en latino América por lo que se puso estricto con su tiempo en cuanto supo de la llegada de nuestro bebe, la gran atención y tiempo estaba puesta en nosotros y su alfa enfurecía al no ver a su cachorro por lo que era imposible negarle el tiempo.

−Tengo que firmar mi salida. ¿Puedes esperarme precioso?

−Si, está bien.

Asiento varias veces, me pongo de pie para verlo irse un momento para ir a la entrada, sabía que tardaría solo unos segundos por lo que abro el cajón de su escritorio donde guardaba el marco con la fotografía y era culpa del embarazo que me sintiera así de sensible.

Taehyung regresa, pero esta vez frenético al verme llorar y es que no era nada más la fotografía que sostenía en mis manos sino debajo de mí estaba el líquido saliendo mío, haciéndome saber que se me había roto la fuente. El escándalo se había formado en la oficina y yo calmado en un dolor tolerable me siento como un gran enamorado y es que no iba a ser. Estando en el borde del colapso por el dolor que aumenta, suspiro estando ahora en una camilla de emergencia de ambulancia y mirando al cielo. 

Con el collar tintineando en mi pecho, con el que se prometieron amor mis difuntos abuelos maternos, miro al cielo refiriéndome a ella y nuevamente convenciéndome.



Abuela, amo a este hombre.

 −Abuela, amo a este hombre

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Fin.

Fin

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Gracias por leer esta historia

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Gracias por leer esta historia.

De corazón sin tienen abuelos que los amen aprecien que sigan con ustedes y para aquellos que se fueron recuerden esos momentos lo que les hicieron lo que son ahora, aun sea el recuerdo acido y dulce de un limón con una pizca de azúcar.

AAAEH🍓Vhope ¡COMPLETO!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora